A pesar de que el independentismo cuenta con una mayoría del 52% representada en el Parlamento catalán, y que le permitiría sacar adelante los presupuestos, va a ser presumiblemente gracias a los Comunes que las cuentas salgan adelante. Así lo ha anunciado el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès.
Negativa de la CUP
Después de que la CUP presentase su enmienda a la totalidad aprobada por las bases mediante consulta, ERC y JuntsxCat se quedaban sin fuerza suficiente para sacar adelante los presupuestos. "Los presupuestos no responden al giro político a la izquierda ni a la defensa de los derechos sociales y democráticos que reclama el momento y la sociedad catalana”, declaraba la diputada de la CUP, Eulàlia Reguant.
Acercamiento a los Comunes
Después de la reunión entre ERC y los Comunes, y a la que no asistió ningún representante de JuntsxCat, Aragonès asegura haber logrado el acercamiento suficiente con los de Jéssica Albiach. La representante de En Comú Podem, ha manifestado su inquietud al no presentarse a la reunión para negociar la aprobación de los presupuestos ningún representante de Economía, ya que este ámbito está en manos de JuntsxCat. Las prioridades de los Comunes en la negociación con ERC tienen que ver con la salud: psicólogo y dentista público; con el transporte: desarrollo de la red ferroviaria; y con otro modelo de desarrollo industrial y estructural de las ciudades mediante la política de Barrios Verdes.
Buenos presupuestos
Por su parte, JuntsxCat anunciaba su negativa a negociar con los Comunes y cualquier posibilidad de modificar los presupuestos: "Estos presupuestos, que quede claro, no sólo no tendrán un giro de 180 grados, tampoco tendrá un giro de 90 grados, ni de 40 grados ni de 25 grados. Son buenos presupuestos”, aseguraba el representante de Junts, Jordi Sánchez.