El PP apoyará las ayudas por la DANA, pero acusa a Sánchez de chantaje Presupuestario

Cuca Gamarra y Mazón propagan el bulo de que las ayudas están condicionadas a los Presupuestos, pese a su aprobación por Decreto

06 de Noviembre de 2024
Actualizado a la 13:51h
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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este martes durante su comparecencia en La Moncloa, en Madrid
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este martes durante su comparecencia en La Moncloa, en Madrid

El Partido Popular ha sorprendido nuevamente con su reacción ante el paquete de ayudas de 10.600 millones de euros que el Gobierno ha destinado para los damnificados por la DANA en Valencia. Aunque el PP ha decidido respaldar el real decreto aprobado por el Ejecutivo, sus líderes no han dejado pasar la ocasión para criticar la medida, afirmando que es "insuficiente" y alegando, sin pruebas, que las ayudas están supeditadas a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado.

La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, fue la encargada de exponer esta postura en rueda de prensa, donde calificó de “chantaje” la postura del presidente Pedro Sánchez, insinuando que este condiciona las ayudas a la aprobación de los nuevos presupuestos. Gamarra subrayó que el apoyo del PP a estas ayudas se limita a las medidas de emergencia para reparar los daños causados, y criticó que el Gobierno se enfoque en “la comodidad de sus intereses”.

Real Decreto de Ayudas Urgentes

El Consejo de Ministros aprobó el martes un Real Decreto-ley con 10.600 millones de euros en ayudas directas para los afectados por la DANA, asegurando que estas serían inmediatas y no dependientes de la tramitación presupuestaria. La normativa establece que estas ayudas deben ser convalidadas por el Congreso en un plazo máximo de 30 días, siguiendo el procedimiento habitual en este tipo de emergencias.

Pedro Sánchez explicó los detalles del decreto desde el Palacio de la Moncloa, destacando que las ayudas incluyen hasta 60.000 euros por vivienda afectada, 30.000 para negocios y 72.000 para personas que sufran incapacidades a raíz del temporal. Sin embargo, apenas unas horas después, el PP emitió un comunicado acusando al presidente de usar esta emergencia para obtener rédito político y para "chantajear a los valencianos con los presupuestos".

El PP Insiste en el Bulo

El comunicado del PP, emitido desde Génova, acusó a Sánchez de condicionar las ayudas a la aprobación de las cuentas públicas, algo que en ningún momento se mencionó durante la comparecencia del presidente. Esta narrativa fue respaldada por el propio presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, quien también sugirió en sus redes sociales que las ayudas no deberían estar “vinculadas a presupuestos”. Este respaldo al bulo, que se replicó en distintos medios y redes sociales, fue rápidamente amplificado por figuras como Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, quien exigió un “decreto urgente” cinco horas después de que este ya hubiera sido aprobado.

En el Senado, la portavoz popular, Alicia García, aportó más leña al fuego al recordar una frase falsa atribuida a Sánchez: “si necesitan ayudas, que las pidan”. Esta declaración, desmentida anteriormente, se convirtió en la base para una nueva crítica hacia el presidente. García acusó al Ejecutivo de convertir una emergencia en “su salvavidas personal” para presionar por los presupuestos.

La Realidad de las Ayudas

A diferencia de lo que afirman los líderes del PP, el decreto aprobado por el Consejo de Ministros no vincula las ayudas de emergencia a los Presupuestos Generales. La Constitución establece que este tipo de decretos pueden ser convalidados directamente por el Congreso y entrar en vigor de inmediato, sin esperar un proceso presupuestario.

Durante su intervención, Sánchez destacó la magnitud de los fondos requeridos para enfrentar esta catástrofe, señalando que, además de los 10.600 millones aprobados en el primer decreto, el Gobierno buscará más recursos comunitarios y fondos adicionales para abordar las necesidades de las comunidades afectadas. En respuesta a una pregunta de la prensa sobre los presupuestos, Sánchez reconoció que contar con nuevas cuentas públicas facilitaría la gestión financiera en un contexto de catástrofes como esta, pero en ningún momento condicionó las ayudas ya aprobadas a la futura aprobación de los presupuestos.

“Si había alguna razón para aprobar los presupuestos antes de esta DANA, ahora esa necesidad es colosal”, declaró Sánchez, subrayando que las ayudas a Valencia y otras regiones afectadas no pueden esperar.

El PP y su Desacuerdo Interno

La posición del Partido Popular revela no solo una estrategia de ataque contra el Gobierno, sino también tensiones internas. Por un lado, el PP en Valencia, bajo el liderazgo de Mazón, necesita mostrar una postura de apoyo a los afectados por la DANA. Sin embargo, esta misma semana, Génova presionaba para que el Gobierno decretara el estado de alarma en la región, una medida que apartaría de sus funciones al propio Mazón y daría control de la situación al Ejecutivo central.

Este tipo de contradicciones se ha hecho evidente en la forma en que el PP exige medidas que el Gobierno ya ha tomado, como el propio paquete de ayudas de emergencia. Con el comunicado oficial del PP, en el que apoyan el real decreto al tiempo que lo critican y difunden la idea de un supuesto chantaje presupuestario, queda clara la tensión entre la estrategia nacional del partido y los intereses de sus líderes regionales.

La Estrategia de Feijóo

Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, ha manifestado en varias ocasiones que su partido apoya medidas para atender las necesidades de las personas afectadas por la DANA, pero su equipo ha aprovechado cualquier resquicio para cuestionar la actuación del Gobierno. Esta estrategia le permite mantener una posición ambigua: apoyar en público, mientras critica y socava en privado.

La narrativa del chantaje presupuestario es solo uno de los ejemplos de cómo el PP intenta moldear la percepción pública, aún cuando sus propios dirigentes saben que la ayuda llegará sin importar los presupuestos. No obstante, con su postura, el PP consigue situarse como crítico sin abandonar su apoyo a las ayudas, tratando de obtener réditos políticos de una situación de emergencia.

Con esta postura, el PP se enfrenta a la difícil tarea de criticar sin perder el favor del público. Al difundir el bulo de la vinculación de las ayudas a los presupuestos, el partido busca erosionar la confianza en el Ejecutivo, pero se arriesga a ser visto como un obstáculo para los valencianos afectados. La respuesta del Gobierno, directa y sin ambigüedades, recalca que las ayudas aprobadas llegarán sin dilaciones, dejando al PP en una posición incómoda, atrapado entre su apoyo declarado y sus estrategias de desgaste político.

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