Acción climática: la vía para evitar los graves impactos del aumento de las temperaturas en 2025

El Servicio de Cambio Climático Copernicus confirma oficialmente que 2024 fue el año más cálido registrado a nivel mundial. WWF pide a los líderes globales que respondan con una acción climática sin precedentes en 2025

10 de Enero de 2025
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Si se supera el umbral de 1,5 ºC, nos enfrentaremos a una acción climática repleta de retos y costes aún mayores para reducir las temperaturas. | Foto: WWF
Si se supera el umbral de 1,5 ºC, nos enfrentaremos a una acción climática repleta de retos y costes aún mayores para reducir las temperaturas. | Foto: WWF

Los datos de Copernicus también confirman que 2024 fue el primer año en superar los 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales. Superar este límite durante un sólo año no es lo mismo que sobrepasar el tope de temperatura de 1,5 °C del Acuerdo de París, que es una media a más largo plazo, pero este es un paso profundamente preocupante hacia ello. 

Stephen Cornelius, subdirector mundial de Clima y Energía del WWF, explica que "el año más caluroso jamás registrado no es sólo una estadística, es una advertencia. El aumento de las temperaturas y los fenómenos meteorológicos extremos se están convirtiendo en nuestra nueva normalidad. Tenemos que actuar ya: 2025 debe ser un año de acción".

Asimismo, apunta que "tenemos que limitar las temperaturas globales para evitar que empeoren las consecuencias del cambio climático, pero la ventana para hacerlo se está cerrando rápidamente. Si superamos el umbral de 1,5 ºC, nos enfrentaremos a retos y costes aún mayores para reducir las temperaturas. Cada fracción de grado de calentamiento es importante para las personas, la naturaleza y nuestro futuro". 

Por su parte, Fernanda Carvalho, directora de Política Energética y Climática de WWF, mantiene que "necesitamos aumentos récord en la generación de energías renovables, la restauración de los ecosistemas y la financiación para el clima y la naturaleza en 2025. Sólo un cambio sistémico en toda la economía evitará que las temperaturas se descontrolen. Los países deben responder a esta crisis presentando nuevos y ambiciosos planes climáticos nacionales con objetivos de reducción de emisiones que batan récords de ambición". 

Considera también que "en el año en que se cumplen diez años del histórico Acuerdo de París, ya es hora de que pasemos de las palabras a la acción concreta en todo el mundo. Para ello, necesitaremos una colaboración internacional sin precedentes. El cambio climático es un problema global existencial que exige soluciones globales. El multilateralismo sigue siendo la mejor y única solución para comprometer a todos los países en esta misión vital. Debe reforzarse este año".

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