El mes de agosto, tradicionalmente asociado a las vacaciones de verano en España, ha traído consigo un respiro en la batalla contra la inflación. Según los datos adelantados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), elÍndice de Precios al Consumo (IPC) se ha moderado en seis décimas con respecto a julio, situándose en un 2,2%. Esta cifra representa el nivel más bajo de inflación en más de un año, superando las expectativas de los analistas, que anticipaban una estabilización en torno al 3% para el cierre del ejercicio.
El descenso de la inflación en agosto se explica principalmente por la reducción de los precios de los carburantes y los alimentos, que han aliviado el bolsillo de los consumidores y contribuido a esta notable moderación de los precios. La inflación subyacente, que excluye los alimentos frescos y los productos energéticos debido a su volatilidad, también ha registrado una ligera disminución, bajando una décima hasta el 2,7%. Esta tendencia indica que el país podría estar acercándose al fin de la crisis inflacionaria que ha azotado la economía durante los últimos meses.
Un año de contrastes: de la escalada a la moderación
Comparando la situación actual con la de hace un año, la diferencia es notable. En agosto de 2023, la inflación se situaba en un 2,6%, una cifra que en aquel momento parecía el preludio de nuevas subidas. La escalada del precio del petróleo y la alta volatilidad en los mercados energéticos habían llevado a una inflación media del 3,6% entre enero y agosto, con una inflación subyacente que superaba el 6%. Sin embargo, un año después, el panorama ha cambiado drásticamente.
El precio del petróleo Brent, que durante la crisis inflacionaria llegó a superar los 100 dólares por barril, se mantiene actualmente por debajo de los 80 dólares. Esta estabilización del precio del crudo ha sido un factor clave en la moderación de la inflación. Además, las previsiones de los expertos indican que el precio del petróleo podría seguir bajando en los próximos meses, lo que ayudaría a mantener la inflación bajo control.
Otro factor que ha contribuido a esta moderación es el mercado del gas. En plena invasión rusa de Ucrania, los precios del gas llegaron a superar los 300 euros por megavatio hora, un escenario que ha cambiado radicalmente. A pesar de las tensiones geopolíticas actuales, el precio del gas natural se ha estabilizado por debajo de los 40 euros MWh, muy lejos de las cifras que se registraban hace un año.
La resistencia de los precios del turismo: un obstáculo para la desaceleración
Aunque la inflación ha mostrado signos de desaceleración, no todos los sectores han seguido esta tendencia. Los precios vinculados al turismo y los servicios han seguido una trayectoria ascendente, impulsados por la fuerte demanda durante la temporada alta de verano. El aumento del turismo ha llevado a un incremento significativo en los precios de hoteles, restaurantes y otros servicios asociados, lo que ha ejercido presión sobre la inflación general.
En este contexto, el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha destacado que la moderación de la inflación es un signo de que las políticas económicas del Gobierno están funcionando. Según Cuerpo, estas políticas han permitido compatibilizar una de las mayores tasas de crecimiento económico de la zona euro con una moderación progresiva de los precios y la recuperación del poder adquisitivo de los hogares.
Siguen las buenas noticias económicas
— Carlos Cuerpo (@carlos_cuerpo) August 29, 2024
➡️La #inflación vuelve a bajar en agosto, hasta el 2,2%, según @es_INE
🔸 La más baja en el último año
🔸Por bajada en los precios de carburantes y alimentos
✅ Continúa la moderación de los precios, a la vez que lideramos en crecimiento pic.twitter.com/C7wByPPWbu
Perspectivas para los próximos meses
A pesar de los datos alentadores de agosto, los analistas se muestran cautos sobre el futuro inmediato. Aunque la tendencia a la baja de la inflación es evidente, existe la posibilidad de que los precios vuelvan a repuntar en los próximos meses, especialmente si el IVA de la electricidad regresa a su tasa anterior del 21%. Además, la resistencia de los precios en el sector servicios podría seguir complicando el objetivo del Banco Central Europeo de mantener la inflación en torno al 2%.
Agosto ha sido un mes clave en la lucha contra la inflación en España. La moderación de los precios de los carburantes y los alimentos ha permitido una desaceleración significativa de la inflación, acercando al país al final de una crisis que ha marcado los últimos meses. Sin embargo, la persistencia de precios altos en sectores clave, como el turismo, sugiere que el camino hacia la estabilidad total aún podría enfrentar obstáculos.