Podemos lanzó una severa advertencia al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) sobre las posibles consecuencias de un pacto con el Partido Popular (PP) para la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). El coportavoz de Podemos, Javier Sánchez Serna, manifestó su rechazo rotundo a cualquier acuerdo que permita a los jueces elegir a los vocales del CGPJ, afirmando que esto equivaldría a premiar el bloqueo de la derecha y avalar el lawfare.
El pacto de renovación del CGPJ fue firmado ayer por Félix Bolaños y Esteban González Pons, lo que deja la estabilidad del gobierno de Pedro Sánchez en el alero, dado que los diputados de la formación morada son claves para la aprobación de leyes en el Congreso de los Diputados.
Amenaza de Podemos
Podemos dejó claro que un pacto entre PSOE y PP podría desencadenar un "movimiento tectónico de legislatura" y llevaría a revaluar su relación y apoyo al Gobierno. Irene Montero, figura prominente de Podemos, ha afirmado que tal acuerdo marcaría "de facto el inicio de una nueva legislatura" y llevaría a un distanciamiento significativo de su formación respecto al Ejecutivo.
La crítica de Podemos se basaba en que permitir a los jueces elegir a los vocales del CGPJ consolidaría las posiciones de una derecha reaccionaria dentro del sistema judicial. Según Sánchez Serna, esta medida no tiene base constitucional y representa una "letanía de la derecha". El diputado enfatizó que ninguna persona de izquierdas debería apoyar que un poder del Estado se elija de manera censitaria sin control democrático, ya que esto podría condicionar la política democrática del legislativo y el ejecutivo.
El papel del PSOE y la geometría variable
Fuentes internas de Podemos han señalado que la "geometría variable" que en ocasiones activa el PSOE, alentando pactos de Estado con el PP para después buscar apoyo a la izquierda en medidas sociales, ha sido un fracaso. La formación morada sostiene que el PSOE debe centrarse en sus socios parlamentarios para mantener la estabilidad, especialmente en temas tan sensibles como el Poder Judicial. La aceptación de la propuesta del PP, según Podemos, sería una rendición que causaría más problemas a largo plazo.
Sánchez, se encuentra en una encrucijada. Los 175 escaños del PSOE, Sumar, fuerzas nacionalistas y el voto individual de José Luis Ábalos, junto con los cuatro apoyos de Podemos, conforman una mayoría parlamentaria frágil. Sin el respaldo de Podemos, el Ejecutivo se quedaría por debajo de la mayoría absoluta necesaria para cualquier votación crucial.
Por su parte, el PP ha defendido la necesidad de un cambio en la elección de los vocales del CGPJ, argumentando que permitir a los jueces elegir a sus representantes garantizaría una mayor independencia judicial y un funcionamiento más eficiente del sistema. Sin embargo, este planteamiento ha sido vehementemente rechazado por Podemos, que ve en ello una amenaza a la democracia y un intento de la derecha de consolidar su poder en las instituciones.
Podemos y la justicia social
La insistencia de Podemos en no aceptar un pacto que permita a los jueces elegir a los vocales del CGPJ tiene profundas implicaciones para el futuro de la legislatura. Si el PSOE decide avanzar con el PP, podría enfrentar no solo una ruptura con Podemos, sino también una crisis de gobernabilidad. Esto abriría la puerta a un escenario político inestable donde las reformas y políticas sociales impulsadas por la izquierda podrían verse gravemente comprometidas.
Podemos ha enmarcado este debate dentro de una narrativa más amplia sobre la justicia social y la democratización de las estructuras del Estado. La formación morada insiste en que la estabilidad de España pasa por profundizar en las transformaciones feministas, sociales y plurinacionales. Montero ha criticado al PSOE por, según ella, aparentar ser de izquierdas mientras busca una alianza estable con el PP para asuntos de Estado.
La advertencia de Podemos al PSOE sobre la posible alianza con el PP para la renovación del CGPJ subraya las tensiones intrínsecas en la coalición de gobierno y la delicada naturaleza de los acuerdos políticos en España. Mientras que el PP y el PSOE podrían ver en este pacto una solución para desbloquear las instituciones, Podemos lo ve como una traición a los principios progresistas y un peligroso retorno al bipartidismo. La decisión final que tome el PSOE no solo determinará la configuración del CGPJ, sino también la estabilidad y dirección futura del gobierno de coalición. En un contexto donde la justicia social y la democratización son temas candentes, este enfrentamiento podría redefinir la política española en los próximos años.
La legislatura del bipartidismo
Tras hacerse público el acuerdo entre PSOE y PP para la renovación del CGPJ, Podemos señaló que el gobierno del PSOE había inaugurado "una nueva legislatura de la gran coalición con el PP."
Ione Belarra, secretaria general de la formación morada, deslegitimó el acuerdo calificándolo como la "legitimación de la guerra judicial y un mensaje peligroso a los españoles sobre que a la justicia no llega la democratización." Además, ha reprochado a Pedro Sánchez el incumplimiento de sus promesas sobre regeneración democrática tras su "retiro" de 5 días para reflexionar sobre si le valía la pena seguir al frente del Ejecutivo. "Este pacto inaugura una nueva legislatura, la de la gran coalición del PSOE y el PP, la restauración del bipartidismo," ha insistido Belarra.