Aplicar políticas de izquierdas o de derechas conlleva diferencias notables en todos los niveles de la vida diaria, más si sabe en los asuntos que afectan a los derechos de las mujeres y su lucha por la igualdad de género. Mientras en España su parlamento aprueba una ley del “solo sí es sí” para garantizar su libertad sexual, en el gobierno machista, sexista, homófobo, xenófobo y racista de Viktor Orbán en Hungría se las arrincona poco a poco hasta el punto de promocionar un informe estatal con dinero público donde se concluye que el hecho de tener un elevado número de mujeres con titulación universitaria implica riegos económicos y demográficos. O lo que es lo mismo: la mujer, mejor en casa y atada a la pata de la cama.
El estudio, titulado ‘¿Fenómeno de educación rosada en Hungría?’, ha sido elaborado por la Oficina Nacional de Auditoría de Hungría, dependiente directamente del ejecutivo ultraderechista de Orbán. Concluye que “la alta presencia de las mujeres en la enseñanza superior puede causar problemas demográficos, dificultando la búsqueda de pareja”. Sin el más mínimo pudor, los autores del informe aseguran que “la valoración de los atributos masculinos como menos importantes puede causar problemas mentales y de comportamiento en los varones, que así no pueden desarrollar de forma óptima sus capacidades especiales”.
Desde la llegada al poder de Orbán en Hungría en 2010, las mujeres han visto mermados progresivamente sus derechos y su lucha por la igualdad de género. Tanto es así que los movimientos feministas reciben constantes amenazas y ven limitadas sus actuaciones. Además, la segregación ocupacional y la brecha salarial son una realidad palpable, así como la discriminación de todas las mujeres en edad fértil y de aquellas que cuentan con niños pequeños a su cargo. Esta situación discriminatoria ya quedó plasmada también en su Constitución de 2011, donde la familia sólo es considerada como la unión de un hombre con una mujer.
“La valoración de los atributos masculinos como menos importantes puede causar problemas mentales y de comportamiento en los varones, que así no pueden desarrollar de forma óptima sus capacidades especiales”, señala el informe
El informe machista y sexista elaborado por la agencia estatal de Orbán llega a la conclusión de que la sobrevaloración de las capacidades femeninas y la infravaloración de las de los varones puede causar problemas de competitividad en el país. “La alta presencia de las mujeres en la enseñanza superior puede causar problemas demográficos, dificultando la búsqueda de pareja”, señala el informe machista.
Actualmente, el número de mujeres con titulación universitaria supera al de hombres en un 4%, según un estudio de 2019 del Instituto Europeo de la Igualdad de Género (EIGE). Hungría se sitúa por debajo del promedio de la Unión Europea en igualdad de género, ya sea en el poder adquisitivo, en los asuntos relacionados con la salud o en el número de mujeres que rompen el techo de cristal y llegan a ocupar puestos de dirección en sus respectivas empresas.
La sintonía ideológica de Orbán con la ultraderecha española de Vox es total, y han sido numerosas las alabanzas del líder de Vox, Santiago Abascal a las “políticas de familia” del primer ministro húngaro.