Hay quien dice que se puede conocer mucho de una persona viendo cómo tiene decorado u ordenado su despacho o su puesto en el trabajo. Cuando entras en el despacho de Juan Lobato te das cuenta de que es absolutamente funcional donde, quizá, lo que más salta a la vista es una lámpara de difícil definición, un crisma firmado por Isabel Díaz Ayuso y las banderas de la Comunidad de Madrid, España y la Unión Europea. El resto, sin ningún tipo de objeto estrafalario.
Por otro lado, también sorprende su mirada de niño pequeño en la noche de Reyes. De sus ojos se desprende la ilusión por el futuro cercano, pero también la convicción de que los anhelos que pueda tener a nivel personal o para los ciudadanos de Madrid los puede conseguir.
Lo mismo se puede decir de su perfil en redes sociales que, sobre todo en la clase política, puede llegar a definir perfectamente la personalidad y las prioridades vitales. Antes de la política está la familia y, por eso, la primera palabra que aparece es «Papi», y esas cuatro letras, junto a tres emojis, dan a entender que lo más importante en su vida son sus dos hijas y su hijo.
Juan Lobato forma parte del Cuerpo de Técnicos de Hacienda y, quizá, esa deformación profesional por los números hace que su diagnóstico sobre la situación política actual, tanto a nivel nacional como de la Comunidad de Madrid, tenga la precisión del bisturí de un cirujano y lo ecléctico de los números.
Fue elegido alcalde de Soto del Real en dos ocasiones y se convirtió en el primer alcalde socialista de esta localidad al norte de Madrid desde el fusilamiento de Eugenio Candelas en la Guerra Civil. También ocupó un escaño en la Asamblea de Madrid en 2015. Actualmente es el secretario general del PSOE-M, portavoz del grupo parlamentario y candidato a la Presidencia de la Comunidad de Madrid.
Es casi obligatorio empezar hablando de sanidad y del conflicto constante entre Isabel Díaz Ayuso y los médicos, ¿esto es normal cuando se está jugando con la salud y la vida de los ciudadanos o es que se está evitando buscar soluciones?
Pues sí, exactamente, ahí hay dos problemas, como bien dices. Uno es el problema de las formas. En una presidenta arrogante, soberbia y prepotente, que trata con desprecio a los cientos de miles de familias que tienen cosas normales, que este mes su médico de toda la vida en las urgencias de su centro de salud o que la lista de espera no sea de un millón de personas como está llegando a ser, frente a los 600.000 que había cuando llegó ella, es decir, gente normal pidiendo cosas normales. Y responde con soberbia. Segundo, además de la forma, es el fondo que, por primera vez en 40 años en Madrid, en vez de ir a mejor en lo principal que nos afecta en la vida, que es la salud y la sanidad, en vez de ir a mejor está yendo a peor. Es terrible y eso está pasando en Madrid y no es por un problema económico, no. Es una decisión de política de desmantelamiento programado de los servicios públicos y particularmente de la sanidad. Esto es intolerable.
Ahí, evidentemente, siempre se habla de la privatización encubierta que ya empezó con gobiernos anteriores. Realmente el objetivo del Partido Popular, no ya de Ayuso, del Partido Popular es llevar a un modelo en el que la colaboración público-privada pase de eufemismo a una realidad…
¿Y qué colaboración público-privada está aquí? Ya pasó hace 10 años. Tuvimos a Lasquetty encargado de ese proceso privatizador. Tuvo que dimitir por todo lo que pasó en ese momento Ahora ha vuelto como consejero de Hacienda. Claro, es él el que decide cuántos médicos se contratan o se despiden en la Comunidad de Madrid, como los 6.000 sanitarios que Ayuso decidió despedir hace unos meses. Esa es la situación en la que estamos. Entonces, ¿qué colaboración público-privada? Yo acepto y respeto enormemente el sector privado, pero, hombre, que se haga con un control milimétrico, con transparencia absoluta y de forma rigurosa. Lo que está pasando en Madrid por parte del Gobierno de la Comunidad no es eso. Entonces, después de la experiencia Lasquetty, que 10 años después nos encontremos en este escenario. Yo creo que no es lo que merecen las familias en Madrid.
Otro de los asuntos que más está perjudicando a la imagen de Isabel Díaz Ayuso es la situación de los vecinos de San Fernando de Henares afectados por las obras del Metro. La presidenta pretende mostrarse con espíritu de colaboración pero los hechos demuestran que las cifras de las indemnizaciones están manipuladas ¿cómo se puede ser tan cruel y populista?
Otra vez lo mismo los problemas, la arrogancia, la soberbia y el desprecio a las 600 familias afectadas ya por sus viviendas en San Fernando de Henares más otras miles que viven con el agobio, cada día, de esperar cuándo salta el azulejo de la cocina o se abre la grieta en el techo del salón. La arrogancia y la falta de respeto y, además, la falta de gestión. Esto viene de donde viene, de las prisas electoralistas de la madrina de Ayuso, Esperanza Aguirre. Esas prisas electoralistas llevaron a hacer esta obra de metro sin informes geotécnicos, algo que te piden hasta para hacer la caseta del perro en el patio. Pues no hicieron informe geotécnico y ahora, con la respuesta de gestión, como muy bien dices, de prometer muchas cosas para que luego no sea real. No hay un plan integral como hemos propuesto en la Asamblea, nos han impedido tramitar la ley que hemos propuesto en la Asamblea de Madrid con esa solución de 100 millones de euros para resolver de forma completa ese problema. Arrogancia y, a la vez, falta de gestión. Esa siempre es la conjugación del gobierno de Isabel Díaz Ayuso y del PP de Madrid.
Las crisis económicas que llevamos concatenando desde 2008 han cambiado el perfil de votante mucho más pragmático y menos ideológico. Su campaña y su programa así parece haberlo captado...
La inmensa mayoría de la sociedad, y por supuesto también en Madrid, lo que pide a los políticos son cosas concretas. Yo, en mi día a día, en ¿qué puede mejorar mi vida? ¿Cómo puedo arreglar este problema? Yo creo eso es la gente pide y que están hasta las narices de la confrontación, de la crispación, de los numeritos, de ser artificiales criticando cosas que no tiene nada que ver con él, con el día a día. Y yo estoy tan obsesionado con esto que en el año que llevo de secretario general lo que hemos hecho son propuestas absolutamente concretas: el plan de rescate de la sanidad pública, con el Pacto por la Salud que propusimos cuando ya están completas en prevención y promoción de la salud, en atención primaria; el plan de transportes, con la tarifa plana única para toda la Comunidad de Madrid para que haya discriminación según donde vivas; el plan de educación que hemos presentado con esa propuesta tan clara de capacitación de 250.000 jóvenes en un plazo de 18 meses. Eso es en lo que está la gente, en que les digamos, oye, déjate ya de rollos y de discursitos y ¿qué cuestión concreta que me afecte a mí de verdad cada mañana cuando me levanto vas a arreglar y cómo para que pueda vivir mejor. Voy a seguir hablando de esto, aunque me contesten hablando de Venezuela, de ETA y de lo que haga falta, que es a lo que se dedica a Ayuso. Pero yo creo que la gente lo que quiere es que seamos coherentes, que hablemos de las cosas de verdad.
Eso le viene de la política municipal…
Exacto, es que se nota tan claro el político que ha pasado por la política municipal y el que no. Saber cómo los vecinos te piden tener las cosas concretas de verdad. El día a día, no aquí, los grandes discursos, de lo que estamos todos los días un poquito hartos de ver en la televisión.
Ni siquiera durante la campaña electoral, Isabel Díaz Ayuso ha dejado de hacer oposición al gobierno de Pedro Sánchez. ¿Realmente está preparando Ayuso su asalto a la política nacional de cara a las elecciones generales?
Creo que es evidente que sí. Primero se dedicó a moverle la silla a Casado hasta que se lo cargó. Y ahora está dedicando a mover la silla Feijóo hasta que se lo cargue todo. Esto del PP es muy curioso. ¿Quién nombró candidata a Ayuso? Casado. ¿Quién se cargó a Casado? Ayuso. ¿Quién va a nombrar al candidato del PP a la Presidencia del Gobierno? ¿Qué sabemos? Sí, ese es el PP, sí.
La política fiscal del actual gobierno no va a cambiar y se seguirá privilegiando a las grandes fortunas y las grandes empresas...
Tengo clara la incoherencia e hipocresía que tiene la política del Partido Popular en Madrid y de Isabel Díaz Ayuso. El mejor ejemplo lo tuvimos cuando una empresa como Microsoft decidió venir a España, aunque fue el Gobierno el que se encargó durante meses de cerrar el acuerdo para que viniera a Madrid y pretendieron venderlo como méritos de Ayuso, porque esto es Miami, pero resulta que cuando una gran empresa de Madrid, con sede social en Madrid, decidió irse, como fue el caso de Ferrovial, ¡ah, no, no, eso es culpa de otros, yo no tengo nada que ver. Ya no somos Miami. Eso es Ayuso, la inconsistencia permanente, la falta de coherencia. Es que no hay día que tenga una misma posición sobre temas como estos, que esto es mucho más serio, que tener capacidad de atraer inversión, talento, sobre todo en capacidad productiva en Madrid pasa primero por ser serios y solventes y por no dar este tipo de mensajes que generar incertidumbre en las grandes empresas que de verdad quieren apostar con seriedad en un país.
En el escenario actual, en el que se han concatenado tres crisis económicas globales, parece claro que el modelo neoliberal ha fracasado, ¿qué alternativa económica va a presentar si llega a ser presidente?
Mira, es clarísimo y esto ya lo hemos explicado y propuesto de forma muy concreta. ¿Cómo se toman las grandes decisiones de inversión productiva? ¿Cómo las grandes empresas que generan valor añadido, empleos de calidad en los ámbitos que yo creo que son claves de futuro, tecnológicos, de investigación, de desarrollo, de biotecnología toman sus decisiones de inversión? Pues ya no es como hace 20 ó 30 años, que sí que tenían la fiscalidad como principal elemento. Hoy estas grandes empresas, que son las que generan futuro y valor añadido compiten en talento. Lo que necesitamos en Madrid es ser una cuna de talento y en Madrid hay un triángulo maldito que existe hoy en el que tenemos un alto paro juvenil por encima de la media española. El pasado verano, la región de toda Europa con mayor paro juvenil. A la vez, tenemos 33.000 jóvenes que este curso han querido hacer Formación Profesional y que la Comunidad de Madrid les hemos dejado sin plaza. Y, a la vez, tenemos a empresas de valor añadido que no encuentran profesionales. Por eso proponemos ese curso de capacitación profesional para formar a 250.000 jóvenes, de tal forma que cuando estas empresas tienen que tomar sus decisiones de localización productiva, sepan que en Madrid va a ver jóvenes formados, dispuestos y encantados de trabajar y que sepan que van a competir en talento. si vienen a Madrid. Eso es lo que hay que hacer y es todo lo contrario a lo que está haciendo Madrid, que está alejando a los jóvenes sin plazas de Formación Profesional.
Vayamos al 28 de mayo sobre las 11 de la noche.
Buena hora…
El recuento da a la suma de la izquierda, independientemente del partido ganador, mayoría absoluta. ¿El PSOE facilitará un gobierno de coalición progresista en Madrid, aunque usted no sea el candidato más votado?
El PSOE se presenta para presidir la Comunidad de Madrid, porque somos un partido de mayorías transversal, de gente demócrata, con condiciones sociales, que quiere avanzar en la vida y que le vaya mejor a su familia, a su gente, y que haya buenos colegios para sus hijos, buena sanidad. Eso es la mayoría de los madrileños, esa gente. Entonces tenemos que tener la capacidad de explicarle que lo que nosotros queremos es favorecer eso. con claridad A partir de ahí, yo he sido alcalde durante 6 años. Las primeras elecciones gané por 11 votos y no tuve mayoría, por supuesto. Decidimos gobernar en solitario con apoyos puntuales con los otros grupos municipales que nos iban a apoyando una cuestión u otra. Cuatro años después, gracias a gobernar con total participación, apertura y transparencia, no sólo sacamos mayoría absolutísima, sino que triplicamos en votos al Partido Popular. En esa segunda legislatura, pese a que tenemos mayoría absoluta, decidí incorporar al gobierno a gente de otros partidos que nos podían ayudar y que querían sumar. Me decían, ¡pero hombre, si no te hace falta, si tienes mayoría absoluta! Es que no se trata de eso. Se trata de quién quiere echar una mano, aportar, quién tiene buenas ideas, quién tiene de verdad la convicción de que Madrid es un cañón y que se le puede sacar muchísimo provecho. Quien esté en eso, yo contaré con él y participaré y trabajaré con él o con ella muy bien.
Isabel Díaz Ayuso, con su explotación del tema de ETA, ha estado intentando captar mucho voto de la extrema derecha...
A mí es que me parece tan casposo tanto la ultraderecha como muchas de las frases de Isabel Díaz Ayuso. Yo creo que en Madrid, que es una región moderna, abierta, donde la gente entra y sale, donde hay un dinamismo tremendo, que estemos todavía con partidos así, de verdad, de otro siglo con frases y declaraciones que tienen muy poco que ver con esa apertura, libertad de verdad y modernidad de Madrid, que me resulta, bueno, como muy poco madrileño.
Volvamos a las elecciones, ¿su candidatura se resentirá por el desgaste de cinco años en el gobierno central o se beneficiará de la agenda social del Ejecutivo de Pedro Sánchez?
Lo que me da mucha rabia es que haya ruido sobre temas que no afectan al día a día de la gente. Todo el día, Puigdemont, la antigua banda ETA, que se acabó hace 10 o 12 años. Este tipo de cosas yo creo que no ayudan ni a la convivencia ni al bienestar de las familias en Madrid, ni mucho menos, a que hablemos de sus problemas y de sus soluciones. Por lo tanto, es verdad que ese ruido no le viene bien a nadie. A los primeros a las familias. Ahora, es evidente que hay políticas del Gobierno de España que han beneficiado particularmente mucho en Madrid. Toda la política de ERTE que salvó a muchísimas empresas y trabajadores en la pandemia, la subida del salario mínimo interprofesional, especialmente para jóvenes y mujeres, y la subida de las pensiones a 1,2 millones de madrileños que viven con más dignidad y que pueden tener una vida mejor en Madrid gracias a la subida de pensiones. Hombre, yo creo que eso ayuda mucho a que las familias en Madrid tengan mucha mayor cobertura, estén protegidas y puedan seguir avanzando.