Israel es el alumno aventajado de la Alemania nazi. Están utilizando los mismos métodos y sistemas que el Tercer Reich, tanto en lo referente a las políticas de exterminio contra el pueblo judío, como en las agresiones contra países vecinos. Otra semejanza es la aquiescencia de la comunidad internacional que en aquella década los años 30 del siglo XX miraron hacia otro lado e, incluso, firmaron acuerdos con Hitler.
Ahora, Israel está aplicando la misma estrategia porque se sabe impune por la protección de las grandes potencias occidentales, una protección que está empoderando al Estado hebreo. Así lo ha denunciado el primer ministro de la República de Irak, Mohamad Shia al Sudani, quien ha criticado duramente la inacción y la vergonzosa parálisis de la comunidad internacional frente a los crímenes que Israel está perpetrando en Gaza. Esa inacción «empodera a los criminales para que expandan el conflicto».
Al Sudani lamentó ante la Asamblea General de Naciones Unidas que «el pueblo palestino ha visto negado su derecho a vivir con dignidad en un Estado, como todos los demás pueblos, con una parálisis mundial, vergonzosa que empodera a los criminales para que expandan el conflicto y ataquen a otros, apoyándolos y garantizando reiteradamente su impunidad. Poner fin a las violaciones que están teniendo lugar en Palestina y la región es responsabilidad de todos, pero sobre todo del Consejo de Seguridad, que no ha logrado su principal objetivo: mantener la paz y la seguridad internacionales. En la Palestina ocupada, somos testigos de cómo se ataca a las personas por parte de una fuerza militar ocupante, desplazando a millones y matando a miles. Ni la comunidad internacional ni sus miembros han asumido la responsabilidad de proteger a estas personas, según exige el Derecho Internacional».
Además, el primer ministro iraquí ha advertido de las verdaderas intenciones de Israel. «El mundo se ve empujado a una conflagración y a conflictos a gran escala, mientras que el Consejo de Seguridad está impotente y no tiene un papel ahí que desempeñar. A falta de esta responsabilidad, quizá se recurra a mecanismos alternativos. Estamos siendo testigos de una campaña brutal de matanzas indiscriminadas y uso de tecnología para bombardeos a distancia, sin tener en cuenta que hay civiles desarmados, sentando un precedente peligroso. Las medidas recientes del ocupante tratan de desestabilizar la región desencadenando una guerra regional a gran escala».