Al futuro siempre le gusta ser imprevisible. ¿Quién le iba a decir a Max Verstappen después de las primeras carreras de la temporada que al llegar el ecuador su coche ya no sería el más rápido?
El pasado 1 de mayo anunció la escudería de las bebidas energéticas oficialmente que su "genio de la lata", el gran Adrián Newey, abandonaba al toro energético. Y a partir de ahí...
Pero no sólo eso. Desde casi la nada, desde la penumbra, otra escudería, la de los coches color papaya, comenzó a fortalecerse y crecer hasta convertir sus bólidos en verdaderos gigantes. Había llegado McLaren.
Sin embargo Max Verstappen es mucho Max Verstappen, e incluso con un coche un poco inferior conseguía salvar los muebles y ganar carreras.
Hasta que en el Gran Premio de su país, edición 2024, tras quedar primero en las tres ediciones anteriores -después de haber vuelto Países Bajos al calendario- Max Verstappen ha sido finalmente derrotado por uno de los pilotos de la escudería papaya.
Aún tiene setenta puntos de ventaja el holandés, y solo faltan nueve carreras. Pero a esas nueve carreras hay que añadirle tres carreras sprint que también reparten sus puntitos. Max sigue siendo matemáticamente el favorito para alzarse con la corona de la Fórmula 1 en el 2024, pero hoy Lando Norris ha demostrado que es capaz de adelantarle en pista, y que no es tan "buen chico" y modosito como algunos pensaban.
Se ha quedado el mundo entero con los ojos abiertos y sin palabras cuando al cruzar la meta y ver la bandera a cuadros no sólo ha resultado que Lando Norris era el ganador, sino que también era el piloto que había hecho la vuelta rápida.
Esa vuelta rápida en el ultimísimo momento es una declaración de intenciones.
¡¡¡AQUÍ ESTOY YO!!!
Sí, en efecto aquí está Lando Norris. Y suponemos que rezando para que McLaren no tenga que odiarse como escudería por haber obligado a Lando a ceder la primera posición a favor de Piastri, su brillante compañero papaya, en el Gran Premio de Hungría.
Liberty Media está manejando con mano firme las riendas de la Fórmula 1. No quiere más campeonatos aburridos.
En sólo una semana, en Monza, vuelven a salir a la pista los payasos, los trapecistas, los elefantes y los enanos, los Tigres y las jirafas... En suma, todos los protagonistas de lo que vuelve a ser el maravilloso Gran Circo de la Fórmula1.
Tigre Tigre