Según Gemma Meca, Licenciada en Historia y Máster en Periodismo, señala que "La NASA nos lanza un aviso urgente, no se podrá vivir en algunas provincias de España en los próximos 30 años (que largo me lo fiáis). Llega un esperado cambio de tiempo que estamos viendo ser una realidad en unas jornadas en las que realmente los científicos están centrados y casi que no pueden creer. En esencia estamos ante unos detalles que pueden acabar siendo los que nos empujen a dar un importante giro de guión o de lo contrario, es inviable poder seguir en la misma línea sin que tengamos que afrontar algunas consecuencias. Estas provincias de España será difícil que sean habitables en los próximos años".
"Vivimos ante un cambio que puede llegar a ser el que marque una diferencia importante. De la mano de un tipo de elemento que puede acabar siendo el que marque un antes y un después. Darnos cuenta de los efectos que provoca el ser humano en una serie de elementos que son fundamentales y que quizás hasta ahora nunca hubieras imaginado".
No hay duda, el cambio climático es más intenso de lo que nos imaginamos y sus consecuencias pueden ser terribles.
La NASA lanza un aviso urgente:
"La Tierra está viviendo una serie de cambios que estamos viendo llegar sin casi aviso previo. Habrá llegado el momento de empezar a pensar en todo lo que está por delante y en las posibles consecuencias que podemos tener. Llegan unos cambios que son fundamentales y que quizás hasta ahora nunca le hemos prestado atención".
No nos damos cuenta que "el aumento de la temperatura del planeta es una realidad que puede acabar siendo la que nos acompañe en estos días que estamos viendo llegar. En 2023 en España hubo 6 olas de calor y en Europa igual que provocaron miles de muertos por golpes de calor, de 40°C y más y en lo que llevamos de mes de julio se ha iniciado la primera "ola de calor" con temperaturas superiores a 40°C en la costa y en el interior pueden llegar, según AEMET, a 47-48°C.
"Son momentos del año en los que debemos estar preparados para lo peor, ese termómetro al alza aquí puede tener consecuencias en todo el planeta.
Los expertos de la NASA lanzaron hace unos años un informe en el que advertían de lo que sucedería en 2050( desde nuestra óptica muchos años antes) . Cada vez falta menos para llegar a esta fecha que puede acabar siguiendo una serie de predicciones que parece que se cumplen por momentos. Este alarmante estudio titulado 'Too Hot to Handle: How Climate Change May Make Some Places Too Hot to Live' pone en aviso a unos puntos del planeta que se verán severamente afectados por el cambio climático.
Lo que llega en este momento puede ser una transformación para la que quizás no estamos preparados".
Adiós a vivir en estas provincias de España en 30 años.
Nosotros opinamos que bastantes años antes de 30 años "algunas partes de España quedarán afectadas por este cambio climático que provocará un aumento de las temperaturas que puede ser totalmente insostenible".
Habrá llegado la época de ponerse las pilas si queremos evitar algo tan terrible como lo que dicen los expertos en este informe: «Raymond dice que es difícil predecir cuándo podremos ver temperaturas globales de bulbo húmedo, superando regularmente los 95 grados Fahrenheit (35 grados Celsius). Esto se debe a que es un proceso complejo que está sucediendo gradualmente y se desarrolla de manera diferente en diferentes lugares. Pero los modelos climáticos nos dicen que es probable que ciertas regiones superen esas temperaturas en los próximos 30 a 50 años(insistimos que largo me lo fiáis, esas temperaturas las tenemos ya aquí, en España).
Siguiendo la misma fuente: "Las áreas más vulnerables incluyen el sur de Asia, el Golfo Pérsico y el Mar Rojo alrededor de 2050; y el este de China, partes del sudeste asiático y Brasil para 2070».
Los expertos advierten de que: «Las olas de calor del pasado ofrecen una visión del futuro para las ciudades que esperan un aumento de las temperaturas. Hoy en día, casi un tercio de la población mundial está expuesta a extremos de calor potencialmente mortales durante 20 días al año o más.
Fenómenos como la ola de calor de 2003 en Europa, que se cobró más de 70.000 vidas, serán más frecuentes y graves antes de la década de 2040. Las personas que ya viven en lugares cálidos tendrán que adaptarse a períodos aún más prolongados de calor sofocante, mientras que quienes viven en ciudades más frías estarán expuestas a niveles de calor extremo a los que no están acostumbradas.
Al adaptarse al cambio climático, las ciudades deben prepararse para temperaturas que dificulten y agoten a los ciudadanos moverse al aire libre, que hagan imposible trabajar de manera segura al aire libre( desde nuestra óptica en la actualidad los trabajadores subsaharianos que trabajan a pleno sol repartiendo asfalto en multitud de carreteras estan expuestos a golpes de calor que puede llevarles a la muerte) y que resulte insoportable permanecer en espacios cerrados sin aire acondicionado ni ventilación(de hecho existen barracones en los que estudian primaria, secundaria y bachillerato sufren los intensos calores abrasadores en primavera y otoño y los fríos intensos del invierno). Las ciudades con pocos espacios verdes son varios grados más cálidas que sus alrededores rurales como resultado del efecto de isla de calor urbana. Esto hace que los centros urbanos sean más susceptibles a los extremos de calor que pueden empeorar la calidad del aire, causar deshidratación, golpes de calor, complicaciones cardiovasculares , enfermedades renales y muerte. Los muy jóvenes, los ancianos y las personas con afecciones médicas preexistentes son especialmente vulnerables. Los impactos del calor también afectan desproporcionadamente a los ciudadanos más pobres, que no pueden dejar de trabajar durante una ola de calor y tienen más probabilidades de trabajar al aire libre o en fábricas mal ventiladas». Madrid, la Comunidad Valenciana y Andalucía serán las zonas más afectadas por estas olas de calor que son cada vez más frecuentes.