Estudio demoscópico de Diario16 para el 28A: Sánchez reconquista España mientras la derecha de la Plaza de Colón se desinfla

El próximo domingo se celebran las elecciones generales y, según el estudio demoscópico realizado para Diario16 por GI Internacional, el PSOE ganaría las elecciones con 121 escaños. A medida que se acerca el día, todo indica que el Partido Socialista volverá a hacerse con la victoria, pero sin alcanzar una mayoría suficiente para poder gobernar en solitario. Las políticas sociales de los diez meses de gobierno han logrado que Sánchez reconquiste la confianza de los españoles. Fuente: GI Internacional para Diario16 El Partido Popular de Pablo Casado, por su parte, va a lograr unos resultados que no se recordaban desde los primeros años de la democracia en que los grandes partidos eran la UCD de Adolfo Suárez y el PSOE de Felipe González.  El estudio le da 80 escaños, lo que supone un retroceso de 57 diputados respecto a las elecciones de 2016. Esta cifra demuestra que al PP no sólo le está pasando factura la corrupción o la mala gestión del gobierno de Mariano Rajoy, sino que el alejamiento del centro político del actual presidente del partido ha espantado a los votantes conservadores más moderados. El otro partido de la derecha democrática, Ciudadanos, recoge una parte del voto del Partido Popular. Según el estudio, el partido de Albert Rivera obtendría 52 escaños, 20 más que en 2016. Sin embargo, el partido naranja ha perdido mucho fuelle desde que las aguas del conflicto catalán bajaron y dejó de convertirse en el ariete del independentismo o en el referente del nacionalismo español, relevo que han recogido otros. De encabezar los sondeos, Ciudadanos ha pasado a un tercer lugar muy lejos de convertirse en la primera fuerza conservadora de España y, desde luego, sin posibilidad de ganar las elecciones. Respecto a Unidas Podemos, continúa en su descenso y, según el estudio de GI Internacional, lograría 40 diputados, es decir, 31 menos que en los comicios de 2016. Este descenso muestra, por un lado, el descontento de parte del electorado que confió en el partido de Pablo Iglesias e Irene Montero y se desilusionó porque han chocado contra un muro y no pudieron asaltar los cielos. En otro orden, la división interna entre las distintas facciones y los diferentes modos de interpretar la política también han influido en la dispersión. Mucho de ese votante descontento o desilusionado ha vuelto al PSOE pero otra parte se quedará en la abstención o votará a opciones minoritarias. Comparativa de escaños respecto a las elecciones de 2016. Fuente: GI Internacional para Diario16 Tras su éxito en Andalucía, Vox está captando todo el voto de extrema derecha que anteriormente se encontraba en el Partido Popular y se está haciendo con el descontento de los españoles en aspectos como la migración o los derechos de la mujer. Según el estudio de GI Internacional, Vox pasaría de la nada a obtener 30 escaños. Respecto a los partidos nacionalistas destaca el crecimiento de Esquerra Republicana de Catalunya que pasaría a obtener 12 diputados en detrimento del PdCat que lograría sólo 6. El resto de los partidos se mantendría en unos resultados similares a los de los comicios de 2016. Bloques y pactos Con estos resultados, comprobamos que ninguno de los dos grupos tradicionales podría gobernar en solitario, puesto que un pacto similar al firmado en Andalucía alcanzaría sólo 162 escaños, insuficientes para formar gobierno. Tras la irrupción de Vox hubo momentos en que el bloque conservador lograba en los sondeos una mayoría absoluta. Sin embargo, el efecto se va deshaciendo y coloca a cada uno en el sitio que le corresponde. Respecto al bloque progresista ocurre más o menos lo mismo, con la diferencia de que se podría repetir el acuerdo de la moción de censura, dado que Sánchez sí que tiene capacidad para alcanzar pactos puntuales con los partidos nacionalistas de centro izquierda y centro derecha. Sumando los escaños de PSOE, Unidas Podemos, ERC, PNV y Coalición Canaria se alcanzarían 179 diputados, una cantidad suficiente como para poder aplicar las reformas sociales y constitucionales que España necesita implementar de manera urgente. Sin embargo, lo que deja claro el estudio de Gi Internacional es que, de confirmarse estos resultados, no hay posibilidad de formar gobierno salvo con pactos ideológicamente antinaturales pero que podrían dar estabilidad política que necesita el país. Esta solución pasaría por un acuerdo PSOE, C’s, PNV y Coalición Canaria que, al igual que el anterior escenario, sumaría 179 escaños. Esto generaría una situación en la que los puntos acordados para la legislatura deberán ser negociados de manera insistente para lograr que los defensores de los intereses del IBEX-35 acepten la implementación de las reformas sociales y constitucionales que el país precisa urgentemente. Por otro lado, este pacto podría lograr frenar el auge de la extrema derecha y los españoles se garantizarían la continuación de los paquetes de medidas sociales iniciados por el PSOE. Sánchez deberá decidir si quiere crear un gobierno de corte puramente progresista o pactar con liberales y conservadores, deberá elegir entre un gobierno reformista en lo social o un ejecutivo lastrado por la defensa de los intereses del IBEX.