El movimiento político "Vetevendosje", de orientación socialdemócrata y liderado por el joven Primer Ministro Albin Kurti, está impulsando activamente la incorporación de la República de Kosovo a las Naciones Unidas, la Unión Europea y otras instituciones multilaterales. Este pequeño país balcánico, con una población de dos millones de habitantes, ha experimentado las secuelas del conflicto que llevó a la intervención militar de la OTAN en 1999, como respuesta a las matanzas perpetradas por el ejército y la policía serbia contra la población civil de etnia albanesa en la región. Las políticas de "limpieza étnica" lideradas por el dictador serbio Slobodan Milósevic forzaron a más de 800,000 habitantes de etnia albanesa a abandonar el territorio, regresando solo tras la retirada de las tropas serbias y la llegada de las fuerzas de estabilización de la UNMIK, la misión de la ONU para Kosovo.
"Vetevendosje", cuyo significado es autodeterminación en castellano, surgió como un movimiento cívico impulsado por jóvenes indignados por la corrupción en su país y con el deseo de proteger las instituciones democráticas. Inicialmente conocidos por organizar protestas y manifestaciones, finalmente se presentaron a las elecciones, ganando un creciente respaldo de una población compuesta en su mayoría por jóvenes. La fuerte emigración, especialmente hacia Suiza y Alemania, ha representado uno de los obstáculos para el desarrollo económico y social de la antigua provincia yugoslava. La crónica inestabilidad institucional tampoco ha facilitado el progreso.
Albin Kurti, líder de "Vetevendosje" y destacado líder estudiantil en su juventud, asumió el cargo de Primer Ministro a principios de 2020 tras obtener una amplia victoria electoral. En la agenda exterior, el reconocimiento de la independencia de Kosovo destaca como uno de los pilares de la acción del nuevo gobierno. Es relevante señalar que España y la mayoría de los países de América Latina (México, Guatemala, Cuba, Argentina, etc.) no han reconocido aún al Estado balcánico. La afinidad de "Vetevendosje" con los valores y la orientación progresista de los partidos socialdemócratas en varias capitales latinoamericanas puede ser un factor que facilite al Primer Ministro Albin Kurti formalizar relaciones diplomáticas con los países iberoamericanos.
La República de Kosovo está llevando a cabo una activa política exterior en Centroamérica y Sudamérica, estableciendo vínculos tanto con los gobiernos nacionales como con las instituciones regionales (Sistema de Integración Centroamericano, Comunidad Andina de Naciones, Mercosur, etc.). En relación con Centroamérica, el Estado kosovar podría desempeñar un papel de puente y nexo con la región de los Balcanes en diversas áreas (institucional, económica, cultural, etc.). Se observa un creciente interés tanto en Centroamérica como en Sudamérica por expandir las actuales y fluidas relaciones con la Unión Europea a los países del sudeste europeo y los Balcanes. El progreso en el reconocimiento diplomático y las relaciones en todas las áreas con Latinoamérica, sin duda, influirá positivamente en las aspiraciones de Kosovo, una joven democracia comprometida con los valores europeos, así como para su proceso de adhesión a la Unión Europea y futura incorporación a las Naciones Unidas.