Los programas de outplacement han ayudado a reducir el tiempo de recolocación en un 60% frente a la media nacional en el pasado, según reflejan los datos del Estudio de Recolocación 2021 de Talent Solutions Right Management (ManpowerGroup). La aceleración del proceso de búsqueda de un nuevo empleo por los profesionales que se han beneficiado de estos servicios es notable: un 31% ha tardado menos de 3 meses; la cifra se incrementa hasta un 66% por debajo de 6 meses; y escala hasta un 95% si se considera un periodo inferior a 12 meses.
¿Qué es el Outplacement?
El Outplacement es un servicio que una empresa aporta a todos o parte de los trabajadores despedidos, al objeto de lograr la transición en sus carreras profesionales, e intentando ocasionar los menores perjuicios posibles.
Los Programas de Recolocación, aún no garantizando la consecución de un nuevo empleo, si tienen como objetivo de entrada el aumentar las probabilidades que se lleve a cabo la reinserción laboral del candidato. Por lo tanto, los beneficios se reflejan tanto en el empleado que recibe asesoramiento para emprender la búsqueda de trabajo sobre las exigencias actuales del mercado laboral, como para la empresa que ofrece un trato más humano al trabajador cesado, a la vez que mejora su imagen corporativa y minimiza las posibles tensiones internas que puedan surgir.
El resultado
El resultado es un tiempo de recolocación medio de 4,2 meses en 2021, frente a los 5,9 que se promediaban en 2020 y frente a los 12,2 que, de media, consume la búsqueda de empleo en España a aquellos que no cuentan con el apoyo de estos programas. Este contraste pone de relevancia la efectividad de los programas de Outplacement como un instrumento de acompañamiento de los profesionales afectados por procesos de desvinculación.
Tipo de empleo
En cuanto al tipo de empleo al que se accede, el nuevo contrato es, en general, de larga duración (85%). Además, se emplean por cuenta ajena en la amplia mayoría de los casos (88%), frente a un 12% que se establecen proyectos por cuenta propia. Las circunstancias en las que se inicia la nueva etapa profesional también arrojan números positivos: un 85% iguala o mejora la posición que ostentaba, frente al 78% en 2020; y el 67% equipara o supera su compensación previa, una subida de 9 puntos respecto al año anterior.
Dichas cifras parecen relacionarse con el hecho de que la amplia mayoría de profesionales, tras finalizar el programa tengan más confianza (91%), estén satisfechos (96%) y dispuestos a recomendarlo (94%).
Para Orestes Wensell, director comercial de Talent Solutions Right Management, “los números dejan fuera toda duda: los programas de outplacement son efectivos y ayudan a mejorar la empleabilidad y reducir el tiempo de la recolocación. Con el apoyo de nuestro equipo de consultores, dotamos a los profesionales de herramientas que les permiten reciclarse y optimizar su búsqueda de un nuevo empleo: formación y desarrollo, activación de su red de contactos, uso de las redes sociales y creación e impulso de su marca personal”.
“Lo que nos ha permitido situar el tiempo medio de recolocación en 4,2 meses, una cifra que mejora los datos previos a la pandemia”. Wensell también apunta que “el objetivo de un programa de outplacement es el lograr mejorar la empleabilidad de los profesionales para conseguir una recolocación estable en el menor plazo posible, en un nuevo proyecto alineado con sus objetivos y perfil profesional, vinculado con sus valores y que le motive y en las mejores condiciones posibles”.
El mercado oculto
El mercado oculto, ofertas de empleo que no se hacen públicas y de acceso limitado, se sitúa un año más como la principal vía de recolocación con un 65%. Para acceder a estas oportunidades de empleo es crítica la gestión de la red de contactos del profesional. Dicha red de contactos es crítica también para conocer información sobre tendencias, sectorial, sobre un potencial empleador, etc.
La segunda, por volumen, es el canal online (redes sociales, portales de empleo, etc.). Su peso continúa creciendo año a año, situándose en el 2021 en un 33%. La candidatura espontanea, sólo supone el 2% para los profesionales procesos de recolocación.
Dentro de ese mercado abierto (35% del total) que lidera el canal online, el 37% eran posiciones gestionadas por intermediarios como consultores de selección o headhunters.
Incremento de mujeres
Respecto al género de los participantes, el incremento de las mujeres que han participado en estos programas ha sido notable, ya que, ha experimentado un incremento de 13 puntos respecto a 2020, los perfiles femeninos han supuesto un 58%. Este cambio de tendencia se produce en un contexto en el que el colectivo femenino se ha visto más afectado por la pandemia y, a pesar de haberse recuperado mejor en 2021, sigue por detrás del masculino. La tasa de desempleo de las mujeres ha bajado en un 3,80% hasta situarse en 14,7%, mientras que los hombres, con un descenso del 2,80%, cerraron el año en un 11,5%.
Por sectores
Por sectores, destaca ampliamente el retail o comercio (27%), seguido a cierta distancia de la industria (13%) y las finanzas (12%).
A nivel geográfico, cabe señalar la importancia de estos programas en la Comunidad de Madrid, que acumula casi un tercio de los profesionales en proceso de recolocación (31,5%); seguida de Andalucía (21%) y Cataluña (15%). En el otro extremo de la balanza están La Rioja (0,5%) y Asturias, Cantabria, Extremadura y Navarra, con 1% en cada una.
No es cosa (sólo) de directivos
Pese a que, en sus orígenes el outplacement, el perfil profesional al que se dirigía a este tipo de programas era fundamentalmente de directivos, los datos de Talent Solutions muestran que la tendencia ha cambiado a lo largo de los años: en la actualidad la mayoría de los perfiles están en el rango de staff o personal de base (39%). Sólo un 8% pertenecen a altos cargos; a ellos se podría añadir otro 17% que corresponde con los mandos intermedios. Del resto, un 19% son técnicos y otro 17% son personal industrial o de operaciones.
Radiografía del profesional en un proceso de recolocación
El perfil tipo del profesional de los programas de recolocación o outplacement es un profesional de unos 46 años, con una antigüedad media en su último puesto de 10 años y una experiencia profesional de unos 22 años. En general, no ha tenido ningún cambio en su carrera profesional en los últimos 7 años (casi el 60%) y es la primera vez que se acoge a un programa de recolocación (87%).
Además, más del 30% quiere tener la opción de que se le atienda en el programa de manera remota y virtual, más allá de las limitaciones por el Covid. Y, de hecho, el 50% está interesado en buscar fórmulas de trabajo flexible e hibridas. Más del 35% busca opciones para reorientar su carrera profesional; el 29% desea cambiar de sector; y el 12% quiere explorar la opción retirarse u optar a la jubilación.
Lo que más valoran los profesionales
Lo que más valora un profesional en su fase de transición profesional y búsqueda de empleo:
Contar con el apoyo de consultor de carrera que le guíe y asesore de forma individualizada para gestionar la transición de forma efectiva y acelerar su conexión con el mercado. El 90% de los candidatos considera que ha sido un factor crítico de su recolocación.
Conocer las tendencias del mercado laboral y dónde existen oportunidades, ya que un 60% no había buscado empleo de forma proactiva en los últimos 10 años.
Alternativas profesionales
Valorar alternativas profesionales: el 45% desea considerar otras opciones, incluido el emprendimiento.
Recibir apoyo para mantener la productividad y positividad durante el proceso de búsqueda. Buscar trabajo requiere una dedicación de 25 a 35 horas semanales y mantener una actitud positiva durante todo el proceso a pesar de las dificultades.
Mejorar su marca personal y digital, ya que el 99% de los reclutadores utilizan las redes sociales para captar talento.
Aprender a gestionar de forma efectiva su red de contactos, ya que para el 75% de los candidatos dicha red ha sido clave para su recolocación.
Conseguir una buena preparación de las entrevistas, ya que un buen desempeño en esta fase supone un 85% de los procesos de selección.
Recibir orientación para mejorar su empleabilidad (reskilling y upskilling), para afrontar retos futuros del empleo, ante los cambios que están sufriendo el 40% de los trabajos actuales.
Conectar con oportunidades de empleo, tanto de mercado abierto como oculto.