la entidad les aseguró que las cuotas de la hipoteca jamás subirían más allá de los 400 euros mensualesSegún Loli, la entidad les aseguró que las cuotas de la hipoteca jamás subirían más allá de los 400 euros mensuales. El cuadro de amortización que les presentaron les pintaba un futuro muy halagüeño porque, como nos dice ella: “¿Quién no puede pagar 400 euros al mes?”.La oferta vinculante la firmaron en la puerta del notario y, como ocurre en todas las notarías, la lectura pública de la escritura fue rápida, apenas 15 minutos, y nadie se molestó en preguntarles si entendían lo que iban a firmar. Loli hace un comentario muy propio de esta época, culpabilizándose: “Culpa nuestra también porque hipotecamos nuestro futuro y nuestra salud física y psíquica”. “Lo primero era pagar la hipoteca”En el año 2012 el Euribor comenzó a bajar y, por consiguiente, las hipotecas también en cada una de sus revisiones. No obstante, la de Loli no lo hacía. Esto coincidió con que su situación personal y económica se iba precarizando. Su marido era autónomo y llevaba varios meses de baja a causa de una lesión en la espalda. Incluso les llegaron a cortar la luz en más de una ocasión porque “lo primero era pagar la hipoteca”.Es entonces cuando Loli decide ponerse en contacto con UCI para averiguar por qué las cuotas de su préstamo hipotecario no se reducían. La respuesta de la entidad fue que, para empezar, su hipoteca tenía techo y que tenía IRPH. «Me quedé de piedra pues era la primera vez que oía esto. No es por hacerme la ignorante, pero para mí sólo existía el Euribor».
En cifras, la situación de Loli con su hipoteca es la siguiente: Ella firmó en el año 2006 un préstamo hipotecario de 58.000 euros a 20 años. Lleva diez años pagando religiosamente su cuota mensual y ha liquidado 25.000 euros en concepto de intereses y aún le quedan por pagar 51.000 euros. Es decir, que en una década sólo ha liquidado un 12% del total de su deuda. Como la misma Loli se preguntaba: “¿cómo se puede amortizar toda la deuda en los diez años que me quedan si en los diez primeros sólo he pagado 7.000 euros?”. Ella y su familia tuvieron que decidir entre seguir pagando la hipoteca o invertir ese dinero en pagar los honorarios de un abogado para interponer una demanda en el juzgado contra la entidad para reclamar la anulación del IRPH, ajustar su hipoteca con el Euribor y que le devuelvan el dinero cobrado de más.en una década sólo ha liquidado un 12% del total de su deuda
Jamás hubiéramos firmado esta locura de haber estado informados”Pero, ¿qué es el IRPH? Se trata de uno de los indicadores que utilizan las entidades financieras españolas para actualizar con tipos de interés variable. Es publicado mensualmente por el Banco de España en el BOE. Generalmente es un índice hipotecario que suele estar por encima del Euribor entre un 1,5% y un 3% y sus oscilaciones son mucho más lentas sobre todo en las bajadas, algo similar a lo que ocurre con el precio de la gasolina cuando baja el petróleo. Durante la burbuja inmobiliaria las entidades bancarias comercializaron el IRPH con el argumento de que daba una mayor estabilidad a las cuotas mensuales.“Es muy duro lo que estamos pasando. Yo en breve me veo en ejecución hipotecaria injustamente. Jamás hubiéramos firmado esta locura de haber estado informados”. Esta frase de Loli lo dice todo.