Madrid es una de las piedras en el camino, una de las causas por la que el futuro de Podemos puede no ser morado, si no muy negro. Se acercan a la oscuridad de la soledad, sobre todo en la capital, donde ya no les queda nadie de renombre que pueda pilotar el partido hasta las próximas elecciones europeas en mayo de 2024, única tabla de salvación, tanto para Ione Belarra, como a Irene Montero.
Que no se comunicarán las decisiones importantes a los miembros del Consejo Ciudadano Estatal, no es nada más que una forma de actuar difícil de entender en la formación morada. Si el fin de semana parecía que era un suplicio para Yolanda Díaz en las tertulias televisivas, la realidad es otra. Y aquellos que criticaban la forma de actuar de la líder de Sumar, van comiéndose sapos, uno detrás de otro. Hoy más que un sapo, parece que se van a comer dos y de los grandes. ¿Quién queda en Madrid, que de visibilidad a Podemos a nivel municipal o autonómico? Nadie.
Podemos sin lideres y sin página web en Madrid
Y mientras, Ayuso y Almeida con su populismo de salón y con poco recorrido de gestión. Unos políticos, los populares que solo saben dar discursos y protagonizar portadas y mientras, desde la izquierda la desunió y el silencio.
Roberto Sotomayor, el candidato de Podemos al Ayuntamiento de Madrid en las últimas elecciones municipales del pasado 28 de mayo, ha dimitido del Consejo Ciudadano Estatal del partido morado entre críticas a la dirección. En la misma línea Carolina Alonso, que tras meditar la decisión y hablar con personas que le han apoyado en los últimos tiempos, también se desvincula de la estructura orgánica de Podemos.
“Hoy presento esta carta de dimisión de un órgano de dirección en donde prácticamente ya no se consulta ninguna decisión importante, ni siquiera la de salirse del GP Sumar en unos momentos trascendentales para nuestro país, con una extrema derecha desatada en nuestras calles. Esta última decisión es otro paso más de una estrategia estatal que ha renunciado a los territorios y a la construcción de un Frente Amplio”.
Canal Red comunicó la noticia
Sotomayor denuncia que es: “es incomprensible que los miembros de un órgano de dirección se enteren antes por Canal Red de esta noticia y que no haya sido consultado a los inscritos previamente con una pregunta clara", se ha quejado en su comunicado de renuncia”.
Destrozo de Podemos en Madrid
“He querido recuperar, fortalecer y remontar el proyecto en mi ciudad, pero es evidente que el partido dejó de tener confianza en mí hace algunos meses. Las diferencias son palpables. El destrozo que se ha ocasionado en Madrid será muy complicado de recuperar. Era justo lo que yo no quería. Quizás nos haya faltado más comunicación, más cariño y probablemente algo más de mesura y cuidados. Pido perdón por mis errores si alguien en algún momento se sintió ofendido”, ha expresado.
Sotomayor cree “en los frentes amplios”, más en Madrid donde, “es imprescindible llegar a todos los acuerdos posibles para acabar con el PP. El municipalismo debería de ser prioritario en nuestro espacio si queremos construir algo de futuro. Y yo no veo que esa apuesta se haga de verdad. Mis discrepancias con la dirección de este partido hacen que hoy me retire de todo esto y me vuelva a lo que yo más a gusto me encuentro: el trabajo con los colectivos sociales y más en concreto, la lucha contra el sector del juego”, apunta.
No se consultó a la militancia la portavocía municipal
El exaspirante a la Alcaldía de Madrid se había presentado hace un mes a las primarias del partido en la capital tras la dimisión de Luis Nieto como portavoz municipal. Pero la dirección estatal de Podemos no ha querido abrir el proceso de votación interna porque no era el momento, según fuentes del partido.
“Deseo aciertos para Podemos, y ojalá así sea. En el fondo hay muchas más cosas que nos unen que nos separan. Como siempre se dice, nos vemos y nos saludamos en las calles”, ha concluido Sotomayor en su comunicación a los militantes.
En una misiva adjunta, Sotomayor asegura que cuando entró en política, en Podemos se cuidaban y que asumió el reto del Ayuntamiento con complejidad, pero con ganas de ganar. Ser el candidato a la Alcaldía de la mejor ciudad del mundo es algo que llevaré en mi corazón para siempre, ha destacado.
“Me volqué al cien por cien en mantener viva la esperanza y coser las heridas, recorriendo los círculos de la ciudad, hablando y escuchando, animando y consolando. En definitiva, dando la cara. Pero, desde la Dirección estatal tenían otros planes y otros objetivos. Las dinámicas que se dieron en otras regiones se repetían en Madrid: ya nadie coge el teléfono, ni responde a los mensajes, se actúa y decide en pequeños grupos de decisión, algunos parece que sobramos, las distancias se agigantan con la dirección estatal de Podemos”, escribe en la carta.
No se consultó la salida de Sumar
Sotomayor esgrime que ya prácticamente no se consulta ninguna decisión importante, “ni siquiera la de salirse del Grupo Parlamentario de Sumar en unos momentos trascendentales para nuestro país, con una extrema derecha desatada en nuestras calles”.
El ya exmiembro del Consejo Ciudadano Estatal de Podemos “considera que la doble militancia puede servir para recomponer lazos rotos, viejas complicidades y entenderse el uno con el otro con el objetivo, precisamente, de construir unidad. Desgraciadamente Podemos ha renunciado a ello. Esto me ha conllevado a escuchar demasiadas veces aquello de ser un 'traidor', quizás porque la posición siempre más complicada es de quien pretende tender puentes”.
“Podemos necesita más que nunca consolidar un proyecto municipalista en Madrid. Solo así tendrá mimbres de crecimiento. La renuncia de Podemos al municipalismo se vio reflejada en la decisión de no acudir al acto de Magariños; para mí fecha clave en el transcurso de las pasadas elecciones municipales. La decisión de la dirección Estatal de no acudir pese a que los candidatos a la Comunidad y la ciudad de Madrid, junto a Jesús Santos, pedimos estar, puso en peligro nada menos que el futuro de nuestra organización en la región. Se eligió la peor de las estrategias posibles. Nadie hoy en día ha asumido sus responsabilidades políticas, excepto los propios candidatos que, después del 28M hemos sufrido la invisibilidad más absoluta y la desconsideración de sus dirigentes”, discrepa.
Los jóvenes también abandonan Podemos
Sotomayor afirma que en las últimas semanas “cunde el desánimo y la decepción: se desinflan los círculos y el activo político se marcha o se desactiva". "La salida de gran parte del Área Joven de la Comunidad es un buen ejemplo. La renovación del partido no existe. Quizás haga falta otra hornada de dirigentes que no esté tan implicada emocionalmente en esta batalla interna. El tejido social nos ve con rechazo”, escribe.
“La experiencia de la candidatura me ha enseñado que hoy más que nunca es preciso abrir nuestro partido para atraer a la gente. Hace mucho tiempo que dejamos de hablar al país, y solo hablamos a los militantes”, añade.
Podemos confronta con Sumar
Sotomayor reprocha a la dirección estatal de Podemos que “en vez de influir en Sumar, haya decidido confrontar directamente como si de un campeonato por saber quién se quedará con el espacio se tratara. De esta manera perdemos todos, Sumar, Podemos, y el país que, a través de los millones de votantes progresistas que siguen creyendo en esa izquierda valiente y transformadora ven con ojos atónitos todo lo que está ocurriendo. Se rompen ilusiones y esperanzas por poner por encima egos personales”, concluye.
También ha renunciado Carolina Alonso, quien fuera su 'número dos'.
En la misma línea, Carolina Alonso, tras meditar la decisión y hablar con personas que le han apoyado en los últimos tiempos en la organización, también se ha desvinculado de la estructura orgánica de Podemos.
“Hay motivos políticos, orgánicos y personales para tomar esta decisión, pero el principal es que he llegado a la conclusión de que es imposible poder ser siquiera una minoría crítica y no quiero contribuir a la desunión que ya nos está asolando. Ganar dividiendo no es ganar y yo no comparto el rumbo actual del partido, son demasiados meses de malos tragos absolutamente innecesarios”, ha indicado.
“Llevo días meditando esta decisión, no me gustan las decisiones en caliente y tras hablar con las personas que más me han apoyado en los últimos tiempos en la organización, he decidido dar un paso atrás y desvincularme de toda estructura orgánica de Podemos y de participar de manera activa en el partido, como lo venía haciendo hasta ahora”.
La exportavoz de Podemos en la Asamblea de Madrid concluye recordando a “esa gente bonita" con la que ha compartido años de lucha, pero la salida de tanta gente válida de Podemos Madrid me reafirma en mi decisión. Primero el pueblo, después el partido”, concluye en la misiva.