Puigdemont mantiene la posibilidad de interponer una nueva demanda cautelar ante el TGUE “si fuera detenido por una autoridad de ejecución de un Estado miembro o de que se llevara a cabo alguna actuación dirigida a entregarlo a las autoridades españolas”.
Lo dijo el propio Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) cuando desestimó las primeras medidas cautelares que le solicitaron Puigdemont, Ponsatí y Comín: “la inmunidad que ampara a los diputados durante sus desplazamientos al lugar de reunión del Parlamento o cuando regresen de éste permanece jurídicamente intacta”, porque España ha suspendido las órdenes de detención europeas. Añadiendo entonces que, al no existir ninguna posibilidad de que fueran a ser detenidos, no había necesidad de mantener la medida cautelar de suspensión que solicitaron los políticos catalanes.
En caso de que las órdenes europeas de detención se reactiven o fueran detenidos, como le acaba de ocurrir a Carles Puigdemont, podrán solicitar nuevamente la medida cautelar de suspensión: “Pese a la desestimación de la demanda de medidas provisionales, los diputados mantienen la posibilidad de interponer una nueva demanda sí, con posterioridad al presente auto, el perjuicio alegado resultara suficientemente probable, en particular en caso de que fueran detenidos por una autoridad de ejecución de un Estado miembro o de que se llevara a cabo alguna actuación dirigida a entregarlos a las autoridades españolas”.