Dos pateras cargadas con un total de 88 personas han llegado a las Islas Canarias durante la noche del martes, desencadenando una respuesta inmediata de los equipos de rescate y las autoridades locales.
Las alarmas sonaron cuando se detectaron dos embarcaciones precarias que se dirigían hacia las costas de las Islas Canarias. Los esfuerzos coordinados de Salvamento Marítimo y el Centro Coordinador de Emergencias de Canarias (Cecoes-112) permitieron interceptar estas embarcaciones antes de que alcanzaran tierra firme, evitando una situación potencialmente peligrosa para los migrantes a bordo.
La embarcación más grande de las dos fue trasladada al muelle de La Restinga, en la hermosa isla de El Hierro. En esta embarcación viajaban un total de 65 personas que, desesperadas por buscar una vida mejor, se aventuraron en el peligroso viaje a través del Atlántico. La segunda embarcación, rescatada cerca de Gran Canaria, fue trasladada al muelle de Arguineguín y transportaba a 23 migrantes, de los cuales 4 eran subsaharianos y 19 magrebíes.
El rescate en las proximidades de Gran Canaria fue llevado a cabo por el equipo de Salvamar Macondo, que localizó la embarcación tipo neumática a 6 millas náuticas al sur de Arguineguín. Afortunadamente, la rápida respuesta de los equipos de rescate permitió evitar cualquier incidente grave durante la operación de rescate.
Una vez a salvo en tierra firme, los inmigrantes recibieron atención médica y asistencia humanitaria por parte de los equipos del Servicio de Urgencias Canario (SUC) y Cruz Roja. Hasta el momento, no se ha informado de ningún problema de salud grave que requiera traslado a un centro hospitalario, lo cual es una noticia alentadora en medio de esta difícil situación.
La llegada de estas dos pateras y el número de personas a bordo subrayan la continua urgencia de abordar la crisis migratoria en la región. Se requieren soluciones a largo plazo que aborden las causas fundamentales de la migración y garanticen la seguridad y el bienestar de las personas que buscan una vida mejor en Europa.
Las Islas Canarias siguen siendo un punto de entrada importante para los migrantes que buscan una nueva oportunidad en suelo europeo, y es esencial que las autoridades continúen trabajando en estrecha colaboración con organizaciones humanitarias y otros países para abordar este desafío de manera efectiva y humana.