El expresidente del Gobierno español, José María Aznar, manifestó este jueves su rechazo a la solución de dos Estados para el conflicto entre Israel y Palestina, calificándola de "absurda" por considerar que el Estado palestino "no existe". Durante una jornada organizada por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales
(FAES), la cual dirige, Aznar expresó sus dudas sobre a qué se refieren aquellos que promueven la creación de un Estado palestino, subrayando la inexistencia de este. En su intervención, insistió en que reconocer algo que no existe es un absurdo y señaló la importancia de abordar primero cuestiones como los rehenes israelíes secuestrados por Hamás, la seguridad y la convivencia antes de cualquier reconocimiento.
Aznar apoyando el genocidio en Gaza
Aznar contrastó su postura actual con la votación del Partido Popular (PP) en 2014, a favor de reconocer al Estado palestino, mostrando una evolución hacia una posición más firme contra esta idea. También criticó al gobierno de Pedro Sánchez por comprometerse a reconocer a Palestina antes del verano, a pesar de la anterior postura más matizada del PP y de su propio gobierno cuando, en el año 2000, anunció que España reconocería al Estado palestino "cuando se proclame".
El expresidente también abordó la situación actual en Gaza, expresando sus condolencias por las víctimas de los bombardeos israelíes, incluidos los trabajadores de la ONG World Central Kitchen (WCK). Destacó la alarmante cifra de bajas entre los trabajadores humanitarios en el conflicto de Gaza, comparándola con otros conflictos bélicos. Aznar enfatizó la necesidad de que el gobierno israelí investigue estos trágicos sucesos y resaltó la complejidad del conflicto originado por el ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre, criticando la falta de una posición común internacional y la utilización de instalaciones civiles por parte de Hamás para fines terroristas.
Aznar quiere más destrucción y matanza
Sobre la política internacional, Aznar condenó la "falta de capacidad de disuasión" de Estados Unidos bajo la administración de Joe Biden, sugiriendo que esta percepción fomenta la audacia entre los adversarios de América. Criticó especialmente el enfoque de Biden hacia los conflictos globales y la influencia de Irán en Oriente Medio, señalando la necesidad de adaptar las estrategias frente a las tácticas de presión y desgaste empleadas por el régimen iraní.
Aznar concluyó su intervención advirtiendo sobre el riesgo de que Israel pierda políticamente, lo que podría desencadenar un estallido en Oriente Medio con consecuencias impredecibles. Enfatizó que cualquier solución futura debe asegurar condiciones para la seguridad y un marco para la convivencia, criticando la idea de comenzar con el reconocimiento de un Estado palestino como un enfoque equivocado. Apoyó la continuación del genocidio israelí y reclamó la conclusión de la operación militar de Israel en Gaza por el bien de todas las partes involucradas, resaltando la complejidad de establecer un marco de convivencia en la región. Dándole igual si son 32.000 o 50.000 los muertos en Palestina, la mayoría niños.