La inflación continuó su tendencia a la baja durante el pasado mes de diciembre y cayó hasta el 3,1%, una décima por debajo de la registrada en noviembre, según los datos definitivos del Índice de Precios al Consumo (IPC). El Instituto Nacional de Estadística (INE) confirma el dato adelantado provisional del pasado 29 de diciembre.
La razón de esta bajada, la segunda después de meses de subidas se debe a la estabilidad de los precios de los alimentos, que se sitúan en la menor tasa desde hace casi dos años (baja 1,7 puntos en el último mes, hasta el 7,3%).
Los grupos que destacaron por su influencia en la disminución de la tasa anual fueron:
Alimentos y bebidas no alcohólicas, con una tasa del 7,3%, 1,7 puntos por debajo de la del mes anterior. Esta evolución se debió, en su mayor parte, a que los precios de la leche, huevos y queso, el pan y cereales y la carne subieron menos que en diciembre del año 2022. Y que los precios de las legumbres y hortalizas bajaron, frente al aumento en 2022.
Bebidas alcohólicas y tabaco, que descendió su variación 3,7 puntos, hasta el 3,4%. Este comportamiento fue debido, principalmente, a la estabilidad de los precios del tabaco, que aumentaron en diciembre de 2022.
Por su parte, entre los grupos con influencia positiva destacó:
Transporte, que situó su tasa en el 3,9%, casi cuatro puntos por encima de la del mes pasado. Esta subida se debió al descenso de los precios de carburantes y lubricantes para vehículos personales, menor que en el mismo mes de 2022.
La tasa de variación anual de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) disminuyó siete décimas, hasta el 3,8%.