La Comisión Europea está preparando una revisión profunda de la Política Agrícola Común (PAC) de la Unión Europea, con el objetivo de reducir la burocracia, felixibilizar los requisitos medioambientales y reducir las inspecciones, creando incentivos para los agricultores.
Se trata de un anexo a las propuestas que Bruselas está analizando en el marco del denominado "tercer paquete legislativo ómnibus", cuya aprobación está prevista para el próximo 14 de mayo, donde la Comisión Europea está evaluando la supresión por completo de algunas disposiciones legales que en estos momentos exigen a los Estados miembro para que adaptar sus planes estratégicos de la PAC en línea con la nueva legislación climática y medioambiental, según informa Euractiv.
Se aconseja prudencia
La Dirección General de Agricultura de la Comisión Europea recomienda abordar estas cuestiones con prudencia: "La impresión que (esa medida) podría dar es que se rompen los vínculos en general entre la PAC y la legislación medioambiental/climática", según reza el texto del documento de Bruselas al tiempo que se señala que "es una decisión política que debe tomar el Comisario".
También se plantea revisar las normas sobre Buenas Condiciones Agrícolas y Medioambientales (BCAM) -de las cuales dependen los pagos de la Política Agrícola Común (PAC) - que no se vieron afectadas por el paquete de simplificación de 2024.
Una de las ideas es que la Comisión daría a los Estados miembros más libertad para definir las prácticas y pagar a los agricultores para que las apliquen en materia de protección de humedales y turberas. La propuesta responde a las peticiones de algunos Estados miembros, entre ellos Letonia e Irlanda, que habían solicitado una excepción.