Con motivo del 1 de Mayo, Día Internacional del Trabajo, la Agrupación de Periodistas de UGT (AGP-UGT) reclama rebajar la jornada laboral a las 35 horas en los medios de comunicación. En los últimos 10 años la jornada laboral pactada en el sector solo se ha reducido en 0,2 horas a la semana, desde las 39 horas en el 2013 hasta la 38,8 horas del 2023. Además, la reducción de jornada a las 35 horas supondría la creación de 7.000 nuevos puestos de trabajo en los medios de comunicación.
Jornada laboral de 35 horas
Para corregir el exceso de jornada no hay mejor medicina que la negociación colectiva y la afiliación sindical. Está demostrado que en aquellas empresas en las que la representación legal de las personas trabajadoras negocia convenios colectivos las condiciones laborales de los trabajadores y las trabajadoras son mejores que en las que no lo hacen. En éstas lo que predomina es la desigualdad, las jornadas maratonianas y los bajos salarios. Desde la AGP-UGT, se insiste en la negociación colectiva, como instrumento para la reducción de la jornada laboral a 35 horas semanales y, allí donde se pueda, a 32 horas.
La reducción de jornada supone menos estrés y agotamiento, una disminución de la siniestralidad laboral y la posibilidad de una mejor conciliación entre la vida personal y profesional. Además, contribuye al crecimiento del empleo asalariado, se reducen las diferencias con el trabajo a tiempo parcial y esto genera un efecto positivo en las personas trabajadoras más afectadas por la desigualdad, mujeres y jóvenes principalmente.
La jornada laboral apenas se ha reducido en la última década
En los últimos 10 años, la jornada pactada en los medios de comunicación[1] se ha reducido en 0,2 horas a la semana, desde las 39 horas de 2013 a las 38,8 horas de 2023.
Por sectores, la mayor jornada de trabajo se ha pactado en las agencias de noticias, con 40 horas semanales, seguidas de la prensa, con 39,2 horas. Por el contrario, la radio y la televisión son los que registran las menores jornadas pactadas: 38,5 y 37,5 horas a la semana.
Entre las mujeres las horas pactadas son ligeramente superiores que en el caso de los hombres: 38,9 frente a 38,7 horas a la semana. Y entre las personas trabajadoras más jóvenes (menores de 35 años) la media de jornada pactada ha sido superior (39,6 horas) que para los grupos de edad intermedios (38,7 horas) y de mayor edad (38,3 horas).
Más de 54.000 personas asalariadas de los medios de comunicación
En el acuerdo de gobierno de coalición, PSOE y SUMAR consensuaron reducir la jornada laboral máxima legal sin rebaja salarial para establecerla en 37,5 horas semanales. Su aplicación se producirá de forma progresiva bajando hasta las 38,5 horas en 2024 y culminándose en 2025. A partir de entonces se constituirá una mesa con los interlocutores sociales que evalúe los resultados de la reducción y siga avanzando en la disminución de la jornada legal teniendo en cuenta las características de los distintos sectores de actividad, la evolución de la productividad y las circunstancias económicas.
Medios de comunicación
La reducción de jornada prevista para 2024 hasta las 38,5 horas afectará a más de 42.000 personas asalariadas que trabajan a tiempo completo en los medios de comunicación, el 64,3 % del total. Asimismo, la reducción de jornada prevista para 2025 hasta las 37,5 horas beneficiará a casi 44.000 personas, el 67 % del total.
La propuesta de 35 horas semanales superaría las 54.000 personas pero la reivindicación de UGT de alcanzar las 32 horas significaría una reducción de jornada para más de 64.000 personas, el 99 % del total de empleo a tiempo completo de los medios de comunicación.
Aunque todos los sectores se verán beneficiados de la reducción de jornada, lógicamente los que contemplan jornadas mayores, como agencias de noticias y prensa, son los primeros que notarán sus efectos.
Las 35 horas supondría la creación de más de 7.000 nuevos puestos de trabajo en los medios de comunicación
La reducción de jornada resulta beneficiosa en términos de seguridad y salud. Además incrementa la productividad, permite una mayor conciliación de la vida personal, laboral y familiar y genera un impacto positivo sobre el medio ambiente.
Pero, además, es indiscutible que con la reducción de jornada se produce un mayor reparto del empleo, fomentando la contratación de nuevo personal, que se puede traducir en la creación adicional de más de 2.000 puestos de trabajo con la reducción de jornada a 38,5 horas; y más de 3.300 en el caso de reducirla hasta las 37,5 horas.
Las propuestas más ambiciosas, como la de 35 o 32 horas semanales supondrían un gran impulso para el empleo, en tanto que significaría la contratación de más de 7.000 personas en el primer caso, y de más de 14.000 si se alcanzara la reivindicación de UGT.