La brecha salarial de género en España ha experimentado su primer aumento desde 2017, alcanzando un marcado 20% de diferencia. Este dato surge del informe anual sobre la brecha salarial presentado por la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) en el contexto del Día por la Igualdad Salarial, celebrado cada 22 de febrero.
Este incremento implica que, bajo las actuales condiciones, las mujeres efectivamente trabajan sin remuneración durante 73 días al año. Si persiste este ritmo, se estima que se necesitarán aproximadamente cincuenta años para lograr una igualdad salarial plena entre hombres y mujeres.
La diferencia específica señalada por el informe indica que la brecha salarial se sitúa en un 19,89%, lo que representa un leve aumento del 0,02% respecto al año anterior. Este cálculo se basa en los ingresos medios anuales, que para los hombres fueron de 25.137 euros, en comparación con los 20.138 euros percibidos por las mujeres, de acuerdo a los datos más recientes proporcionados por la Agencia Tributaria para el año 2022.
El informe destaca cómo la pandemia de COVID-19 ha exacerbado las desigualdades laborales existentes entre géneros, evidenciando un aumento en la precariedad laboral de las mujeres. Esto se refleja en un incremento significativo de contratos temporales, trabajos a tiempo parcial, y un mayor compromiso en el cuidado de dependientes, profundizando la brecha salarial.
A nivel de contratación temporal, la disparidad ha crecido exponencialmente desde la pandemia. Datos de la Encuesta de Población Activa revelan que, mientras que a finales de 2019 las mujeres superaban a los hombres en este tipo de contratos por 27.700, para finales de 2023 la cifra se disparó a 337.400 más mujeres que hombres en situaciones laborales temporales.
La situación del desempleo también refleja una desigualdad de género, con 1,6 millones de mujeres desempleadas frente a 1,1 millones de hombres, según las estadísticas más recientes del Ministerio de Trabajo y los Servicios Públicos de Empleo Estatal.
El análisis del sector público muestra una brecha salarial del 8% entre hombres y mujeres, con estos últimos ganando menos en promedio. Además, el informe denuncia el incumplimiento gubernamental de la ley sobre igualdad retributiva, instando a una acción decidida para cerrar esta brecha.
La CSIF propone medidas concretas para abordar esta disparidad, incluyendo la realización de análisis y evaluaciones anuales sobre la brecha de género, la implementación de políticas de conciliación laboral sin pérdida salarial, y la promoción de la igualdad y corresponsabilidad a través de la educación y la sensibilización.
Estos datos subrayan la necesidad urgente de políticas efectivas que aseguren la igualdad salarial y laboral entre géneros en España, un desafío que requiere la colaboración de todos los sectores de la sociedad para ser superado.
Que se le esté dando casi tanto bombo a este informe como a lo malo que es Putin lo dice todo. Un corta pega de 27 páginas que en el punto tercero concluye que hay un 90% más de mujeres que de hombres inactivos por labores del hogar (que miren en la agricultura, minería, ganadería…). El informe jamás analiza el salario por hora trabajada, si no el salario bruto (aunque luego reconoce que quien más se acoge a la voluntaria reducción de jornada son ellas) y descontextualiza muchas cifras, por ejemplo: dice que hay más contratos temporales a mujeres en el sector público, pero no aclara cuál es el porcentaje de hombres/mujeres trabajadores en ese sector. Yo sospecho que hay muchas más mujeres funcionarias. Por último, el informe ni menciona accidentes, muertes ni reparto de actividades peligrosas.
Está cocinado para justificar y perpetuar políticas de discriminación sexual por parte de los diferentes ministerios.