Tras un periodo de esperanza de un euríbor descendente, las predicciones han demostrado lo contrario. Según análisis financieros, el euríbor a un año concluirá septiembre rondando el 4,15%, ligeramente superior al porcentaje de agosto que fue del 4,073%. Este incremento resulta desfavorable para aquellos con hipotecas de tipo variable, ya que sus cuotas, que se basan en este índice, experimentarán un notable incremento si se revisan próximamente.
No obstante, los especialistas indican que desde junio el índice ha mantenido una estabilidad, sin registrar grandes fluctuaciones. En efecto, su valor en septiembre se asimila al de julio, cuando cerró al 4,149%, sugiriendo un euríbor relativamente estacionario.
Impacto en las cuotas hipotecarias
A raíz de este aumento, las cuotas de hipotecas variables experimentarán un encarecimiento de alrededor de 1.900 euros al año. No todas las hipotecas serán afectadas, sino solo aquellas que estén sujetas a revisión (anual o semestral) con base en el valor de septiembre del euríbor. Aquellas hipotecas que se revisen anualmente, por ejemplo, podrían experimentar un aumento de hasta 160 euros al mes, sumando cerca de 1.925 euros más en el transcurso del año. En cambio, las hipotecas con revisión semestral enfrentarán un menor incremento en sus cuotas debido a que el euríbor ya presentaba un valor elevado hace seis meses.
Razones detrás del ascenso del euríbor
Una de las interrogantes que surge es el motivo detrás del incremento del euríbor tras su descenso en agosto. Esta variación se atribuye principalmente a las percepciones y expectativas de las entidades financieras en relación al Banco Central Europeo (BCE) y sus tipos de interés. Si las entidades financieras prevén un aumento en los tipos de interés del BCE, el euríbor asciende, y viceversa.
Durante agosto, muchos actores del mercado financiero especulaban que el BCE detendría el aumento de sus tipos de interés durante el resto del año, y probablemente, reduciría los mismos en 2024. Esta perspectiva cambió cuando, a mediados de septiembre, el BCE incrementó sus intereses para controlar la inflación en la eurozona.
La constante inflación y el futuro del euríbor
La inflación en la eurozona, que supera el 5%, no muestra signos de disminuir, especialmente por la situación con las materias primas, en particular el petróleo y el gas. El BCE enfrenta limitaciones en su capacidad para maniobrar y controlar esta situación.
De cara al futuro, se espera que el BCE tome decisiones sobre sus tipos de interés en las reuniones de octubre y diciembre. Basándonos en análisis expertos, es probable que el euríbor continúe su tendencia al alza en las próximas semanas o meses, estabilizándose entre el 4% y el 4,5% al cierre de 2023.
Con estos pronósticos, es esencial estar preparado y gestionar adecuadamente las finanzas, especialmente si se posee una hipoteca de tipo variable. Es una alerta para aquellos que ya tienen una hipoteca y para quienes están considerando adquirir una. Si se tiene una hipoteca variable, es un momento propicio para considerar renegociar las condiciones o explorar alternativas que ofrecen protección contra tipos elevados.