La Policía Nacional, en colaboración con la Inspección de Trabajo de Cataluña, ha desarticulado una organización criminal asentada en la provincia de Barcelona,dedicada, presuntamente, a la explotación de emigrantes en situación irregular. Las víctima pakistaníes sobrevivían en casi situación de esclavitud.
Así, la Policía ha detenidolos cinco máximos responsables de la trama, según el comunicado de la Policía Nacional al que ha tenido acceso Diario16. Los presuntos autores de la explotación a emigrantes regentaban una red de supermercados y almacenes repartidos por las localidades de Sant Adrià del Besós y Barcelona.
Las víctimasde explotación de emigrantes trabajaban horarios laborales interminables. Además, carecían de descansos semanales y con unos sueldos muy por debajo de lo que establece el convenio.
Los responsables han sido detenidos como presuntos autores de delitos contra los derechos de los trabajadores y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. La Policía entiende que favorecieron la inmigración irregular y pertenencian a organización criminal.
Para controlar a las víctimas, la red contaba con una sala de video vigilancia donde visionaban, en tiempo real, unas 100 cámaras de TV.
Investigación de la inspección de trabajo
La investigación comenzó gracias a la inspección realizada el pasado mes de noviembre en un establecimiento comercial en la localidad de Granollers. Así, la Inspección puso a los investigadores sobre la pista de la existencia de una organización que, presuntamente, explotaba laboralmente a ciudadanos extranjeros en situación irregular. La mayoría eran de Pakistán.
La red investigada contaba con una serie de supermercados franquiciados en la localidad de Barcelona, así como dos naves/almacén en Sant Adrià del Besós. En estos centros es donde se explotaa numerosos trabajadores de nacionalidad pakistaní. Los emigrantes irregulares carecerían de la preceptiva documentación para poder trabajar.
Condiciones abusivas impuestas a sus trabajadores
La red daba empleo a ciudadanos extranjeros en situación irregular. Así, les imponía condiciones laborales abusivas. Gracias a ello, la organización conseguía grandes beneficios económicos los que les permitió, en un corto periodo, de tiempo ampliar su negocio.
La situación de vulnerabilidad de las víctimas de este tipo de delitos quedó constatada al comprobar que todas ellas estaban en situación irregular. Además, la inspección pudo comprobar que estaban sin arraigo social ni familiar de ningún tipo en territorio nacional. La mayoría contaban con escasa o nula formación académica y en algún caso con hijos a cargo.
La suma de todo este contexto económico-social convertía a las víctimas en personas vulnerables obligadas a aceptar jornadas de trabajo extremas. Tampoco tenían derecho al descanso legal entre jornada y jornada, ni descanso semanal. Estaban además sin seguro médico ni dados de alta en el régimen de la Seguridad Social.
Los detenidos vulneraron el Estatuto de los Trabajadores, Convenios Colectivos y resto de legislación laboral.
Inspección simultanea en 14 supermercados y dos naves-almacén
Con el fin de constatar los hechos se llevó a cabo un amplio dispositivo conjunto con la Inspección de Trabajo de Cataluña y se inspeccionaron 14 supermercados de la localidad de Barcelona y dos naves/almacén de Sant Adrià. Fruto de las mismas se levantaron las correspondientes actas en materia laboral y se identificaron a un total de 86 trabajadores en su lugar de trabajo, 43 de ellos sin la preceptiva autorización de residencia y trabajo. Una vez constatados los hechos fueron arrestados los cinco máximos responsables de la red de supermercados y naves inspeccionadas.
En una de las naves inspeccionadas, ubicada en la localidad der Sant Adrià del Besós, contaban con una sala de control y video vigilancia con más de 100 cámaras de TV desde donde controlaban la totalidad de tiendas que regentaban y, a su vez, someter a un férreo control a los trabajadores explotados.