El Gobierno de Gibraltar ha condenado el incidente que tuvo lugar el lunes por la noche en el que el Servicio de Vigilancia Aduanera de España (SVA) intentó tomar medidas ejecutivas en aguas gibraltareñas.
El incidente en cuestión comenzó alrededor de las 22:30 horas, cuando «un buque estatal español del SVA medidas ejecutivas en las aguas territoriales británicas de Gibraltar (BGTW)».
Según las autoridades del Peñón, «el Ultimate Predator, un barco con bandera del Reino Unido, fue perseguido en BGTW por el barco SVA, Águila II Finalmente fue abordado por la tripulación del buque SVA y uno de los miembros de la tripulación fue retenido físicamente por un oficial de SVA».
Estas fuentes relatan que el «HM Customs estuvo en la escena al mismo tiempo que el SVA y también abordó al buque Ultimate Predator al mismo tiempo que el SVA. Después de una discusión entre los oficiales de Aduanas de HM y los oficiales de SVA, los oficiales de SVA se retiraron del buque. El Águila II luego salió de BGTW aproximadamente a las 23:00 horas. No hubo informes de heridos o disparos de balas de goma durante el incidente»
Cabreo monumental
Pero el tono del comunicado emitido refleja el tremendo enfado del Gobierno de Gibraltar, que planteó de inmediato el asunto al Reino Unido y éste confirmó que realizará una protesta formal a Madrid, «dada la gravedad de los problemas que ha planteado una acción tan ilegal. El incidente, una vez más, involucra a un buque del Servicio de Vigilancia Aduanera español, en este caso el Águila II. Una vez más, los oficiales de la SVA española han intentado emprender acciones ejecutivas en aguas británicas fuera de su jurisdicción reconocida internacionalmente. El incidente involucró una persecución de un barco registrado en Gibraltar, el Ultimate Predator, dentro de BGTW por parte de la SVA».
El Ultimate Predator es un buque auxiliar de puerto. Desde el Gobierno dicen que HM Customs lo había identificado en el radar «viajando sin luces de navegación y sin su Sistema de Identificación Automática (AIS) que marcaba su ubicación» Esto dio lugar a sospechas por parte de la Aduana de Gibraltar, que procedió a identificar la embarcación. El Ultimate Predator había estado realizando una transferencia legítima de tripulación a un barco mercante en BGTW y que sus luces de navegación y AIS habían fallado».
El Ministro Principal de Gibraltar, Fabian Picardo ha manifestado que “incidentes como este son un reflejo inaceptable de que las fuerzas del orden españolas no reconocen que los límites territoriales de su jurisdicción no se extienden a las aguas incuestionablemente británicas de Gibraltar. La desafortunada falla de las luces de navegación y el AIS de una embarcación puede, con razón, generar sospechas por parte de las fuerzas del orden que patrullan BGTW. HM Customs se estaba ocupando del asunto. Sin embargo, la participación de una agencia de aplicación de la ley extranjera, sin ninguna comunicación o coordinación con las fuerzas del orden de Gibraltar, es ilegal e inaceptable. Los oficiales españoles en cuestión han cometido potencialmente delitos contra la ley de Gibraltar y pido que el asunto se plantee enérgicamente a España».
Picardo ha señalado que “queremos un futuro de mayor cooperación y coordinación, especialmente en la lucha contra el crimen. Pero eso no puede ocurrir ni ser propiciado por acciones ilegales como las que se han informado de la noche a la mañana por parte de la SVA. Estaban fuera de su jurisdicción y estaban actuando ilegalmente al restringir a una persona en Gibraltar sin autorización legal para hacerlo. Eso es peor que inaceptable».
España no hace nada para promover las relaciones transfronterizas
Finalmente, ha dicho sentirse complacido con que el Reino Unido «deje clara su posición a España sobre este incidente» y ha atacado al Gobierno de España al afirmar que «no hace nada para promover las relaciones transfronterizas que hemos trabajado tan duro para construir. De hecho, hace lo contrario y tiende a dañar la cooperación entre colegas encargados de hacer cumplir la ley, además de crear sospechas aún más profundas en la población en general sobre la actitud de algunos sectores de las fuerzas y cuerpos de seguridad españoles hacia Gibraltar».
