En un acto celebrado en la sede central del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentó la nueva Oficina Nacional de Asesoramiento Científico (ONAC). Esta iniciativa busca conectar el conocimiento científico con la toma de decisiones políticas, un paso significativo hacia una gobernanza basada en la evidencia y la investigación.
La ciencia como pilar fundamental
Pedro Sánchez inició su discurso resaltando la importancia de la ciencia en la evolución de la humanidad: "La ciencia: esa suma de errores que nos acerca a la verdad. Se lo debemos casi todo a ella. La ciencia nos ha revelado nuestra propia naturaleza. Nos ha mostrado de dónde venimos y nos ha ayudado a recorrer el camino. La ciencia nos ha permitido duplicar nuestra esperanza de vida, modificar nuestro entorno, explorar el cosmos, vencer al dolor y a la enfermedad, y alcanzar unos niveles de abundancia, seguridad y bienestar con los que nuestros antepasados no se habrían atrevido siquiera a soñar".
El presidente mencionó la prohibición de los gases CFCs y el Tratado de Montreal como ejemplos del impacto positivo del asesoramiento científico en políticas públicas. "Cuando queremos, los seres humanos somos capaces de frenar la degradación medioambiental. Por muy sistémica que sea. Es cuestión de trabajo, recursos y voluntad", afirmó Sánchez, subrayando el poder de la ciencia para resolver problemas globales complejos.
Incorporación de asesores científicos
Sánchez anunció la incorporación de más de 50 científicos a la Administración General del Estado: "Si queremos que haya más ciencia en el gobierno, tenemos que tener más científicos y científicas en la Administración Pública. Así de sencillo. Por eso os anuncio que, en los próximos meses, vamos a incorporar a más de medio centenar de asesores científicos a la Administración General del Estado con diferentes mecanismos". Esta medida incluirá la creación de la figura del asesor científico en cada ministerio, quienes estarán dedicados a conectar las necesidades ministeriales con respuestas provenientes de universidades y centros de investigación.
El plan, que cuenta con un presupuesto anual de dos millones de euros, también prevé la creación de un equipo de investigadores visitantes en los ministerios, con estancias de entre seis y ocho meses. Estas estancias serán compatibles con sus carreras científicas y las acreditaciones de la ANECA, contribuyendo a que las preguntas que se hacen los científicos estén más cerca de las que se hacen los ministerios y se avance en la investigación aplicada.
La nueva unidad de asesoramiento científico con sede en el CSIC será la encargada de conectar las preguntas de las administraciones públicas con las respuestas de la comunidad académica. Todo ello será coordinado por la ONAC desde La Moncloa, inserta en la Secretaría General de Políticas Públicas, Asuntos Europeos y Prospectiva Estratégica. El objetivo es crear un canal de comunicación claro, estable e institucionalizado entre el poder ejecutivo y el mundo científico.
Una nueva era de políticas basadas en la ciencia
Estas medidas son la materialización de un compromiso que Pedro Sánchez había manifestado desde la pandemia: consolidar el papel de la ciencia y la evidencia en la toma de decisiones gubernamentales. "No queremos crear algo solo para decir que lo tenemos, que es bastante típico en la política. Queremos que sea útil de verdad", enfatizó Sánchez.
El nuevo director de la ONAC, Josep Lobera, destacó que se ha evitado una aproximación individualista y se ha optado por una fórmula más orgánica para reducir la brecha entre el mundo académico y el administrativo. Este ecosistema incluirá canales institucionales y protocolos para recabar asesoramiento científico, seguir principios éticos y metodológicos, y utilizar las recomendaciones generadas para diseñar políticas públicas basadas en la evidencia.
La creación de la ONAC y la incorporación de científicos a la administración pública representa un cambio significativo en la gobernanza española. Este enfoque pretende asegurar que las decisiones políticas estén fundamentadas en datos y análisis científicos robustos, lo que podría mejorar la eficacia de las políticas públicas y su alineación con los desafíos actuales y futuros.
Oficina Nacional de Asesoramiento Científico
La presentación de la Oficina Nacional de Asesoramiento Científico por parte de Pedro Sánchez marca un hito en la integración del conocimiento científico en la política. Con la incorporación de más de 50 científicos a la administración y la creación de nuevos canales de comunicación entre el mundo académico y el ejecutivo, España da un paso adelante hacia una gobernanza más informada y basada en la evidencia. Esta iniciativa no solo promete mejorar la toma de decisiones políticas, sino que también refuerza el compromiso del gobierno con la ciencia y la investigación como pilares fundamentales para el desarrollo sostenible y la resolución de problemas globales.