El apoyo del PP al giro de Sánchez a favor de Marruecos sería la muerte política de Feijoo y el triunfo de Vox

05 de Abril de 2022
Actualizado el 02 de julio de 2024
Guardar
Alberto Núñez Feijóo. Foto: Partido Popular

Pedro Sánchez dio su apoyo a Marruecos a cambio de nada porque en lo que se quieren denominar como «nueva etapa» de relaciones entre los dos países aún no se han notado ningún tipo de avances. Por un lado, aún no se han abierto las fronteras de Ceuta y Melilla. Por otro, siguen cerradas las líneas marítimas entre el sur de España y el norte de Marruecos. Estos dos aspectos están afectando gravemente a la economía de las dos ciudades autónomas y de Algeciras, Tarifa, Málaga, Motril y Almería.

En otro orden, Mohamed VI aún no ha respondido a la carta en la que Sánchez le anunció su apoyo a que el Sáhara Occidental pase a ser parte del Reino de Marruecos. ¿Qué le darán a España, no Marruecos, los reyes alauís? ¿Se lo dará el presidente Joe Biden o los lobbies de su hermano? Llegaremos a saberlo.

Fuentes diplomáticas de extrema solvencia han confirmado a Diario16 cómo el secretario de Estado, Antony J. Blinken, impuso el pasado 18 de enero en Washington al ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, que se cumpliera de manera inmediata la hoja de ruta sobre Marruecos y el Sáhara que previamente había sido pactada con Mohamed VI.

La situación no es nueva. La historia muestra cómo, en los momentos en que ha habido conflictos entre España y Marruecos, los Estados Unidos siempre se han posicionado a favor del reino alauí. Ocurrió en la guerra de Ifni. Sucedió en la Marcha Verde, cuando los norteamericanos prohibieron a los militares españoles el uso del armamento que Franco les había comprado y que correspondía a los excedentes de la guerra de Corea. Si nos vamos más atrás en el tiempo, no hay que olvidar jamás la posición de Estados Unidos en Cuba, Filipinas y Puerto Rico.

A todo lo anterior hay que añadir la posición de Marruecos respecto a Ceuta y Melilla. Sánchez no ha logrado una declaración explícita por parte de Mohamed VI por la que se va a respetar la españolidad de las dos ciudades autónomas. Marruecos siempre seguirá reclamando que tanto Ceuta como Melilla y las aguas territoriales de Canarias le pertenecen. No en vano, en la web de la Embajada marroquí en España tanto el Sáhara como las dos ciudades españolas del norte de África aparecen ya incluidas dentro del territorio de Marruecos.

Este es el giro de Sánchez, que mañana viajará a Rabat para rendir pleitesía a Mohamed VI porque este es el único modo por el que Marruecos entiende las buenas relaciones diplomáticas.

Lo + leído