De perfil, la postura preferida de Moreno Bonilla

Los andaluces tienen un vocablo precioso para describir a las personas que se ponen de perfil ante situaciones que le atañen directa o tangencialmente pero que evitan implicarse en ellas para que no les manche su trayectoria personal y profesional. Procede previsiblemente de tierras malagueñas, precisamente las que vieron crecer al presidente andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla. Suavón. El diccionario andaluz Fífitu, de fomento del habla andaluza, define suavón como “persona en apariencia inofensiva, pero con mala uva”. Nada conmina a Moreno Bonilla a deshacerse de esta postura equidistante así lluevan chuzos de punta sobre su gestión pese a gobernar con una holgada mayoría absoluta. Ni la terrible DANA de Valencia y la cuestionada gestión de su colega, el presidente valenciano, Carlos Mazón; ni la polémica articulada por su partido, el Partido Popular, en Bruselas para bloquear el nombramiento de la ministra Teresa Ribera como vicepresidenta de la Comisión Europea. Absolutamente nada. Ni san siquiera la investigación por presunta malversación que ha iniciado un juzgado de Sevilla y por el que están investigados los tres últimos gerentes del Servicio Andaluz de Salud (SAS), incluida la actual, Valle García. El perfil como estrategia y como postura para capear cualquier temporal.

El ejecutivo de Moreno Bonilla niega la mayor y tira por elevación, calificando el cerco al que la justicia está sometiendo su gestión sanitaria de los últimos años como “querella política”, en palabras de la titular de Economía y Hacienda, Carolina España, que minimiza el impacto y trayectoria judicial que está teniendo la denuncia interpuesta este verano por el PSOE de Andalucía por presunta malversación de casi 300 millones de euros concedidos a dedo a clínicas privadas entre 2021 y 2023 pese a que la norma estatal en la que se basaba ya había sido derogada previamente.

El consejero de Justicia augura que el cerco judicial a tres gerentes del SAS de Moreno Bonilla investigados por un juez es “una tabla de salvación que se ha inventado Espadas y le va a salir mal”

La oposición parlamentaria de izquierdas ha insistido por activa y por pasiva desde hace meses para que el ejecutivo andaluz dé explicaciones en el Parlamento autonómico sobre este asunto. Su gozo en un pozo. Una y otra vez, hasta esta misma semana en una estruendosa Junta de Portavoces, el Gobierno andaluz se ha escudado en las más inverosímiles excusas para vetar cualquier tipo de iniciativa que le obligue a dar explicaciones en la Cámara autonómica sobre estos contratos ahora investigados por la justicia.  La portavoz del PSOE en el Parlamento andaluz, Ángeles Férriz, ha asegurado que su grupo ha presentado 130 iniciativas solicitando información al ejecutivo de Moreno Bonilla sobre estos contratos sanitarios con clínicas privadas, además de varias peticiones de comisiones de investigación y también de plenos monográficos al respecto, solicitados en este último caso por la oposición en pleno, tanto por parte de las tres formaciones de izquierdas (PSOE, Por Andalucía y Adelante Andalucía) como de la ultraderecha de Vox. Todas las reclamaciones han caído en saco roto por parte de la aplastante mayoría que el PP tiene en la Cámara andaluza. La transparencia de la que presume promocionalmente el Gobierno de Moreno Bonilla vira a opaca cuando entra en el Hospital de las Cinco Llagas, sede del Parlamento autonómico.

Para diluir esta ofensiva por parte de la oposición, Moreno Bonilla no ha tenido más remedio que anunciar vía X que ha convocado el Debate sobre el estado de la Comunidad los próximos 11 y 12 de diciembre, con las luces navideñas y los polvorones como efecto dormidera, aunque el presidente andaluz lo ve más bien como el “momento de hacer balance y dar un nuevo impulso a Andalucía sin frentismos ni confrontaciones estériles”.

Mientras tanto, y en un intento de ir más rápido e incluso más allá que la propia justicia, precisamente el consejero de Justicia, José Antonio Nieto, ha asegurado este jueves en una entrevista en Canal Sur Televisión que “el líder del PSOE andaluz está muerto y necesita una tabla de salvación, y se ha inventado una tabla de salvación que le va a salir mal. Esta denuncia es la única salida que tiene Juan Espadas para mantenerse al frente del PSOE andaluz. Si eso le sale mal, que le va a salir mal, la historia política de Juan Espadas ha acabado”.

“Veo nervioso y faltón al consejero de Justicia del Gobierno de Moreno Bonilla. ¿Por qué será? Las dotes adivinatorias del señor Nieto son conocidas. Haciendo pareja con Zoido en el Ministerio del Interior, en una gestión que aún se recuerda con bochorno, también daba por muerto al que hoy es su Presidente y ahí lo tienen, luego lo perdonó. Céntrense en la instrucción judicial y en la Fiscalía Anticorrupción que les investiga por saltarse las normas y desviar dinero público a la sanidad privada, que tienen tarea”, ha respondido el líder del PSOE andaluz, Juan Espadas, en la red social X.

Mientras tanto, todo el rifirrafe político de estos días motivado por el encausamiento judicial de altos cargos del equipo de gobierno de Moreno Bonilla lo está viviendo el presidente en la lejanía física de Bakú en la cumbre del clima de Azarbaiyán. De nuevo, el perfil de un presidente que siempre opta por tomar distancia para no mancharse de “fango”, ese mismo “fango” que enarbola contra sus oponentes siempre que se ve acorralado por las acometidas de la oposición y los temas más peliagudos de la actualidad, ya sean relacionados con un almuerzo de trabajo de su colega valenciano o la validez europea de ‘amiga’ de paseos por Doñana, Teresa Ribera.