Julián Arroyo Pomeda

A la caza del periodista

29 de Mayo de 2025
Guardar
PRensa Periodistas AGP UGT
Foto: NIK / Unsplash

Es una pieza nueva, se llama periodista. Le acosan en la entrada del Congreso de los Diputados, donde se presenta con la correspondiente acreditación para informar de las políticas cotidianas y poder así hacer su trabajo. Para ello necesita información, que pasa a periódicos en los que trabaja.

Ahora resulta que tienen que jugarse el físico, ya que algunos activistas les impiden la entrada y no pueden estar al día. ¿Con derecho lo hacen estos matones? Solo con el suyo, así lo han decidido. Tratan de atemorizar a los periodistas para que no informen. Están poniendo en peligro su trabajo ¿Hasta cuándo tendrán que aguantarlo? 

El Gobierno trata de establecer un marco para que todos puedan cumplir las reglas del juego. Porque hasta ahora consiguen la acreditación para entrar los que llaman pseudoperiodistas. No siendo periodistas, se presentan como tales solo para organizar el caos. Revientan las Ruedas de prensa de los que no piensan como ellos, preguntando una y vez, y acaparan de este modo los tiempos de manera provocativa para conseguir el enfrentamiento del orador, proclamando así que no le respetan. 

Han tenido que suspender más de una Rueda de prensa, porque los agitadores lo impiden, no con educación, sino violentamente. En este caso, el Parlamento tendría que cortar estos desmanes, y el único modo de hacerlo es suspender las acreditaciones a quienes no respeten las normas establecidas, teniéndolos a raya. No hay otra solución. 

Además, la policía, que ya los conoce, porque se hacen notar, tendría la obligación de detenerlos y presentarlos ante el juez. Estos comportamientos no se pueden consentir y menos en órganos representativos de la democracia, antes de que sea tarde y tengamos que pagar las consecuencias. No se pueden tolerar tales espectáculos groseros y violentos. Así no podemos seguir.

Queda por establecer algunas ideas importantes, en mi opinión, que podrán aclarar las cosas.

Cualquier forma de violencia o presión contra periodistas es profundamente preocupante, especialmente cuando se les impide cumplir con su función informativa en instituciones democráticas como el Congreso. La libertad de prensa es un pilar fundamental de la democracia, y garantizar que los periodistas puedan trabajar sin intimidación es esencial parauna sociedad bien informada.

Cuando ocurren agresiones físicas o intentos de impedir el acceso a la información, no solo se está atacando a los periodistas, sino al derecho de la ciudadanía a estar informada. Puede tener repercusiones legales o políticas dependiendo de las circunstancias.

La historia de la libertad de prensa en España ha pasado por diversas etapas, desde la censura estricta hasta la consolidación de un periodismo más independiente.

En el siglo XX, la prensa sufrió restricciones durante la dictadura franquista, con una censura severa que limitaba la libertad de expresión. No fue hasta la transición democrática y la Constitución de 1978 cuando se garantizó plenamente la libertad de prensa, permitiendo el desarrollo de medios independientes.

Hoy en día, España cuenta con una prensa diversa y plural, aunque sigue enfrentando desafíos como la concentración de medios en grandes grupos empresariales.

La libertad de prensa en España ha mejorado en algunos aspectos, pero sigue enfrentando retos importantes. El país ha escalado posiciones en el ranking mundial, pero la polarización y la desconfianza en los medios han aumentado. La presión política sobre el periodismo también es un problema creciente, afectando la independencia y calidad de la información.

Por otro lado, la transformación digital y el auge de las redes sociales han cambiado el panorama mediático, generando nuevos riesgos como la desinformación y la difusión de noticias falsas, que afectan la confianza del público en los medios.

El enfrentamiento entre Bertrand Ndongo y Antonio Maestre ocurrió el 21 de mayo de 2025 cerca del Congreso de los Diputados en Madrid. Ndongo, colaborador de medios como 'EDA TV' y 'Periodista Digital TV', persiguió a Maestre por la calle. La situación escaló hasta un intercambio de empujones y provocaciones verbales, lo que llevó a la intervención de la Policía Nacional para separarlos.

Este tipo de enfrentamientos entre figuras mediáticas con posturas ideológicas opuestas ha sido cada vez más frecuente en el panorama político español. A Maestre le atacaba así Ndongo: "No tienes fuerza. Ten cojones de lanzarme a mí el micro. Solo tienes cojones de lanzárselo a un chaval de 24 años", en referencia a Vito Quiles, con quien Maestre también tuvo un encontronazo hace unas semanas.

El enfrentamiento entre Bertrand Ndongo y Antonio Maestre ha generado un fuerte debate sobre el acoso a periodistas y la polarización política en España. Este incidente ha llevado a una mayor atención sobre el papel de ciertos comunicadores en el Congreso y ha provocado reacciones tanto en el ámbito mediático como en el político.

Por un lado, algunos periodistas han denunciado un aumento del acoso por parte de figuras vinculadas a la extrema derecha, lo que ha llevado a protestas y llamados a regular el acceso de ciertos comunicadores al Congreso. En respuesta, sectores conservadores han defendido la presencia de Ndongo y otros activistas, argumentando que se está intentando censurar voces críticas.

Además, el incidente ha tenido repercusiones en el Congreso, donde un grupo de periodistas decidió boicotear las ruedas de prensa en protesta por lo que consideran un ambiente hostil para el ejercicio de su labor. Esto ha reavivado el debate sobre la libertad de prensa y el respeto a los profesionales de la información.

También Sarah Santaolalla ha sido víctima de insultos y comentarios machistas por parte de Bertrand Ndongo en redes sociales. Ndongo publicó mensajes despectivos sobre la periodista, incluyendo referencias sexistas y ataques personales. Por ejemplo este: "Si la tetona y su novio quieren un trío conmigo, solo tienen que pedirlo”. O este otro: "Ni tu botox ni tu silicona. Eres demasiado tonta para mi gusto. No te toco ni con el chorro del pis". Santaolalla respondió públicamente, rechazando los comentarios y denunciando el acoso que ha sufrido.

Este incidente ha generado un debate sobre el acoso a mujeres en el ámbito mediático y la impunidad de ciertos comportamientos en redes sociales. Santaolalla ha expresado su preocupación por la normalización de este tipo de ataques y ha pedido que no se permita que el acoso quede sin consecuencias.

Lo + leído