Trump ha formulado la idea de convertir Gaza en un lujoso resort turístico del Mediterráneo Oriental, "la Riviera de Oriente Medio que sirva como trampolín de la hegemonía estadounidense en la región".
Limpieza étnica en Gaza
Tras el castigo asimétrico infligido por Israel en Gaza, toda la infraestructura básica, escuelas, mezquitas, hospitales y el 80% de los edificios habrían sido arrasados por los bombardeos sistemáticos de la aviación con el resultado de más 47.000 víctimas civiles palestinas y varios miles más enterrados entre los escombros.
El verdadero objetivo de la campaña militar de Gaza sería provocar una segunda nakba en la que 1,5 millones de palestinos se verán obligados a abandonar una Gaza convertida en un amasijo de escombros y restos humanos que imposibilitará el retorno de la población gazatí desplazada y los confinará en un gigantesco campo de concentración al aire libre en Rafah.
Dicho confinamiento forzoso de la población gazatí sería una medida de presión para que Egipto abra su frontera y los palestinos queden asentados en la Península del Sinaí, tras lo cual Israel procederá a la Declaración unilateral de la soberanía sobre Gaza y sus zonas marítimas.
¿Será Gaza la Riviera de Oriente Medio?
El yerno de Trump, Jared Kushner, propietario mayoritario de la sociedad inmobiliaria Kushner Propiedades presentó el año pasado, calificó la costa de Gaza de "muy valiosa". Siguiendo sus indicaciones, Trump ha formulado la idea de convertir Gaza en un lujoso resort turístico del Mediterráneo Oriental, "la Riviera de Oriente Medio que sirva como trampolín de la hegemonía estadounidense en la región".
¿Israel, nuevo nodo gasístico?
Según los acuerdos de paz de Oslo, las aguas territoriales palestinas se adentrarían hasta 20 millas náuticas en el Mediterráneo y tras el acuerdo firmado en 1999 entre la Autoridad Nacional Palestina con British Gas Group en 1999, las prospecciones determinaron que las reservas de gas en la zona ascenderían a 1,4 billones de metros cúbicos, de los que un 60 % corresponderían a los palestinos y el resto a Israel.
Dicha cantidad permitiría satisfacer durante años las necesidades eléctricas de la Franja, y además exportar al extranjero pero su explotación requería el acuerdo a tres bandas entre Israel, Hamas y la ANP. Sin embargo, tras la invasión de Gaza por Israel, Netanyahu habría decidido asumir el control de las rutas marítimas y la exploración de las reservas de gas gazatí que quedarían integrados en las instalaciones en alta mar de Israel.
El objetivo confeso sería convertir a Israel en un nodo clave para el suministro de combustible fósil a través de gaseoductos conectados al continente europeo desde los yacimientos de Tamar y de Leviatán. Así, obviando el Derecho Internacional y antes incluso de iniciar la invasión de la Granja de Gaza, Netanyahu concedió 12 licencias a seis empresas para explorar y descubrir campos adicionales de gas natural en alta mar.
Canal Ben Gurion
El siguiente objetivo judío-estadounidense sería proceder a la construcción del Canal Ben Gurion, proyecto que lleva el nombre del padre fundador del régimen de Israel, David Ben Gurion y que fue concebido a finales de la década de 1960 con miras a crear una ruta alternativa al canal de Suez, la principal ruta marítima que conecta Europa y Asia y que de esta forma quedaría bajo control judio- estadounidense.
El puzzle se completa con la anexión de Cisjordania por Israel?
La anexión de Cisjordania contaría con las bendiciones de Trump, no siendo descartable una nueva nakba hacia Egipto y Jordania que significaría de facto la desaparición del Estado Palestino.
Por su parte, el Ministro de Defensa, Israel Katz, el pasado agosto propuso "evacuar temporalmente Cisjordania con el fin de frustrar las infraestructuras terroristas adoptando todas las medidas necesarias, incluida el desplazamiento forzoso", de la población Palestina asentada en Cisjordania.
Así, tras ser elegido Ministro de Defensa, Katz, se habría retomado dicho Plan azuzado por la ultraderecha israelí y el movimiento colono que intentan aprovechar la inercia en Gaza para avanzar en sus objetivos de ocupación de una Cisjordania que para ellos sería el "Área de Judea y Samaria" dentro del atavismo del Gran Israel.
En este contexto, el Estado de Israel declaró en el 2923 más de 2.300 hectáreas en Cisjordania ocupada como "tierras estatales" y a finales de mayo, el Ejército israelí cedió importantes poderes legales en Cisjordania ocupada a funcionarios colonos dirigidos por Smotrich, cesión calificada por expertos legales como "una anexión 'de facto'.
La operación "Evacuación de Cisjordania" habría comenzado tras el cruento ataque de Hamas del 7 de octubre y cerca de 800 palestinos habrían ya fallecido debido a operaciones del Ejército de Israel y a los ataques de colonos israelíes en Cisjordania y en Jerusalén Este.
La existencia de dicho Plan de anexión de Cisjordania vendría corroborada por el ministro de Finanzas de Israel, Bezalel Smotrich, quién en una reciente reunión de su partido, el ultranacionalista Sionismo Religioso, afirmó que "tanto Gaza como Cisjordania les serán arrebatados para siempre a los palestinos", al tiempo que indicó que "el 2025 es el año de la soberanía en Judea y Samaria".
Así, el Gobierno de Netanyahu estaría acelerando los plazos para implementar el endemismo del Gran Israel (Eretz Israel), ente que intentaría aunar los conceptos antitéticos del atavismo del Gran Israel (Eretz Israel), que bebería de las fuentes de Génesis 15:18, que señala que " hace 4.000 años, el título de propiedad de toda la tierra existente entre el Río Nilo de Egipto y el Río Eúfrates fue legado al patriarca hebreo Abraham y transferida posteriormente a sus descendientes".