27 de Mayo de 2024
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Union Europea

La Rival es un lugar especial. Además de bellos paisajes, ríos de aguas cristalinas con peces multicolores, hay grandes extensiones planas de una tierra negra muy fértil. La mayor parte de los habitantes rivalinos se dedican a labrar los campos. Cada uno en la proporción que puede. Hay una mina de cristal de cuarzo de la que sacan pequeñas figuras hexagonales que sirven como método de intercambio de productos.

La mina no es propiedad de nadie y es de todos, pero sólo el Concejo del pueblo, compuesto por cinco mujeres y/o hombres, todos honorables y honrados, pueden ordenar la obtención de los cuarzos hexagonales que sirven de moneda. Y obtienen tantos como hagan falta. No hay límite. El Concejo, en reunión plenaria de todos los habitantes, decide cada año, cuantos cuarzos habrá en movimiento y a cuántas fanegas equivalen cada cuarzo según tamaño. Generalmente una fanega son tres cuarzos de una libra. Con diez cuarzos de media libra se obtiene un cuarzo de cinco libras  y con cuatro cuarzos de cinco libras uno de 20 libras que son los más grandes.

Además, el Concejo, en el mismo pleno, decide cuántas fanegas de trigo deberán sembrar cada una de las familias, en función del número de miembros y en consecuencia, entregan simiente para ello. Cuántas más semillas se entregan para la siembra, más arrobas de grano tienen que entregar a la comunidad para el sostenimiento del pueblo. El número de arrobas viene en función de la estimación que hacen cada año, dependiendo el clima, la lluvia, los días de calor, etc. El rango está entre cinco arrobas de recolección por cada arroba de siembra y diez cuando el año es muy, muy bueno. Todo lo que saquen de más, es para cada una de las familias y si hay una desgracia y la familia ese año no puede cumplir con lo pactado, entre todos asumen el problema y la familia en cuestión obtiene ayuda durante el resto del año hasta la nueva cosecha.

Las fanegas que los vecinos pagan al consistorio constituyen el fondo municipal con el que se arreglan calles, aceras, alumbrado, se paga al maestro y el material de la escuela, al médico, la enfermera y el material médico, los servicios para impedidos o cosechas desastrosas y comida para los que ya no pueden trabajar por la edad. Todos los servicios se sostienen con el grano común que es entregado cuando se recoge la cosecha.

Por lo demás, cada familia tiene patrimonio propio y utiliza sus recursos como cree conveniente, siempre que cumplan con lo establecido por la comunidad.

La Rival tiene, como todas las comunidades, otras vecinas. Con algunas se llevan mejor y con otras siempre hay rencillas, nadie sabe muy bien por qué, aunque hay cien teorías sobre ello. Cada comunidad vecina tiene su mina de la que sacan el mineral que utilizan como método de pago entre ellos. Ciencharcos utiliza cubos de pirita. Malaespina, pirámides de Bismuto y Matalosjuncos esferas de amatista.

Tiempo atrás La Rival, Ciencharcos, Malaespina y Matalosjuncos forjaron la Mancomunidad del Castillo para unir fuerzas, con el objetivo de comprar un camión de basura que recorriera todas las unidades vecinales y para la prestación de algunos servicios burocráticos. La experiencia fue muy positiva. Tanto, que estuvieron un tiempo pensando en unir las cuatro comunidades en una sola. Y mientras se decidía cómo, llegaron al acuerdo de comenzar unificando los materiales de pago. Que no sería ni cuarzo, ni pirita, ni bismuto ni amatista. Decidieron que serían unas placas de porcelana redondas y planas, realizadas en el único horno de presión que había en la zona, sito en Malaespina.  Si bien en cada comunidad el anverso sería el de una figura propia, el reverso igual para todos  y con el mismo valor y en cualquiera de las comunidades.

Y así, se llegó al desastre. Ahora, el Concejo de La Rival, ya no puede decidir por sí mismo el valor anual de su moneda de cambio. Ni tampoco en de Ciencharcos ni el de Matalosjuncos. El valor se decide en Malaespina que, por otra parte, adaptó el resto de monedas al valor de la suya. El nuevo Concejo Mancomunal elegido indirectamente por los concejos vecinales, dejó de distribuir las simientes en función del número de miembros de la unidad familiar. Impuso libertad para que cada unidad vecinal estableciera cuotas fijas sobre las semillas que se entregaban de forma que cuanto más sembraras, menos proporción de la cosecha tenías que entregar a la comunidad. Con el nuevo sistema, las unidades vecinales comenzaron a perder habitantes y a tener problemas para sostener sus servicios ya que la gente migraba allí dónde el canon era inferior. Llegado el tiempo en que las vecindades quedaron exhaustas, tomaron medidas drásticas como eliminar la ayuda para malas cosechas y desgracias. Después acabaron dejando sólo una escuela, un médico para todos los municipios y elevando la edad en la que los mayores dejaban de trabajar para vivir a cuenta de la comunidad.

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Fachopea

El nueve de junio hay elecciones la parlamento de la Unión Europea.

Desde que la Comunidad Económica Europea pasó a denominarse Unión Europea con el tratado de Maastricht, se han realizado en España tres reformas laborales a cada cual más lesiva para los trabajadores, cuatro reformas de pensiones que han elevado la edad de jubilación, elevado la cantidad mínima de años cotizados para cobrar una pensión y disminuido el ratio para el cálculo de la misma.

Desde que España se unió a la Comunidad Económica Europea allá por 1985, ha perdido casi todo su tejido industrial empeñándolo todo por ser un país recolector de turismo, lo que ha influido notoriamente en la reducción de los salarios, en el aumento del precio de la vivienda y en el consumo desmedido de agua en zonas en las que es un bien escaso reduciendo las condiciones de vida de los ciudadanos medios y llenando bolsillos de grandes corporaciones y especuladores urbanísticos.

Desde que el Euro entró en vigor como moneda única, España pasó de que todo aquello que valía 100 pesetas se igualó al valor del euro que eran 166 pesetas lo que produjo una inflación notable (el 66 %) que los gobiernos no tuvieron en cuenta. Además, se dejó en manos de Bruselas la soberanía monetaria, lo que nos ha hecho a la mayoría más pobres y a unos pocos mucho más ricos.

¿Para qué sirve un Parlamento que no elige directamente al presidente de la Unión, ni a los “ministros”, que tampoco puede legislar sobre política exterior y en el que ni siquiera la moneda es única?

¿Para qué sirve un parlamento en el que los eurodiputados deben obligatoriamente pertenecer a un grupo, cuyo líder ni siquiera tiene que ser europarlamentario y que no trabaja por el bien de los ciudadanos sino por el de los grupos de presión o lobbys?

¿Para qué sirve una Unión de países que no dudó en pasarse por la piedra a Grecia, porque sus electores no “votaron” lo que convenía a Alemania?

¿Para qué sirve una unión europea que es un adlátere de la OTAN y de USA?

¿Para qué sirve una UE en la que se exige como condición «sine qua non»  que sus miembros sean democracias, si al final no se respetan los derechos civiles de sus ciudadanos como estamos viendo en cualquiera de sus países con las actuaciones policiales contra manifestantes, si desde sus gobiernos se apoyan actitudes fascistas como en Ucrania o contra los derechos humanos como en Israel?

Saquen sus propias conclusiones.

Salud, república y más escuelas.

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