El eurobarómetro sobre corrupción publicado esta semana deja claro que ladesconfianza sobre políticos y partidos es muy superior entre los españoles queentre el resto de los ciudadanos de la Unión Europea.
De hecho, en la Unión Europea un 71% piensaque la corrupción es habitual y en el caso español el porcentaje es del 94%.
Esta corrupción contrasta con el hecho de que losciudadanos españoles rechazan en mayor medida que los de la media de la UEaceptar dar un regalo, dinero o un favor para conseguir algo de laAdministración o un servicio público. Muy grave resulta el hecho de que enEspaña un 58% asegura que la corrupción le afecta personalmente en su vidadiaria, cuando en la UE solo responden igual un 26%.
Corrupción en las instituciones
El 90% de los encuestados españoles piensaque hay corrupción en las instituciones nacionales ysólo un punto menos en el caso de las regionales y locales, cuando en la UE nosupera el 70%. El 80% de los españoles considera que la corrupción está muyextendida en los partidos políticos (53% en la UE), siendo luego los máscorruptos los políticos, con un 68% (49% en la UE), seguidos de losfuncionarios que resuelven concursos públicos o permisos para negocios, conentre el 44 y 49% de respuestas afirmativas. Un 50% de españoles piensa que enlos bancos e instituciones financieras está extendido el abuso de poder y lassospechas de corrupción suman más del 30% en lo que atañe a policía, aduanas ytribunales, porcentajes siempre superiores a la media europea.
La clase empresarial también sale muy malparada en corrupción, siendo un 79% los que afirmanque ésta forma parte de la cultura empresarial española y un 84% consideran quejunto al favoritismo dificulta la competencia empresarial. A pesar de estapercepción genralizada y masiva de corrupción, sólo un 5% de los encuestados hasido testigo el último año de algún caso de corrupción.