Durante el acto conmemorativo del 70 aniversario de la Convención de 1951 sobre el Estado de los Refugiados, en el que también ha participado el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Filippo Grandi, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha puesto en valor la “solidaridad” de España en el marco de la crisis del coronavirus y ha anunciado la reserva de dos millones de dosis “destinadas a contextos humanitarios”, es decir, a personas “al margen de cualquier red asistencial” sanitaria.
Sánchez ha recordado que España se encuentra entre los diez primeros países del mudo que más vacunas contra el coronavirus han donado, especialmente a América Latina.
“Debemos continuar por ese camino”, ha dicho el Sánchez, y ha añadido que España seguirá trabajando con Acnur “para que estas vacunas lleguen a donde más se necesita”.
Sánchez ha asegurado que España estará “en la primera línea de refuerzo de vacunas”, y ha recordado que el país ha distribuido ya más de 24 millones de dosis “solidarias”. El objetivo es que la cifra alcance los 50 millones para el primer trimestre de 2022.