El apoyo de Bildu a los Presupuestos desata un tsunami en la derecha, PP, Vox y Ciudadanos, que olvidan que el PSOE fue víctima de la banda terrorista, pero que también fue el partido del Gobierno que acabó con ETA. La derecha de este país no sabe vivir sin ETA, carece de discurso sin la banda terrorista y tiene frágil memoria respecto a la labor que en la lucha contra los terroristas vascos hizo, por un lado el expresidente popular, José María Aznar y, por otro, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero.
Arrimadas, que por algunos sondeos, teme perder más votos y escaños aún y, ser partido bisagra en varias comunidades donde Gobierna con el PP, vuelve a la confrontación y se aleja de apoyar las Cuentas del Estado con las que hace apenas unos días estaba de acuerdo.
Pero el PSOE, porque Unidas Podemos siempre ha tenido claro que prefiere a ERC y que no quiere ir con Ciudadanos ni a la vuelta de la esquina, tiene también conflicto interno por el apoyo de Bildu a los Presupuestos. Los barones con perfil más liberal, como el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ya han dejado clara ayer su postura.
Las palabras de Otegui, al comunicar el apoyo a las Cuentas Públicas, tampoco ha ayudado al PSOE.
Es curioso, sin embargo, que justo ahora que Otegui y Bildu están donde la sociedad española lleva reclamando décadas para conseguir el fin del terrorismo, en las instituciones y con mensajes de paz -alejados de cualquier actividad violenta- la derecha haya creado un falso relato de que el PSOE blanquea a los terroristas.
Y llama la atención que ese mensaje cale en parte de la sociedad española al haber sido el PSOE muy castigado por la banda terrorista. La última víctima de ETA en las filas socialistas fue Isaías Carrasco, un concejal de Mondragón que recibió hasta cinco disparos en marzo de 2008 mientras se encontraba en su coche, junto al portal de su casa.
Se trata de apoyar, desde la responsabilidad, unas cuentas públicas que saquen adelante a este país, unos presupuestos históricos que son imprescindibles para salir de la crisis socioeconómica en la que nos ha sumido la pandemia de la Covid-19. Pero para Inés Arrimadas, parece más importante quién votará a favor que el contenido social de los PGE que ayudarán a millones de personas y, que afectan positivamente a todos los españoles.