La escritora Lucía Etxebarria ha dicho basta ante el constante acoso que vienen sufriendo ella y su hija en los últimos meses a través de las redes sociales y también desde determinados medios de comunicación. Para ello, ha anunciado acciones legales contra los diarios La Vanguardia y el digital La Última Hora y su directora, Dina Bousselham, que según la premiada autora publicaron que había sido “condenada por plagio” y que había “inicio una persecución contra las personas trans” (textual).
En una carta dirigida a un grupo de periodistas, la conocida escritora y articulista asegura que toma esta decisión, “particularmente dolorosa” en el caso de la denuncia contra La Vanguardia ya que había trabajado en este medio en anteriores etapas profesionales, porque considera que no le queda otra opción “si quiero seguir trabajando. Y si quiero que mi hija deje de recibir acosos”.
Esta situación límite denunciada por la escritora ya la avanzó el pasado mayo, cuando aseguró que su hija no se atrevía a salir a la calle y por ello había debido comenzar tratamiento contra la ansiedad. La autora de novelas como Nosotras que no somos como las demás,Beatriz y los cuerpos celestes o Amor, Prozac, curiosidad y dudas ha reclamado a periodistas y medios de comunicación “que todos reflexionemos sobre la necesidad que, como periodistas, tenemos de contrastar fuentes. Creo que los últimos hechos sobre Malasaña han demostrado que este problema existe. No se puede criminalizar a una persona a partir de un bulo. Especialmente si podemos destrozarle la carrera a una profesional y la salud a una menor”.
La escritora, que publica nueva novela en diciembre, espera que esta vez no la veten algunos periodistas y medios “por plagiadora”
La escritora ha criticado con dureza la creación de lo que considera “un clima de psicosis colectiva en una ciudad a partir de un bulo, muy especialmente en la ciudad que, según informes de la UE, de la ONU e incluso de guías de turismo para población LGTB, es una de las ciudades más seguras de Europa para dicha población”.
Las acusaciones de plagio contra Etxebarria comenzaron, según denuncia en su carta, hace un año y medio. “Empezaron a moverse por los medios acusaciones contra mí. Se dijo que ‘una fotógrafa me había demandado por plagio’, que ‘yo había sido condenada por plagio’, “que ‘yo había iniciado una persecución contra las personas trans’. Esto no se dijo en foros, se publicó en medios”, subraya la escritora.
Etxebarria asegura que no respondió “mediáticamente” contra estas acusaciones, y otras como presuntamente aprovecharse de las circunstancias para hacerse publicidad de sus libros, a la espera de que se pronunciara la justicia. “Espero demostrar en sede judicial todo lo contrario: que esta campaña y estas calumnias me ocasionaron enormes perjuicios, arruinaron la campaña de reedición de Amor curiosidad prozac y dudas, influyeron negativamente en las ventas de mis libros y provocaron que mi hija sufriera un cuadro de ansiedad agudo y tuviera que recibir tratamiento por el acoso que de rebote recibió ella misma, siendo menor de edad, tanto en sus redes como en su centro de estudios”.
La escritora recuerda que su hija fue expuesta en Twitter con su foto, a la que se le añadían lemas como “la hija de la plagiadora”. Según la escritora, “su foto corrió por toda la red asociada a las palabras ‘transfobia’ y ‘plagio’.
Etxebarria aporta extractos del escrito de la Fiscal Jefe de la Audiencia Provincial de Madrid en el archivo de diligencias de investigación penal. “No se han observado expresiones vejatorias”. “La naturaleza del lenguaje utilizado no es especialmente provocador… no observándose una estigmatización del colectivo trans”. “No se han observado factores de polarización de los que inferir la existencia de un delito de odio contra las personas trans”, son algunos de las indicaciones de la Fiscalía al respecto.
Sobre las acusaciones de plagio
Respecto a las acusaciones de plagio que inundaron las redes sociales contra la escritora, “vinieron de la mano de Doña G.M.A., que es pareja de una de las personas que organizó la entrega del Premio Ladrillo hacia mi persona, entrega en la que se me volvió a acusar de haber cometido un delito de odio: transfobia”, señala Etxebarria en su carta a los periodistas.
“Mientras se me acusaba de cometer un delito, los asistentes lanzaban gritos de ‘terf’ y ‘plagiadora’ que se escuchan perfectamente en el vídeo de los hechos. La señora M. A. no es fotógrafa. Es decir, hace fotos. También las hacemos tú y yo. Pero no se ha dado de alta como trabajadora autónoma, y no es fotógrafa profesional. La señora M. A. organizó un crowdfunding para denunciarme por plagio, y recogió unos dos mil euros. Nunca hubo tal denuncia o demanda. Sí que me denunció penalmente por “delito de odio”, según el artículo 510 del Código Penal. Y otro de acoso”, explica la escritora.
M. A. denunció a Etxebarria por insultarla a ella y a su pareja. “Textualmente, me puso una denuncia porque consideraba que ‘los mensajes y vídeos que la señora Etxebarria publica son injuriosos e insultantes contra su persona’ y que la base de mis insultos era ‘la relación con su pareja”, detalla la escritora. La fiscalía asegura que “no se hace en ningún momento alusión a la persona de la denunciante”.
“Hasta que me llegó la denuncia, yo no había visto en la vida a esta señora, ni conocía de su existencia y desde luego no sabía quién era o dejaba de ser su pareja. Sigo sin haber visto a esta mujer en mi vida, ni haber tenido un contacto con ella jamás, ni siquiera por redes. Me denunció una persona cuya existencia desconocía, asegurando que yo la vejaba. Un sinsentido y un despropósito”, asegura Etxebarria.
Nueva novela en diciembre
Lucía Extebarria publica en diciembre su nueva novela y desea “que esta vez” la campaña de promoción no sea “un desastre” y “no tener que escuchar a compañeros que me dicen ‘he propuesto una entrevista en mi medio y me han dicho que no quieren entrevistar a una plagiadora y a una tránsfoba”, como sucedió en la última campaña de prensa”, recuerda la escritora.