Bangkok, una ciudad que encierra muchas ciudades en su interior

El espectáculo de esta ciudad está en la calle, con sus gentes llenas de vida, sus improvisados puestos callejeros de comida, sus olores, sabores y colores repletos de fuerza, energía y sana cotidianidad

01 de Enero de 2025
Actualizado el 13 de enero
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Templo de Wat Pho Bangkok
El templo de Wat Pho

Bangkok es una ciudad vibrante, apasionante y muy vital, que tiene vida durante casi todo el día y me atrevería a decir que también durante la noche, sobre todo en sus abarrotados mercados. Como muchas ciudades asiáticas y como dice el título que encabeza esta reseña sobre la capital de Tailandia, se puede decir que en Bangkok se encierran varias ciudades e incluso identidades. Esta ciudad es como una gran matrioska asiática. Hay un centro histórico con templos, palacios, grandes parques y museos, un auténtico barrio chino, un centro financiero, muchos barrios con personalidad propia y muchos lugares que visitar y donde perderte.

Luego, aparte de la arquitectura, está la famosa y sabrosa gastronomía tailandesa, una mezcla de sabores y olores caracterizada por un regusto algo picante. El ingrediente principal en la comida tailandesa, como ocurre con otras del sudeste asiático, es el arroz, que puede ser condimento de una sopa, frito, cocido o acompañante de carnes, mariscos y pescados. La cocina de este país es una mezcla de sabores ácidos, salados, dulces y picantes, donde predomina el pollo y la ternera en todas sus formas y los mariscos y pescados, principalmente.

Por cierto, una de las grandes curiosidades de Bangkok, para los que gusten de las aventuras y emociones fuertes, es la calle Kho San Road, donde podrás degustar sabrosos alacranes, grillos y gusanos, incluso algunos servidos con forma de pinchos morunos. Este lugar, conocido por su exotismo y atractivo por parte de un cierto público bohemio, joven y poco convencional que pasa por esta gran urbe, tiene una gran vida especialmente durante la noche, en que sus bares, discotecas y restaurantes están muy concurridos. Es el Soho de Bangkok.

Gran Palacio Real 

Es uno de los lugares más emblemáticos y visitados de la capital tailandesa. Realmente, es un gran conjunto arquitectónico formado por un grupo de edificios que sirvieron como sede real desde el siglo XVIII hasta mediados del siglo XX. En las páginas de Civitatis hemos podido leer que “la construcción del Palacio Real de Bangkok comenzó en el año 1792 durante el reinado de Rama I. Su nombre en tailandés es Phra Borom Maha Ratcha Wang”. El lugar más importante del palacio es el templo Wat Phra Kaew, en el cual se encuentra el Buda de Esmeralda que, tallado en jade en el siglo XV y con sólo 45 centímetros de altura, es el más valioso y venerado de Tailandia. Sin lugar a dudas, es un imperdible en una visita a la capital tailandesa y es impresionante el lujo de detalles que hay en todos sus edificios y el esmerado y delicado trabajo en todas sus construcciones. Te sorprenderá gratamente.

Mercado de Chatuchak

Hay muchísimos mercados en Bangkok, incluso muchos que no encontrarás en los mapas y que te toparás con ellos al visitar la ciudad. Hemos elegido este, que por cierto solamente abre los fines de semana, porque es uno de los más visitados y concurridos de esta urbe. En sus numerosos puestos podrás encontrar ropa típica y falsificaciones, souvenirs, productos de higiene naturales, complementos, bisutería, decoración… Es un lugar inmenso para pasearlo con tiempo e incluso tener cuidado de no perderte en sus imbricados pasillos repletos de puestos para la venta de los objetos más insólitos que puedas imaginar.

Museo Nacional

Es uno de los museos del grupo de Museos Nacionales de Tailandia. Cuenta con exposiciones de arte tailandés y de historia. El museo fue creado e inaugurado en 1874 por el rey Rama V para exhibir reliquias del imperio desde el gobierno del rey Rama IV. Hoy en día las galerías contienen exhibiciones que cubren la historia tailandesa desde los tiempos neolíticos. La colección incluye la inscripción del Rey Ram Khamhaeng, incluido en el Programa del Registro Mundial de 2003 en reconocimiento a su importancia mundial. 

Museo de Siam 

Otro lugar que no debemos dejar de lado en nuestra visita a la capital tailandesa, tanto por sus valiosos contenidos como por el bello diseño del lugar y que constituye un viaje a través de la historia de Tailandia bien explicado, muy didáctico y excelente presentación. En la Galería Prehistórica del Sudeste Asiático, puedes explorar y enriquecer tu conocimiento a través de exhibiciones diferentes y variadas, que tratan los problemas que hicieron de Tailandia lo que es hoy. Entre otras cosas, encontrará exhibiciones sobre temas importantes como el budismo que vino de la India, las influencias chinas en Tailandia, el antiguo reino de Ayutthaya, las guerras con la vecina Birmania y el establecimiento de la ciudad capital de Bangkok.

Mercado de Pahurat

Es otro de los muchos mercados que hay en Bangkok y que constituye un laberínticos lugar plagado de puestos de venta, pequeños restaurantes que ofrecen variada comida y todo tipo de insólitos objetos, a veces ordenados y otras veces presentados como si estuvieran en un bazar, repartidos por sus numerosos puntos de venta. Se encuentra muy cerca del barrio Chinatown y podemos ir andando hasta allí. Recomiendo especialmente comprar curry en este mercado porque lo encontrarás en todas sus variedades y tipos y de una calidad extraordinaria. Los olores y sabores son parte del espectáculo de este mercado.

Templo de Wat Pho

Es uno de los lugares imperdibles en una vista a esta ciudad  y se encuentra a apenas unos pasos del Palacio Real y de los lugares y monumentos más importantes de la ciudad.Es un recinto de casi 90.000 cuadrados y es realmente espectacular, tanto por sus edificios como esmeraldas esculturas y los cuidados detalles de todos los objetos decorativos que encontrarás dentro. En Wikipedia hemos ampliado nuestros conocimientos sobre este lugar:”Erigido en el siglo XVII mucho antes de que se estableciera la capital de Tailandia en Bangkok, el rey Rama I ordenó la ampliación del templo Wat Podharam en 1788, para lo cual hizo llevar estatuas y otros objetos recuperados de la antigua capital de Siam, Ayutthaya. La remodelación duró siete años y cinco meses, y en 1801 fue reinaugurado por el propio monarca bajo el nombre Wat Phra Chetuphon Vimolmangklavas”. 

Paseo en barco por el río Chao Phraya

Hay numerosas paradas donde se puede tomar estos barcos de transporte público. Te recomendamos utilizar este tipo de embarcaciones, que son muy baratas y hacen numerosas paradas, y no los costosos tours que te ofrecerán los caza turistas. Muy recomendable el paseo, con buenas vistas sobre el río Chao Phraya, y en el mismo te encontrarás con templos, edificios fastuosos y bellas plazas que podrás visitar si te bajas en sus respectivas paradas. 

Estación de trenes de Hui Lamphong

Es otro de los puntos que no debe faltar, creo, en una visita a esta urbe. Se encuentra cerca de algunos de los puntos más atractivos de la ciudad, como el barrio chino, el rìo Chao Prava y las áreas de Silom y Sukhumvit, y permite combinaciones con el metro de Bangkok y quince líneas de autobús urbano.Fue inaugurada en 1916, luego de cuatro años de construcción, diseñada en estilo neoclásico por los arquitectos iitalianos Mario Tamagnno y Annibale Rigotti, en consonancia con muchos edificios gubernamentales y monumentos públicos de la época.

Templo Wat Arun

Es otro de los grandes templos de la capital tailandesa, que como comprobarás si viajas hasta allí está repleta de los mismos y le da un aire muy colorista, alegre y variado a la arquitectura de esta ciudad. Está muy cerca del Palacio Real y el Templo de Wat Pho, por lo que te recomendamos hacer la visita el mismo día que vayas a esos lugares. La característica más llamativa de Wat Arun es su prang central (su torre en estilo jemer). Unos escalones bastante pronunciados llevan a las dos terrazas, siendo la altura de 77 metros. Las esquinas del templo están coronadas por otros cuatro prangs satélites más pequeños. Data del año 1784.

Barrio chino

No es un barrio chino tan extenso como otros que podrás encontrar en otras partes de Asia, como el inmenso de Singapur por ejemplo, y son un conjunto de calles que se pueden recorrer fácilmente andando provistos de un buen mapa. Fue fundado en 1891, por las comunidades chinas que vivían en la capital tailandesa, y está en torno a la larga calle Yaowarat Road, que mide 1,5 kilómetros, y en sus alrededores. Es un excelente lugar para almorzar, comprar productos chinos, como por ejemplo curry chino, y también para pasear sumergiéndote en una atmósfera cien por cien china. 

Templo del Buda Esmeralda

Hemos encontrado esta reseña sobre este lugar en Wikipedia que reproducimos literalmente por su brevedad y capacidad de síntesis:”Es el templo budista más importante de Tailandia, localizado en el centro histórico de Bangkok (distrito Phra Nakhon), dentro de los terrenos del Gran Palacio de Bangkok. La construcción del templo comenzó cuando el rey Buddha Yodfa Chulaloke (Rama I) trasladó la capital desde Thonburi a Bangkok en 1785. Al contrario que otros templos, no contiene ningún lugar para que los monjes lo habiten, sino que solo tiene edificios sagrados, estatuas y pagodas con una rica decoración”. 

Parque Lumphini

Es considerado el gran pulmón de Bangkok y merece la pena visitarlo porque es una suerte de jardín botánico de la ciudad, lo que de da un aire selvático, abrupto a veces y una sensación de placidez que no encontrarás en otro lugar de esta urbe fascinante pero también con un tráfico endemoniado. El parque Lumpini tiene 100 años de historia. Fue ordenado construir por el rey Rama VI, de hecho hay una gran estatua de este rey en la entrada suroeste del parque. Como podrás comprobar si lo visitas, Lumpini Park es el epicentro en el que los habitantes de la ciudad se escapan para respirar el aire limpio, simplemente desconectar contemplando sus pequeños lagos, hacer deporte y dar un tranquilo paseo. Por cierto, hay un lagartos gigantes que a veces asustan y son muy llamativos. 

Vieja plaza de Siam

A pesar de su nombre, es realmente un gran mercado y centro comercial donde podrás encontrar los más variados negocios, tiendas, restaurantes y puestos de comidas. Es muy transitado y conocido en la capital tailandesa. El edificio se caracteriza por una mezcla de arquitectura colonial y chino-portuguesa, que fue popular durante el reinado del rey Rama V, que gobernó desde finales del siglo XIX a principios del siglo XX).

Monumento a la Democracia

Es un monumento realmente paradójico si se tiene en cuenta que Tailandia es uno de los países del sudeste asiático con más tradición golpista del continente y donde los militares han intervenido en la vida política en numerosas ocasiones, incluso violando los derechos humanos y encarcelando a sus oponentes. Aparte de este asunto no trivial, lo curioso es que el monumento fue encargado en 1939 para conmemorar el golpe de Estado siamés de 1932 (también llamado "Revolución siamesa de 1932", o simplemente “Revolución de 1932”), que dio lugar al establecimiento de una monarquía constitucional. ¡Un monumento a la democracia para celebrar una dictadura!

Exótica calle de Khao San Road

Ya hemos hablado de esta calle al principio de esta nota y es una suerte de lo que es Malasaña a Madrid, es decir, un lugar típico de la marcha tailandesa y una calle repleta de bares, restaurantes, puestos de comida de grillos y alacranes, también de gusanos por cierto, discotecas y, aunque parezca sorprendente por el ruido que hay en la misma a todas horas, hay algunos hoteles. Ineludible no pasar una noche en ese lugar tomando unas cervezas o lo que se precie.

Silom

Es la zona, por antonomasia, de los hoteles de lujo, los grandes bancos y las empresas más importantes de Tailandia. Silom es la Wall Street de Bangkok, con sus flamantes rascacielos que tienen los nombres de las instituciones financieras más famosas. Pero eso es por el día, cuando se hacen los grandes negocios, pero después del atardecer, sin embargo, el barrio cambia de ambiente y cerca de Silom Road, la carretera Surawong.

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