La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha anunciado un conjunto de medidas propuestas por Sumar, su grupo parlamentario, dirigidas a combatir de manera efectiva la corrupción en España. En una comparecencia en el Congreso, Díaz ha presentado un plan que incluye la prohibición de indultos en casos de corrupción, la limitación de los aforamientos y la creación de un organismo independiente dedicado a la prevención de la corrupción.
Yolanda Díaz se compromete a erradicar la corrupción
Díaz ha destacado la urgencia de modificar la legislación sobre el indulto para que estos no sean aplicables en delitos de corrupción, apuntando a la necesidad de cambiar las normas para evitar la corrupción antes de que ocurra. Asimismo, ha propuesto restringir los aforamientos a fin de que no sirvan como escudo ante investigaciones por corrupción, enfocándose en que estos se limiten estrictamente al ejercicio de las funciones del cargo.
La vicepresidenta ha recordado que, desde 1996, se han concedido más de 10.000 indultos en España, siendo el expresidente José María Aznar quien más indultos concedió en casos de corrupción. Esto subraya la importancia de reformar esta figura legal para asegurar que no se repitan tales acciones en el futuro.
Sumar también propone la creación de un organismo independiente del Gobierno, inspirado en recomendaciones de organismos internacionales como el Grupo de Estados contra la Corrupción del Consejo de Europa. Este organismo estaría dotado de recursos suficientes para que la corrupción «sea solo historia de la democracia en España».
Estas medidas se presentan en un contexto donde la corrupción ha generado indignación y frustración entre la ciudadanía, especialmente evidenciado por el reciente caso Koldo. Díaz ha criticado la actitud del «y tú más» entre PSOE y PP, insistiendo en la necesidad de tomar acciones concretas y determinadas para prevenir futuros casos de corrupción.
Regulación de los lobbies
Además, Díaz ha mencionado la importancia de retomar la normativa que regula los lobbies y avanzar en la despolitización de los órganos constitucionales. Ha sido contundente al describir a los involucrados en el caso Koldo como «golfos» que se beneficiaron a costa de la salud pública durante la pandemia, enfatizando que la corrupción durante una crisis sanitaria merece una condena aún mayor.
Finalmente, la vicepresidenta ha expresado su optimismo sobre la estabilidad de la legislatura y la aprobación de la ley de amnistía y los presupuestos generales del Estado, reivindicando el papel de Sumar en el Gobierno como un partido enfocado en mejorar la vida de la gente, más allá del ruido y la incertidumbre política.
Este paquete de medidas propuesto por Sumar representa un enfoque proactivo y contundente contra la corrupción, con el objetivo de establecer un marco legal y organizativo que prevenga la corrupción y asegure la integridad en la vida pública española.
Respuesta de Izquierda Unida al Caso Koldo
La portavoz de Izquierda Unida, Amanda Meyer, ha calificado de “espectáculo” la reacción del PP ante el caso Koldo, rechazando participar en lo que considera un intento de desviar la atención de los verdaderos problemas políticos. Meyer ha enfatizado la importancia de esperar a los resultados de las investigaciones en curso sobre la contratación de mascarillas antes de sacar conclusiones precipitadas. Izquierda Unida ha pedido acelerar estas investigaciones para esclarecer las responsabilidades penales, administrativas y políticas que correspondan. La postura de IU subraya su compromiso con la lucha contra cualquier forma de corrupción en la administración, demandando contundencia en la respuesta a estos actos.
No tiene ni pizca de vergüenza la trepa.
DEROGA DE VERDAD LAS REFORMAS LABORALES Y CREA DERECHOS PARA LOS TRABAJADORES.
Me parece bien. Pero, hace mucho que se sabe, que la mejor prevención contra la corrupción, es la trasparencia. Y, aunque en España hay una ley de trasparencia, se comprueba que no es operativa: aquí todo el mundo se puede negar a dar datos, y no pasa nada. Necesitamos una ley de trasparencia verdaderamente draconiana.