Horas antes de comparecer ante el Tribunal Supremo, Koldo García, el hombre que da nombre al polémico caso Koldo, ha decidido hablar públicamente tras meses de silencio. En una entrevista exclusiva en La Hora de La 1 de TVE, el exasesor del exministro José Luis Ábalos ha negado rotundamente las acusaciones que relacionan a su antiguo jefe con la trama de comisiones en la venta de mascarillas durante la pandemia. "Todo lo que se ha dicho de Ábalos es mentira. Se ha publicado mucho, pero se ha demostrado muy poco", ha afirmado.
La intervención de Koldo llega en un momento clave del caso, justo después de la declaración de Víctor de Aldama ante el Supremo, donde el empresario afirmó haber pagado millones en comisiones y ofreció supuestas pruebas en forma de mensajes y notas manuscritas. Sin embargo, Koldo García se ha mostrado tajante: "No se puede dar credibilidad a alguien que solo ha aportado papeles y pantallazos".
Un relato en defensa de Ábalos
Durante la entrevista, Koldo ha defendido con firmeza a José Luis Ábalos, describiéndolo como "una gran persona y un gran político". Según el exasesor navarro, las acusaciones que lo vinculan con la trama carecen de fundamento. "Durante meses se ha hablado de todo, pero las pruebas siguen sin aparecer", ha criticado, apuntando directamente a los medios de comunicación por haber alimentado lo que considera una campaña mediática.
La investigación de la UCO señala a Koldo como intermediario clave en las negociaciones de compra de mascarillas durante la pandemia, presuntamente bajo instrucciones directas de Ábalos. No obstante, Koldo ha asegurado que su papel ha sido malinterpretado y ha insistido en que "la verdad saldrá a la luz".
"¿Dónde están las pruebas reales? Todo lo que ha dicho Aldama no deja de ser su versión, y hay que recordar que esto tiene que ser demostrado ante el juez, no en los titulares", ha insistido Koldo, visiblemente molesto con la situación mediática que le rodea desde febrero.
La foto de Pedro Sánchez y Aldama
Uno de los puntos más controvertidos del caso ha sido la famosa foto de Pedro Sánchez junto a Víctor de Aldama, que ha sido utilizada como prueba de una supuesta relación entre el presidente del Gobierno y el presunto conseguidor. Sobre esta imagen, Koldo ha querido zanjar la polémica: "Es una simple secuencia de tres fotos. El presidente no sabía quién era Aldama, y estoy seguro de eso".
El exasesor ha recalcado que cualquier figura pública puede acabar haciéndose una fotografía con desconocidos en actos institucionales. "Se ha querido sacar de contexto algo completamente normal. Es otra cortina de humo", ha añadido.
La versión de Aldama en el Supremo
Las declaraciones de Koldo se producen un día después de que Víctor de Aldama compareciera ante el juez. Durante su testimonio, el empresario reiteró que había pagado más de 3,5 millones de euros en comisiones a cambio de contratos públicos durante la pandemia. Según Aldama, parte de esos fondos habrían sido entregados a Koldo y a Ábalos. Además, aseguró que facilitó pisos con "señoritas" tanto para el exministro como para el actual titular de Política Territorial, Ángel Víctor Torres.
Koldo García ha cuestionado estas acusaciones, sugiriendo que Aldama está intentando salvar su propia situación legal. "Él puede decir lo que quiera, pero tendrá que demostrarlo. Las pruebas son lo que importa, no las versiones interesadas", ha insistido.
Expectación en el Supremo
El caso ha ganado relevancia no solo por las implicaciones políticas, sino también por el impacto mediático que ha generado. Aunque ni Koldo ni Aldama están aforados, el juez del Supremo decidió asumir la competencia del caso por su vinculación con el exministro Ábalos, cuya figura ha sido constantemente señalada desde que estalló la investigación.
Horas antes de enfrentarse a su declaración, Koldo García se ha mostrado confiado y "con ganas de aclarar las cosas". "El juez tendrá la oportunidad de escuchar mi verdad, y ahí es donde se debe resolver todo, no en los platós ni en los periódicos", ha sentenciado.
La comparecencia de Koldo en el Supremo llega en un clima de máxima tensión, con acusaciones cruzadas y declaraciones que prometen seguir marcando la agenda política y judicial. Mientras tanto, el exasesor se mantiene firme en su defensa de Ábalos y en su crítica hacia el tratamiento que, a su juicio, ha recibido el caso. "Se ha hablado mucho y demostrado poco. Es hora de que salga la verdad".