El caso del fraude fiscal de la pareja de Isabel Díaz Ayuso sigue impactando en la guerra política actual. El fin de semana, el diario ABC publicó que desde el Palacio de la Moncloa se había filtrado al líder de los socialistas madrileños el documento en el que Alberto González Amador reconocía a la Fiscalía haber cometido fraude fiscal.
Tras la publicación de esta noticia, el PSOE de Madrid salió al paso con un comunicado de Juan Lobato en el que indicaban que «los bulos y la desinformación que sufrimos necesitan respuestas claras y acreditadas. Por esa razón acredité ante notario que ni los socialistas madrileños ni Moncloa habíamos recibido de la Fiscalía ninguna información en absoluto relativa al novio de la Sra. Ayuso. Al revés, queda acreditado que toda la información vino de medios de comunicación. No existe teoría de la conspiración como pretende explicar el PP de Madrid y la Sra, Ayuso. Lo que existen son artimañas políticas para intentar evitar que se hable del asunto central que son que este viernes declara el novio de Ayuso como imputado por dos delitos fiscales y falsedad documental. El PSOE de Madrid está personado en la causa contra el novio de la Sra. Ayuso para garantizar que no se pierda ni un solo euro de los madrileños».
Sin embargo, Isabel Díaz Ayuso ha vuelto a atacar con este asunto desde Corea del Sur, país en el que se encuentra en visita oficial.
Para la presidenta madrileña «mientras estamos desde la Comunidad de Madrid trabajando, dejándonos la piel para intentar atraer inversiones, oportunidades, proyectos, futuro y empleos para seguir arrimando el hombro en España, tenemos a un gobierno, y lo venimos denunciando desde hace mucho, que se ha instalado en corrupción, en escándalos. Han organizado, han orquestado un caso desde la mesa del presidente del Gobierno para intentar destruir a una rival política a través de su novio. Eso es todo lo que estamos viendo, una utilización de los poderes del Estado cometiendo todo tipo de ilegalidades para intentar destruir al adversario».
Ayuso, por supuesto, utiliza esta situación para reclamar la dimisión de Pedro Sánchez. «Esto en cualquier país democrático hace caer al gobierno entero, en cualquier otro país del mundo esto no se sostendría más. Eso es motivo de expulsión directa de un gobierno, hacer esto. Y espero que esas consecuencias lleguen cuanto antes, además de todo lo que se ve cada día, que se sigue multiplicando y sigue saliendo y conociéndose sobre los, por lo menos cuatro o cinco casos de corrupción y de utilización de los poderes del Estado del Gobierno de Sánchez».
Isabel Díaz Ayuso ha dado por ciertas las informaciones y ha insistido en que las filtraciones se gestaron en la mesa del presidente del Gobierno. Unas acusaciones gravísimas que, en el escenario actual de judicialización constante de la política, tendrá, a buen seguro, recorrido en los tribunales.
«Y queda claro que todo nace en la mesa del presidente. Todo lo orquesta siempre él y su entorno. Y esto es gravísimo, es gravísimo y creo que ya no sé qué más tiene que ocurrir para que se ponga punto y final a un desastre de gobierno como este, cuya legislatura nunca tendría que haber ni siquiera comenzado», ha finalizado Ayuso.