La secretaria general de UGT Madrid, Susana Huertas Moya, y la portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Madrid, Reyes Maroto, han mantenido una reunión para analizar la situación social, económica y laboral de la ciudad. Ambas han coincidido en que la crisis de la vivienda, la precariedad laboral y la creciente hostilidad hacia la población migrante son problemas estructurales que exigen una respuesta política contundente.
"La vivienda es el principal problema de la clase trabajadora"
Huertas Moya ha subrayado que el acceso a la vivienda se ha convertido en "el caballo de batalla" para la clase trabajadora madrileña. "Cada vez es más difícil encontrar una vivienda digna y asequible en esta ciudad, y las políticas municipales no están ayudando a revertir esta situación", ha afirmado. En este sentido, ha advertido de que la especulación inmobiliaria está expulsando a los jóvenes y a los trabajadores con salarios más bajos hacia la periferia o incluso fuera de la Comunidad de Madrid.
La responsable sindical también ha señalado la preocupación por la situación de la juventud, especialmente en materia de empleo y acceso a una vivienda digna. "Los jóvenes madrileños no solo tienen dificultades para encontrar un trabajo estable, sino que, cuando lo consiguen, sus salarios no les permiten emanciparse", ha denunciado.
Otro de los puntos clave de la reunión ha sido la situación de la población migrante en Madrid. "Madrid siempre ha sido una ciudad acogedora, pero cada vez más inmigrantes sienten que no son bien recibidos y se plantean abandonar la capital", ha advertido Huertas Moya. Según la secretaria general de UGT Madrid, esta situación responde a un cambio en el discurso político y a la falta de medidas que favorezcan la inclusión social y laboral de las personas migrantes.
"El Ayuntamiento está beneficiando a los fondos de inversión"
Por su parte, Reyes Maroto ha lamentado que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, insista en que "Madrid vive su mejor momento" mientras la realidad demuestra lo contrario. "Este no es el mejor momento para los jóvenes que no pueden pagar un alquiler, para las personas migrantes que se sienten señaladas o para los trabajadores que siguen sin ver mejoras en sus condiciones laborales", ha criticado la portavoz socialista.
Maroto ha denunciado que la política de vivienda del Ayuntamiento responde "a los intereses de los fondos de inversión y de la especulación, en lugar de a las necesidades de la ciudadanía". Ha puesto como ejemplo el desarrollo urbanístico de la Quinta de Santo, donde los vecinos llevan tiempo exigiendo la construcción de equipamientos públicos, en lugar de nuevos proyectos especulativos.
La portavoz socialista también ha criticado el "señalamiento" de la población migrante por parte de la ultraderecha, recordando que "más de 290.000 personas inmigrantes trabajan en Madrid, contribuyen a la economía local, pagan impuestos y son parte esencial de la ciudad".
Una alianza para la acción política y sindical
Ambas dirigentes han coincidido en la importancia de una alianza entre los sindicatos y el Partido Socialista para promover medidas que mejoren la calidad de vida de los madrileños. Entre las prioridades destacadas están garantizar el acceso a la vivienda digna, reforzar el apoyo a la población migrante y mejorar la oferta de formación y empleo juvenil.
"La ciudad necesita un cambio de rumbo y estamos aquí para impulsar medidas que beneficien a la mayoría social, no a unos pocos", ha concluido Maroto. Por su parte, Huertas Moya ha subrayado que "no podemos mirar hacia otro lado mientras miles de madrileños enfrentan dificultades para vivir en su propia ciudad".
Con esta reunión, UGT Madrid y el Grupo Municipal Socialista refuerzan su compromiso de trabajar conjuntamente para que el Ayuntamiento de Madrid tome medidas urgentes en materia de vivienda, empleo y derechos sociales.