El incremento de los contagios por Covid-19 y la aparición de nuevas mutaciones mucho más contagiosas, como ómicron, ha tenido su reflejo en el último Barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), dado que muestra cómo el número de personas que es partidaria de la vacunación obligatoria contra el Covid-19 haya superado el 52%.
Esto supone un incremento de seis puntos respecto a noviembre y que se ha dado, principalmente, del trasvase producido desde aquellos ciudadanos que manifestaron hace un mes sus dudas. Por otro lado, los que son contrarios a la obligatoriedad de la vacunación se mantiene en el 22%.
Por otro lado, el barómetro del CIS indica que bajan dos puntos, hasta el 65% los que consideran que habría que obligar a vacunarse al personal sanitario, al personal que trabaja en las residencias de personas mayores y a los que tienen relaciones profesionales directas con el público en general.
La primera razón para no vacunarse sigue siendo que no se fía de estas vacunas (el 21,7% de los que no piensan vacunarse dieron esta repuesta). Le sigue el miedo a que tengan riesgos para la salud y efectos secundarios o colaterales (18,5%), y que no se creen que sean eficaces (8,2%).