La Historia de la Humanidad es la Historia de la necesidad de Justicia. Esta afirmación es aún más evidente y clamorosa cuando esta necesidad ha sido despreciada por las élites gubernamentales, ya fueran éstas de naturaleza monárquica o republicana, de izquierdas o de derechas.
En el pasado, cuando el acceso al monarca o al representante civil del pueblo, era más fácil hacer justicia ante las injusticias y la posibilidad de justicia social o popular era mayor; si se hacía necesario, dada la condición tiránica del gobernante, incluso se hacía deponer al tirano, como indicaban los principios clásicos latinos:
''Tirannum occidere non modo licitum est sed æquum et iustum''.
Aún en esas condiciones, mejores que en la actualidad, las acciones políticas, sociales e, incluso, revolucionarias, protección de familia, municipio, gremio y reino o república eran completados o respaldados, a instancias de los poderes y del pueblo, ''por los Cielos y las Alturas''.
Hoy, el poder y la capacidad de actuación y legislación no la tienen realmente los que elegimos (ni siquiera los que vemos, como sí sucedía en la Europa del señorío, vasallaje o feudal) sino grupos de poder financiero, usureros y globalistas, con nombre y apellidos, pero que actúan en las sombras y pérfidamente, y cuyo poder no sólo viene del dinero, de las propiedades materiales y los vínculos o alianzas políticas sino de los siglos, de las generaciones sanguíneas y '' de las oscuridades ''. Reflexione el lector en este punto por unos minutos y verá parte de la razón de la Oración y Contemplación.
Siendo esta la realidad que la Historia de la Humanidad ha constatado en sus revoluciones y cambios (muchas de las veces siniestros y perniciosos para el pueblo) y en su devenir, no sólo es necesario sino justo e inteligente complementar el activismo y la acción revolucionaria con la reflexión, la contemplación y la Oración. En esta máxima es fundamental y ocupa un papel central una Institución Eclesial que acaba de cumplir 175 años:
La Real Congregación de Guardia y Oración al Santísimo Sacramento.
¿ Qué es exactamente, de qué se ocupa y cuáles son las características de sus miembros o Milicia del Espíritu?
- En 1508 se funda la primera Cofradía del Santísimo Sacramento.
- En 1601 se Celebra el Jubileo de las XL Horas durante tres días en la Iglesia de la Compañía de Jesús con asistencia del Patriarca de Jerusalén y Arzobispo de Valencia, San Juan de Ribera.
- En 1607 dieron comienzo en la Catedral de Valencia las XL Horas que, hasta la fecha, van recorriendo parroquias de la ciudad del Turia.
- Siendo Arzobispo de Valencia, Fr. Juan Tomás de Rocaberti, Valencia obtuvo la Bula ''Laus Perennis'' a imitación de Roma siendo la primera ciudad hispana donde se introdujo la Devoción y Culto al Santísimo Sacramento por XL Horas.
-El 27 de junio de 1847 se fundó en Valencia, en la Iglesia de Santa Catalina, Mártir, la Real Congregación de la Guardia y Oración al Santísimo Sacramento en las XL Horas:
Consistente en acompañar a Jesús Sacramentado y Custodiado.
- En 1880 se funda la Adoración Nocturna, siendo igualmente la ciudad de Valencia la primera de muchas ciudades hispanas en toda la Cristiandad.
- En 1884, como forma de mayor cariño, culto y ascesis reparadora, por la nación y los pecados, se introdujo el uso de reclinatorios en la Guardia y Oración.
- En 1894, como fruto del I Congreso Eucarístico Nacional, se inaugura canónicamente la Adoración Nocturna.
- En 1947 se celebra el I Centenario de la Real Congregación de Guardia y Oración al Santísimo Sacramento o Las XL Horas en Valencia, al servicio de la paz y unidad hispanas basadas en el Sagrado Corazón de Jesús y en el Inmaculado Corazón de María con el respaldo del Santísimo Sacramento o Eucaristía.
- En 1997 es el 150° Aniversario.
Como conclusión, y desde una perspectiva teológica, pero también pragmática (Fides et Ratio) decir:
Para descubrir y contemplar la importancia, la antigüedad y actualidad, y, a su vez, el pragmatismo, de La Real Congregación de Guardia y Oración al Santísimo Sacramento, no perdamos la perspectiva que toda obra buena y toda edificación exige:
reflexión, preparación y perspectiva; esto es lo que proporcionan instituciones como La Real Congregación de Guardia y Oración al Santísimo Sacramento y la labor de sus miembros; además, toda acción y estrategia política o militar exige de la misma contemplación y de la solicitud de inteligencia a quien es la Inteligencia, aunque este último elemento sea una cuestión de fe tiene cierto sentido de razón. Invitamos al lector a unirse a esta Milicia Real para el bien actual y futuro:
No deje el lector de pedirlo.