Cuesta trabajo llegar al convencimiento de que el humanismo está tan alejado de gran cantidad de dirigentes políticos y presidentes tales como Donald Trump o Netanyahu, porque hay que tener muy mala uva para realizar una matanza de palestinos como la que se lleva perpetrando desde hace largo tiempo, lo que ha tenido como consecuencia la muerte de, según cifras oficiales, 47.000 personas, gran parte de ellos ancianos y niños. Cuesta creer que el primer mandatario de Israel sea capaz de conciliar el sueño por las noches.
No me llego a creer cómo puede haber responsables políticos y militares que, cuando se estaba negociando un alto el fuego en Gaza, hasta el segundo antes en que se llegó al acuerdo, seguían matando palestinos sin ninguna consideración ni atisbo de humanismo. Creo que cuando se llega a un nivel así de crueldad, la cualidad de racional que se le adjudica al hombre es tan pobre que lo hace indistinguible de la fauna animal. Ésta, por lo menos, mata para comer, para vivir, pero Netanyahu mata por odio, por venganza, no tiene justificación ni perdón.
El hecho es que se ha llegado a una tregua en Gaza, ¿cuánto durará?, ni se sabe, pero mientras se está produciendo el intercambio de rehenes israelíes por presos palestinos, la mayoría de ellos sin culpa alguna, que solo sirven para dejar hueco en las cárceles, la masacre de palestinos sigue por Cisjordania. El caso es no parar el exterminio que, a estas alturas, nadie duda de que sea el objetivo principal que persigue Israel.
¿Es que nos hemos acostumbrados a que cada día mueran decenas de palestinos? Yo por lo menos no. Me duele la sangre de mis compañeros de condición humana, como me duelen todas las muertes de todas las guerras del planeta, así como de los que mueren por falta de sustento pata vivir, o medicinas con qué curar las enfermedades que atacan a mucha gente, especialmente del continente africano.
¿Se nos ha olvidado ya lo de la creación de dos estados que puedan vivir en paz?, ¿nos creemos que detrás de los muertos palestinos no vendrá un amplio contingente de guerrilleros de Hamás? ¿Quién será capaz de poner fin a esta barbarie? Estados unidos con Donald Trump a la cabeza ya se ha pronunciado de forma despiadada: limpiar la franja de Gaza y enviar a los palestinos a países limítrofes como Egipto o Siria, lo que sería el fin de la nación Palestina. Luego ya se encargarían, poco a poco, o de golpe, de eliminar a los palestinos que actualmente residen en Cisjordania.
¿Y el resto de países que piensan? Para China ésta no es su guerra y Rusia está enjugascada con Ucrania y pensando en abrir nuevos frentes. Nos queda la vieja Europa, la de las libertades, la del Estado de Bienestar, pero con Italia en manos de la fascista Meloni, y con la extrema derecha acosando a Francia y Alemania; y todo esto sin contar con la existencia de la Hungría de Orban y los Abascales de turno que, cada vez más, se reproducen por todos los rincones de la Unión Europea, ¿llegará a aparecer otro Milei que gobierne en países de nuestro entorno?
Pero mientras tanto, solo quiero alzar mi voz para que sea escuchada por los que callan y colaboran con que esté ocurriendo lo peor: que el genocidio palestino deje de ser noticia y nos acostumbremos a ver como muy normal la muerte diaria de decenas de personas inocentes que se merecen vivir en paz y libertad.
Que así sea. Por favor.