Los agricultores de toda la UE tienen un enorme papeleo administrativo del que ocuparse, además de su trabajo real. Realizar tantos trámites lleva tiempo y cuesta dinero a los profesionales del campo y a las administraciones nacionales. La Comisión Europea, que ha emprendido una simplificación administrativa de escala más amplia, ha propuesto una serie de cambios en las normas de la política agrícola común que quitarán a los agricultores parte de esta carga burocrática y estimularán la competitividad.
Pagos más sencillos para los pequeños agricultores
El límite anual del pagos a tanto alzado (cantidades fijas) que se aplica a los pequeños agricultores pasará de 1.250 euros a 2.500 euros.
Los pequeños agricultores estarán exentos de cumplir determinadas normas medioambientales y podrán beneficiarse de pagos que recompensen a la agricultura respetuosa con el medio ambiente.
Simplificación de los requisitos y controles medioambientales
Se considerará que las explotaciones ecológicas certificadas cumplen automáticamente algunos de los requisitos medioambientales de la UE para obtener financiación.
Los agricultores podrán beneficiarse de incentivos para proteger las turberas y los humedales.
Los controles se racionalizarán utilizando satélites y otras tecnologías, y se limitarán a una inspección anual sobre el terreno por explotación agropecuaria
Refuerzo de la gestión de crisis y simplificación de los procedimientos para las administraciones nacionales
Los agricultores de la UE afectados por catástrofes naturales o enfermedades de los animales recibirán ayuda a través de nuevos pagos por situaciones de crisis y herramientas de gestión de riesgos más flexibles y accesibles
Los países de la UE se beneficiarán de una mayor flexibilidad a la hora de adaptar sus planes estratégicos de la PAC, y sólo se requerirá la aprobación previa de la Comisión para las modificaciones estratégicas
Mejora de la competitividad y la digitalización
Los pequeños agricultores podrán acogerse a una nueva opción de financiación sencilla que ofrece una cantidad fija de hasta 50.000 euros para ayudar al crecimiento de sus explotaciones.
Se instará a las administraciones nacionales a desarrollar sistemas digitales interoperables para que los agricultores sólo tengan que presentar sus datos una vez, a través de un sistema único, de manera que se ahorre tiempo y se reduzcan costes
Este paquete de simplificación se basa en medidas similares que ya introdujo la Comisión en 2024 y representa un resultado clave de la visión para la agricultura y la alimentación de la UE que se presentó en febrero de 2025. El proceso continuará a finales de este año con un paquete transversal de simplificación legislativa que estará centrado en otras políticas que afectan a los agricultores, las empresas agroalimentarias y las administraciones.