Pese a que las restricciones para los fumadores son cada vez más grande en el ámbito público, son muchas las personas que aún persisten en este hábito tan dañino. También hay muchas personas que son consciente de ello y que quieren dejarlo. Otras personas, lo intentan sin éxito.
Hoy presentamos algunos consejos para dejar de fumar. Si eres de los que quieren dejarlo, o de los que lo han intentado y no han podido, sigue leyendo.
Por qué dejar de fumar
Dejar de fumar alargará tu esperanza de vida. Si este motivo no te ha convencido, hay muchos más: evitar enfermedades como el cáncer, o enfermedades cardiovasculares, insuficiencia respiratoria, o infecciones en las vías respiratorias. Si eres mujer, debes saber que fumar afecta directamente a tu fertilidad o puede provocar complicaciones en el embarazo.
Fumar envejece a todos los niveles, tanto en el interior de nuestro cuerpo, como hemos visto, como en nuestra piel. Y también afecta a la salud de los que nos rodean y respiran nuestro humo, como nuestra familia si fumamos en casa, y también puede hacer que las personas con las que convivimos, especialmente los más pequeños, tengan una mayor probabilidad de tener alergias, asma o infecciones respiratorias.
Como dejar de fumar
Una de las mejores armas para dejar de fumar es recordar frecuentemente los beneficios de dejar este hábito: sentirte mejor, ahorrar dinero, evitar enfermedades propias y de los que nos rodean y per estar más sano, por ejemplo. También debes conseguir vencer el deseo de fumar intentando hacer algo cuando surja ese deseo de fumar. Recuerda que, cada vez que venzas a ese deseo, es un paso más que puedes dar hacia dejarlo.
En ese sentido, existe una herramienta para aplazar ese deseo. Consiste en obligarse a esperar 10 minutos cuando tengamos ganas de consumir tabaco y luego distraerse con algo en ese tiempo u obligarnos a entrar en una zona en la que no esté permitido fumar.
Alternativas al tabaco para dejar de fumar
Hay muchas personas que recurren a los cigarrillos electrónicos para dejar de fumar, aunque hay cierta controversia sobre si esta manera de consumir nicotina ayude a dejar de fumar. Lo cierto es que vapear es menos perjudicial para la salud que fumar.
Tal como podemos leer en el blog de la página especializada Vaposeleccion Tienda de Vapeo, hay “numerosas evidencias en forma de estudios, informes, análisis o encuestas que vienen de diferentes países que avalan el hecho de que los productos de nueva generación presentan un menor riesgo para la salud que los cigarrillos tradicionales”.
Esta web ofrece un amplio abanico de posibilidades en su tienda de vapeo online en donde encontrar todo tipo de vapeadores y líquidos para utilizar esta manera para consumir nicotina.
Mucho más sano que fumar
Efectivamente, el vapeo es menos perjudicial que fumar y se ha demostrado que los daños que pueden sufrirse fumando tabaco convencional se reducen de manera sustancial porque no hay ni combustión, ni tabaco y ello reduce sustancialmente la exposición de nuestros pulmones a sustancias tóxicas.
Ello implica un menor riesgo de cáncer y su afectación al sistema respiratorio es menor. Estos riesgos se reducen sólo en el caso de que el paso al vaper sea total y no parcial, es decir, utilizando el cigarrillo normal y también el electrónico.
En este sentido, para dejar de fumar con el cigarrillo electrónico es importante que debemos entender que podemos tomarlo cuando no podamos evitar el deseo, evitando que ello se convierta en “otra manera de fumar”. No hay que olvidar que los líquidos que se utilizan contienen nicotina y esto quiere decir que estamos expuestos a los mismos riegos de esta sustancia que un fumador convencional: la adicción y los efectos neuronales que tiene esta sustancia psicoactiva.
Otras opciones para dejar de fumar
Desarrollar actividad física puede ser de gran utilidad para distraerte del consumo de tabaco. Es por este motivo que muchos expertos recomiendan que, en el momento de sentir el deseo de fumar, llevemos a cabo alguna actividad física como dar un paseo o, incluso, llevar a cabo alguna actividad doméstica.
La mayoría de las personas utilizan el tabaco como válvula de escape para lidiar con el estrés. Es por ello que se recomienda la realización de actividades que nos permitan relajarnos, tales como meditar, hacer yoga o ejercicios de relajación. También compartir nuestro esfuerzo por dejar de fumar con otras personas, como familiares o grupos de apoyo, puede ayudarnos a resistir el deseo de fumar.
Finalmente, podemos buscar ayuda médica para encontrar algunas terapias que nos permitirán dejar de fumar. Desde la medicina hay varias terapias que pueden ayudarnos, como las de reemplazo de la nicotina con inhaladores, aerosoles, parches, chicles o medicamentos para dejar de fumar.
Las opciones para dejar este hábito son numerosas y puedes intentar dejarlo cuando lo decidas de manera firme.