En un giro alentador, el avance del feroz incendio que ha azotado Tenerife muestra signos de ralentización, permitiendo que parte de los evacuados vuelvan a sus hogares. La esperanza renace mientras los bomberos luchan por contener las llamas. Si esta tendencia se mantiene y las condiciones meteorológicas siguen siendo favorables, el fuego podría empezar a considerarse como estabilizado.
Se ha parado la necesidad de evacuar zonas que previamente habían sido desalojadas en Arafo y en ciertas partes de los núcleos afectados en El Rosario. Esto ha sido ordenado por la Dirección General de Emergencias del Gobierno de Canarias. Aunque las evacuaciones se han interrumpido, el incendio ha causado daños en más de 13.000 hectáreas y se extiende a lo largo de un perímetro de 90 kilómetros.
A pesar de la magnitud de esta tragedia medioambiental, hasta el momento no se han reportado víctimas mortales ni destrucción de viviendas. Las autoridades indican que solo han sido afectados algunos cuartos de aperos en fincas. La presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, resaltó estos aspectos durante la visita del presidente en funciones, Pedro Sánchez, al puesto de mando avanzado en Arafo.
El Consejo de Ministros aprobará la declaración de la zona como "zona catastrófica"
El presidente Sánchez anunció que una vez que el incendio esté bajo control, el Consejo de Ministros aprobará la declaración de la zona como "zona catastrófica", lo que permitirá movilizar recursos y financiamiento para la recuperación y reconstrucción de las áreas afectadas. Sánchez aseguró el compromiso total del Gobierno en estas tareas de recuperación y destacó que "toda España está con Canarias y con Tenerife" en este momento difícil.
Sánchez elogió la solidaridad de las personas evacuadas y destacó el comportamiento ejemplar de la ciudadanía, lo que cobra una importancia especial en situaciones de incendios de este tipo que exhiben su devastadora potencia. También reconoció la cooperación y coordinación entre las administraciones y los servicios públicos involucrados en las operaciones de extinción.
Parque Nacional del Teide y mala calidad del aire
Sin embargo, persisten algunas preocupaciones. Un frente activo en Izaña, ubicado en el Parque Nacional del Teide, es motivo de atención, así como también el empeoramiento de la calidad del aire debido al humo del incendio. El humo contiene una mezcla de gases y partículas pequeñas resultantes de la combustión de la vegetación y otros materiales, lo que ha llevado a la Dirección General de Emergencias del Gobierno de Canarias a actualizar sus recomendaciones a la población, instando al uso de mascarillas FFP2 para protegerse de la mala calidad del aire.
Impacto ambiental del incendio
En términos de impacto ambiental, el incendio ha afectado el hábitat de al menos 39 especies de aves, muchas de las cuales son endémicas de las Islas Canarias o de la región macaronésica. Además, ha afectado áreas protegidas de gran valor ecológico, incluido el Parque Nacional del Teide, así como el observatorio de Izaña, que desempeña un papel crucial en la observación astronómica a nivel internacional.
Aunque la situación parece estar mejorando en términos de contención del fuego, la atención sigue centrada en garantizar la seguridad de las personas y la protección del patrimonio natural y cultural de la región. La solidaridad y la cooperación continúan siendo fundamentales para enfrentar esta tragedia y trabajar hacia la recuperación y reconstrucción de las áreas afectadas.