La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, anuncia en Valladolid que “en pocos días” el Gobierno llevará al trámite parlamentario la ley de Memoria Democrática. A su juicio, una iniciativa necesaria porque “no podemos construir ningún tipo de convivencia con esto sin ordenar”, y “eso solo se logra de manera correcta con una ley”.
La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, así como secretaria de Igualdad del PSOE, afirmó que dicha ley “va a abrir un debate” en el país “para que todo el mundo se retrate”. Además, se ha mostrado convencida de que, no solo saldrá adelante en las Cortes Generales, sino “que la vamos a cumplir todos” pues “va a venir a ampliar y a mejorar” la que ya en 2007 aprobó el Gobierno de Zapatero.
Homologar a otras democracias
Para Calvo se trata de que la Ley de Memoria Democrática “nos va a homologar a otras democracias” en esta cuestión, que “es un relato de todo el largo periodo en el que el pueblo español pelea por sus libertades y por ser el depositario del poder legítimo”.
También quiso en su intervención en Valladolid recordar que “trazamos un plano del que ya hablaba Azaña cuando decía que España tiene un lado honroso, honorable y luminoso de gente que ha peleado por las luces, los derechos y las libertades”; y “tampoco se nos van a olvidar esos”, añadió.
A juicio de Calvo, en el debate de la norma “veremos una vez más a una derecha que se querrá colocar en el perfil de ‘no toca’ ‘esto es antiguo’”, y a “otra derecha, la que reivindica el franquismo sin ningún tipo de problema”. “Ahí –añadió- es donde los socialistas queremos ver a los más jóvenes, porque no hay manera más moderna de estar en el mundo, no hay manera más democrática y más anclada en los valores, que ser socialista y feminista”; y por eso la ley lleva también” una mirada de género”, de reconocimiento hacia las mujeres que fueron invisibles o que sufrieron la violencia ‘por sustitución’.