Un soldado imperial de Darth Vader acusa a Begoña Gómez

El abogado 'youtuber' Aitor Guisasola contribuye al circo mediático, permitido por el juez Peinado, junto a otros grupos ultras como Vox, Manos Limpias, Iustitia Europa, Liberum y Hazte Oír

29 de Agosto de 2024
Actualizado a las 10:35h
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El abogado Aitor Guisasola, con su casco de soldado de Darth Vader, en una imagen de archivo.
El abogado Aitor Guisasola, con su casco de soldado de Darth Vader, en una imagen de archivo.

Todo lo que se ha montado alrededor del caso Begoña Gómez es un gigantesco circo por momentos surrealista, siempre sin sentido. Así lo afirman al menos eminentes juristas de este país. Y, sin duda, no se puede sino dar por buena esta afirmación teniendo en cuenta el pelaje y condición de algunos letrados que, bajo la forma de acusación particular, toman parte en la causa contra la esposa del presidente. Es el caso del abogado Aitor Guisasola, que representa a la acusación popular ejercida por la asociación Movimiento por la Regeneración Democrática de España. El letrado, con una controvertida imagen por la difusión de bulos, tiene un canal de Youtube con más de 466.000 seguidores y casi 1.500 vídeos publicados, según el portal de noticias Infobae. “Con dos katanas, un cartel de Batman y un casco de Star Wars de fondo [en concreto el de tropa de asalto imperial al servicio del malvado Darth Vader, un dato revelador], Guisasola se presenta como un abogado contra la demagogia, mientras despliega una batería semanal de titulares engañosos, fotomontajes y especulaciones: desde cuestionar la investigación judicial de los atentados del 11 de marzo de 2004 hasta indicar a sus seguidores cómo descubrir la identidad de la víctima de Dani Alves”, según Eldiario.es.

“Tras personarse en la causa de Begoña Gómez al entregar una fianza de 10.000 euros, ha ido informando a sus seguidores sobre los avances en la investigación”, asegura el citado medio. En esos vídeos Guisasola, el “abogado youtuber”, como ya le conocen algunos, comenta e, incluso, “muestra algunos de los autos y providencias” del juez Juan Carlos Peinado y los funcionarios del Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid. El espectáculo ha provocado el rechazo del propio juez instructor, quien “aprovechó las testificales de este lunes para reprocharle este modo de proceder y apercibirle con posibles multas”. Lo que no deja de ser una flagrante contradicción, ya que el propio juez en breve dará traslado a las partes del vídeo sobre la comparecencia de Pedro Sánchez en el Palacio de La Moncloa, añade Infobae. Guisasola se frota las manos, va a morir de éxito. Más pronto que tarde, su portal se inundará en un orgásmico tsunami de visualizaciones, clics y visitas, con la correspondiente monetización del canal.

El pasado mes de mayo, el magistrado que indaga en las actividades empresariales de la primera dama –investigada por tráfico de influencias y corrupción en el sector privado– admitió la personación como acusación particular de la citada asociación Movimiento por la Regeneración Democrática, una entidad cuya primera (y casi única) cara visible es el propio Aitor Guisasola (el letrado conspiranoico que se autodenomina “el abogado contra la demagogia”). Hace ya meses que este sumario se ha convertido en una especie de aquelarre facha contra el sanchismo. Ahí metidos, además de Guisasola, están Vox (el partido neofranquista de Santiago Abascal); Manos Limpias (el sindicato ultra que promovió la querella chapuza contra Gómez liderado por Miguel Bernad, conocido por su pasado en el Frente Nacional); Iustitia Europa, un movimiento de ciudadanos antivacunas que impugnaron las elecciones europeas ante el Tribunal Supremo, según La Sexta; la asociación Liberum, vinculada a teorías negacionistas sobre el covid 19; y la organización ultracatólica Hazte Oír. Nunca llegaremos a saber del todo qué demonios pinta en la instrucción de un sumario judicial la religión, el franquismo, los antivacunas y un abogado con ganas de petarlo, a base de likes y reproducciones visuales, en Youtube. Pero así funciona la cosa en este extraño caso, quizá el más raro en más de cuarenta años de democracia.

Centrándonos en Aitor Guisasola, cabe recordar que este abogado ya tomó parte en la causa general contra la financiación de Podemos que fue el caso Neurona (hoy, como todo el mundo sabe, archivado por falta de pruebas). También ha denunciado sin éxito al propio Pedro Sánchez ante el Tribunal Supremo, acusándole de malversar dinero público en la presentación de uno de sus libros, según Eldiario.es. “Guisasola ha conseguido los 10.000 euros para formar parte del proceso contra Gómez, afirmando que incluso le ha sobrado dinero que usará en otros procesos en los que, dice, participa, aunque al mismo tiempo asegura que hace todo este trabajo de forma gratuita”, asegura Eldiario.es.

Guisasola y su Movimiento fueron aceptados como acusación popular en el proceso el 22 de mayo, poco después de pagar la fianza. Dos días después, y con la investigación todavía bajo secreto de sumario, “el abogado subió un vídeo en el que difundió documentación de la causa: el escrito en el que el juez pedía analizar las visitas que el fiscal hacía al juzgado”, añade Eldiario. “Yo podré transmitiros lo que se pueda, lo que sea secreto obviamente no”, dijo poco antes de pedir “un like” y publicar el documento en pantalla: “Es tremendo lo que nos han notificado”. El secreto de sumario no se levantó hasta varios días después.

En su vida diaria en los juzgados, según la base de datos del Poder Judicial, Guisasola es un abogado especializado en defender los intereses de las aseguradoras. En su vida digital, Guisasola se presenta como un letrado que interpone acciones penales contra el Gobierno con un objetivo: tumbar a Sánchez. “Intento hacer lo que puedo contra este Gobierno”, explicaba en un vídeo con 200.000 visualizaciones. “Podemos es un gran cáncer”, afirmaba en otro.

“No es una cuestión de conspiranoias, es que las versiones oficiales es obvio que fueron falsas”, dijo sobre la masacre de Madrid. También ha dedicado varios vídeos a especular con que Begoña Gómez sea transexual, uno de los habituales bulos de la extrema derecha. “La Justicia dicta inconstitucionalidad de la amnistía”, tituló un vídeo, aunque la ley no está ni en vigor. “El Estado es una mafia”, dice en otra intervención. Entre ultras y conspiranoicos anda el juego. El lado oscuro de la fuerza conjurado contra la democracia (franquismo imperial versus república). Que la fuerza nos acompañe.

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