La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, rompió ayer su silencio en redes sociales para posicionarse abiertamente en contra del acuerdo entre Gobierno central y Generalitat para remodelar el aeropuerto del Prat. “incumple todos los compromisos contra el cambio climático, contra la emergencia climática y supone aumentar las emisiones en lugar de reducirlas”, expresaba en un breve discurso publicado en redes y continuaba señalando al Gobierno de la Generalitat: “Ayer escuchamos al vicepresidente Puigneró, que se convirtió en portavoz de Aena y compró al 100% su discurso”.
En Madrid
Desde el consistorio se quejan de que la decisión se haya acordado en Madrid y en una reunión en la que no estaba previsto que se hiciese: “Ayer nos encontramos que la decisión se produjo en Madrid, en pleno mes de agosto, prácticamente en secreto y de espaldas a la ciudadanía”, señalaba. Desde el ayuntamiento de Barcelona ya venían trabajando para encontrar una solución acordada: “Nosotros defendemos una mesa de negociación catalana para hacer este debate sobre el modelo aeroportuario y las estructuras de movilidad que necesita Barcelona y Cataluña, para hacerlo con rigor y serenidad”.
Prudente
Colau ha estado comedida con el asunto del Prat, pero ya no aguantaba más: “es un debate que se tiene que hacer con respeto institucional y por eso a pesar de las discrepancias he estado muy prudente con mis declaraciones”, explicaba y continuaba explicando el porqué de romper ahora el silencio: “yo he defendido siempre el consenso y el diálogo, pero tengo que lamentar que ayer ese consenso se rompió”. Pero su malestar va más allá del modo en que se ha tomado el acuerdo: “El malestar es por las formas, pero también por el contenido del acuerdo”, añadía.
Turismo masificado
Colau ve el proyecto más como un problema que como una solución y desde el punto de vista económico lo ve como un error fatal: “necesitamos una economía del futuro que genere puestos de trabajo del futuro y la propuesta de ampliación de Aena propone: la economía del siglo pasado, la economía del pelotazo, la economía de la especulación y la economía de la destrucción del territorio que lo único que garantiza es aumentar 20 millones de visitantes de turismo masificado”. Denunciaba y para ella la solución es clara “creemos que hay que reorientar la economía hay que re invertir en movilidad sostenible”.