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¡Vergüenza nacional! España primer país en casos de acoso escolar ¡Uno de cada 10!

09 de Junio de 2025
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Acoso escolar

Según las estadísticas de la ONG Internacional Bullying sin fronteras, nominada al Nobel de la Paz 2025, en el 2023 éramos el quinto país del mundo en casos de acoso escolar, conocido también como bullying y nuestros gobernantes ¡lo han conseguido!  Las estadísticas de 2024 ya dicen que somos el primer país del mundo en casos de ciberacoso, también conocido como ciberbullying. ¡Con 300 000 casos conocidos!

 

¿Qué hacemos ahora? ¿Invitamos a los acosados, acosadores y a sus destrozadas familias a la Plaza de Cibeles de Madrid a celebrarlo? ¿Ustedes creen que cabrán en ese espacio 1 de cada 10 de nuestros escolares y sus respectivas familias? ¿Invitamos también al presidente de la Nación y a los de las Comunidades Autónomas? ¿Invitamos al ministro de Interior, al de Educación o a la ministra de Igualdad?

¿Cómo se puede estar haciéndolo tan mal y que no se les caiga la cara de vergüenza a nuestros gobiernos y a esas instituciones que deberían velar por una buena convivencia escolar?

Cifras

Según  la Fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo) a finales de 2024 el  9,4 % de los escolares sufría Bullying.  Para ellos no es ninguna sorpresa, porque ya venían denunciándolo desde hacía tiempo:

 

Aunque el hecho de estar a la cabeza del «ranking del infierno» con 300 000 casos de acoso escolar ya es más que preocupante, si atendemos al mencionado informe de la Fundación ANAR que afirma que el 9,4 % de nuestros escolares sufre algún tipo de bullying y lo cotejamos con los datos del Ministerio de Educación sobre escolarización, que arroja una cifra de 8 337 000 alumnos escolarizados durante el curso 23/24 , obtenemos una cifra todavía más brutal que dobla los datos de acoso de la ONG Bullying sin fronteras:

¡783 000 escolares, con nombres y apellidos, que se sientan en un pupitre habrían sufrido algún caso de acoso!

A finales del año pasado en otro artículo de este mismo medio Juan Carlos Ruiz, habla de un estudio en el que el 25% de los alumnos había sido acosado. Imagínense ustedes si en vez de por 9,4 multiplicamos por 25.

Espero, quiero y deseo que esos casos hayan sido leves y hayan tenido un final satisfactorio, porque detrás de los números hay adolescentes y niños que tienen nombres y apellidos y viven en nuestro pueblo, en nuestra ciudad o en nuestro barrio.  Tienen padres y madres y puede que nos crucemos con ellos por la calle sin saber el infierno por el que están pasando:

  • Laura F. G. de Santa Cruz de Tenerife, 8 años, muy tímida, hija de Emilio P. y Vicenta G.
  • Felipe H. C. de Zamora, 13 años, demasiado extrovertido, hijo de Andrés U. y de Andrea B.
  • Alicia V. N. de Jaén, 10 años, alta capacidad, hija de Natalia D. y Enrique G.
  • Carlos T. H. de Lleida, 9 años, el que saca mejores notas de la clase, hijo de Pere G. y Olivia D.
  • y así ¿hasta cuántos? ¿hasta 150 000, 300 000, 600 000…?

 ¡Son cifras tremendas!

¿Qué han hecho las instituciones?

Lamentablemente, atendiendo a las cifras mencionadas, es más que imprescindible revisar las decisiones tomadas o su aplicación porque es obvio que ¡NO VAMOS BIEN!

En junio del año pasado, por fin, se llegó a un consenso en el Congreso entre los partidos políticos para tomar medidas contra el bullying:

 “El Congreso insta al Gobierno a convocar al Observatorio Estatal de la Convivencia Escolar para la elaboración de un plan de trabajo para la prevención, detección y actuación frente al acoso escolar, con la colaboración de las asociaciones en el ámbito de la educación y de los expertos.”

Si van ustedes al sitio web del  Observatorio Estatal de la Convivencia Escolar y consultan el último informe publicado de enero del 2024 podrán leer:

“El pleno del Observatorio, que se reunía por quinta vez desde 2020, ha abordado también la elaboración de su nuevo plan de trabajo para el periodo 2024-2027, en la que ya trabaja el Ministerio tomando como punto de partida los buenos resultados obtenidos por nuestro país en materia de convivencia en informes internacionales como PISA o las conclusiones del estudio realizado en centros de Primaria”

Si lo que hace el Congreso es limitarse a convocar a esta institución que seis meses antes había publicado que todo va muy bien, da la impresión de que desafortunadamente le están dando la razón a la ONG Bullying sin fronteras en su informe sobre el «ranking del infierno» cuando dice:

“¿Por qué ESPAÑA es Número 1 Mundial en Bullying?

ESPAÑA esconde el bullying. Mientras los casos graves aumentan,

pseudo asociaciones financiadas por grandes empresas, distraen

con datos irreales y el flagelo que sufren en la escuela, niños, adolescentes y jóvenes crece”

Señores y señoras responsables de estas cifras, que ni siquiera tendrán la vergüenza de dimitir, no les desearía ver cómo su hija se degrada mentalmente sin razón aparente; no les desearía sentir cómo su hijo deja de ser una persona activa y empieza a auto degradarse; no les desearía que el colegio les negara los hechos o su gravedad y le diera carpetazo como «cosa de niños» y no quisiera ver cómo les cierran las puertas las instituciones. Tampoco desearía que sufrieran la tortura de ver cómo su hija deja de ser respetada por sus amigos y que comprobaran la ausencia de apoyo en el entorno de las familias del colegio.  No les desearía que tuvieran que cambiar a sus hijos de colegio, o incluso mudarse a otra ciudad.

Y todavía menos les desearía ser uno de los familiares de los 60 menores que se suicidan al año, según datos de AEPAE (Asociación Española por la Prevención del Acoso Escolar).

Cifras que hay que lamentar que tengan sentido, ya que sólo en la comunidad de Madrid durante el curso escolar 23/24 se abrieron más de 3.200 protocolos por comportamiento suicida, datos de un estudio de AMACAE (Asociación Madrileña de Acoso Escolar), a partir del informe de fecha 9 de diciembre de 2024 que recibió el grupo político Más Madrid de la Unidad de Convivencia y Acoso Escolar de la Comunidad de Madrid.

Sin duda son cifras que deberían ponernos los pelos de punta. ¿Qué futuro le espera a un país que según estas cifras no cuida ni de su infancia ni de su juventud?

Les voy a exigir por el bien de nuestros hijos, señoras y señores del Ministerio de Educación y de las Comunidades Autónomas, que se aparten y dejen trabajar a esos excelentes profesionales con los que cuentan, que conocen las cifras reales y tienen muy claro cómo minimizar estas situaciones.  Visto que hasta ahora los recursos que han empleado para dar solución a esta lacra social no han funcionado, les pido que dejen a un lado las decisiones políticas e insisto permitan trabajar a sus especialistas,  que doblen  o tripliquen el presupuesto y el personal para atención y prevención a los casos de acoso y que aprovechen la experiencia de asociaciones u organismos como AMACAE, AEPAE, Fundación ANAR, INFOCOP (Consejo General de la Psicología de España) y otras muchas cuya labor es encomiable y a quienes pido disculpas por no mencionar.

Si volvemos a la estadística y tomamos los datos de la ONG internacional Bullying sin fronteras. cada día que pasa se estarían produciendo 822 nuevos casos, es decir, hoy mismo más de 800 niños y sus familias estarían sufriendo un problema que estoy seguro que podría haberse evitado en la mayor parte de los casos.

Señoras y señores, están ustedes perdiendo un tiempo valioso.

Redes sociales – tengan valentía, por favor

Volvemos a las publicaciones de la ONG internacional Bullying sin Fronteras, propuesta para el premio nobel de La Paz 2025, ahí es nada:

"El bullying o acoso escolar y el ciberbullying son causantes directos de más de 200 000 muertes, ya sea por homicidio o por inducción al suicidio cada año. Es decir, se lleva la vida de cientos de miles de niños y jóvenes en todas partes del mundo. En especial las denominadas «4 tóxicas»: Facebook, Twitter, Instagram y WhatsApp están generando un ambiente enfermo y peligroso entre los niños, adolescentes y jóvenes".

En esta publicación las redes sociales no solo aparecen como el medio que hizo que el acoso o el ciberacoso crecieran exponencialmente cuando los acosadores y acosadoras lo utilizaron para amplificar sus actividades, sino que son mencionadas como medios de influencia de opinión y comportamiento, y no precisamente para bien.

Y digo yo, en la era de la Inteligencia Artificial y comprobada la falta de escrúpulos de los propietarios y accionistas de Meta, Microsoft, Apple, Google y compañías similares, ¿por qué los gobiernos, la ONU, la UNESCO o la Unión Europea no OBLIGAN a estas compañías a poner medios tecnológicos que eviten la difusión de imágenes, comentarios o informaciones nocivas para nuestros escolares?

 Ya durante la pandemia demostraron su capacidad para cerrar cuentas de particulares o para evitar que fueran difundidas determinadas opiniones o informaciones dependiendo de la fuente que tuvieran o si incluían determinadas palabras como «vacuna», «covid19» o «mascarilla».  Demostraron hace ya tres años que tienen tecnología y capacidad de control en la red para eso y para más.

 ¡¡¡¡OBLIGUEMOSLES!!!!

O tengan la valentía de explicarles a esos 300 000 afectados y a sus familias por qué no es posible.   ¿Ustedes creen que serían capaces de decir que no se puede hacer por nuestra salud o por nuestra seguridad?

Violencia de género – la cantera

Y si hasta ahora no les he dado razones suficientes para exigir que se dé un giro radical a la manera en la que se está tratando este problema, llamo ahora la atención del Ministerio de Interior y del Ministerio de Igualdad. A quienes dicen poner todos los medios para acabar con otra lacra social como es la violencia de género, ¿no les ha dado por pensar cuántos de los acosados y acosadas de hace unos años, a quienes nunca se les trató como víctimas ni se les ofreció apoyo psicológico, son hoy protagonistas de violencia?

¿No se les ha ocurrido que invertir en prevenir hoy el acoso escolar y tratar adecuadamente los casos que no se han podido evitar podría suponer no tener que lamentar tantos casos violentos mañana?

Sinceramente, es muy difícil hacerlo peor.

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